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TITULO: España Directo - Economía - El mercado del alquiler se ceba con los inmigrantes: el 99% de las inmobiliarias acepta cláusulas discriminatorias ,.
El mercado del alquiler se ceba con los inmigrantes: el 99% de las inmobiliarias acepta cláusulas discriminatorias,.
La
discriminación residencial en Madrid y Barcelona escala casi 30 puntos
porcentuales desde 2020 y contribuye a generar procesos de segregación
urbana, según Provivienda,.
foto / Un anuncio de alquiler de viviendas cuelga de la fachada de un edificio en Madrid, en septiembre del 2021.
"El piso lo tengo ahí, pero no se lo alquilo a panchitos".
Esta fue la respuesta que recibió Alejandro, un joven boliviano que
llegó a Madrid hace algo más de un mes para estudiar un máster en la
Universidad Europea. "Llamas con toda la ilusión, estás en un momento de desesperación, no tienes donde vivir, y encontrarte con una respuesta así te genera bastante impotencia", explica.
Él
y su compañera comenzaron su búsqueda de un piso nada más aterrizar. No
lo hicieron antes por temor a posibles estafas. Pronto se dieron cuenta
de que era muy difícil conseguir respuestas "tanto positivas, como
negativas". Alejandro explica que hacían 25 llamadas al día y que, cuando contestaban, les pedían "demasiados requisitos".
Su
caso no es único. Algo similar le ocurrió a Julieta "Llegamos después
de vender toda nuestra vida para poder venir". Julieta se mudó a Madrid
en abril de este año junto a su pareja, cuando el precio de la vivienda subía un 11,2%,
según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE). En un primer
momento, se establecieron en un Airbnb mientras buscaban un piso que
alquilar. "Por más que el dinero lo teníamos, tenés que tener tantas
nóminas y, algo que me topé mucho, que me preguntaran la nacionalidad", dice a RTVE.es.
Entonces, respondían que eran argentinos y algunos propietarios reaccionaban con alivio. "¿Y si soy de otro lado no? ¿Cuál es el problema?",
se queja Julieta, que asegura que tuvo que cambiar su discurso para
conseguir respuesta cuando preguntaban por un piso: "Al principio, era
decirles somos argentinos. Y después, éramos argentinos con pasaporte italiano. Ahí cambiaban la forma de hablar".
Requisitos: avales de más de 4.000 euros y asegurar que no te embarazarás
"En
Bolivia tenemos uno de los pasaportes más débiles de la región debido a
la situación política y económica en mi país", indica Alejandro. A
pesar de eso, contaba con el respaldo académico y financiero que le permitieron conseguir el visado. Pero no parecía suficiente para conseguir un piso en España.
"Piden avales bancarios españoles que ganen arriba de 4.000 euros,
que pagues la comisión de la inmobiliaria o hasta cuatro meses de
fianza", explica Alejandro. Julieta también sufrió estas condiciones
imposibles de superar y otros requisitos "locos", como firmar que no se iba a quedar embarazada.
“No lo voy a hacer porque no quiero, pero no te tengo que firmar nada.
Aparte era para un contrato de seis meses, no tenía mucho sentido”,
relata.
Como señala este martes la segunda edición del informe ‘¿Se alquila? Racismo y xenofobia en el mercado del alquiler’ de Provivienda, las barreras a las que se enfrentan las personas
migrantes en el acceso a la vivienda se multiplican. Las agencias o bien los rechazan directamente, o bien aumentan los requisitos específicos para acceder al alquiler. En consecuencia, son empujados a vivir en habitaciones de alquiler o subarrendadas.
Empujados a compartir piso
El
mismo día que un propietario le dijo que no alquilaba a "panchitos",
Alejandro encontró el piso que comparte con su compañera. La propietaria
había vivido fuera durante un par de años y era consciente de los problemas a los que se enfrenta un inmigrante
para encontrar un techo donde vivir. "Firmamos el contrato un lunes y
ese mismo día nos mudamos", dice para explicar que la dueña les facilitó
todos los trámites.
Julieta no tuvo tanta suerte. Tras una intensa semana de búsqueda, ella y su pareja tuvieron que conformarse con una habitación en un piso compartido por la que pagan 700 euros.
"La realidad es que se nos va un porcentaje del sueldo enorme", apunta
la docente de universidad. Tras un par de meses sufrió una plaga de chinches, cuya desinfección tuvo que asumir debido a la incompetencia de la agencia.
Por el momento, teletrabaja para una universidad argentina y el sueldo es bajo en comparación con uno español. "Todavía no tengo nómina de acá", explica, porque las empresas no "se arriesgan" a contratarla
a pesar de poder trabajar de forma legal por estar casada con alguien
con pasaporte italiano. Su esposo consiguió trabajo inmediatamente,
aunque en hostelería y no como técnico de sonido, su profesión.
Refugiados: más vulnerabilidad, más riesgo
El acceso a la vivienda es más difícil cuanto más vulnerable es una población. Buscar a contrarreloj un piso es la situación a la que se enfrentan las personas migrantes que llegan a España, que en algunos casos vienen con recursos para poder afrontarla.
Alejandro cuenta con avales bancarios de familiares que viven en España
y Julieta mantiene ciertos ingresos al trabajar para una universidad
argentina.
Este no es el caso de las personas refugiadas,
que dejan atrás toda su vida para escapar de situaciones de violencia
en sus países de origen. Por ejemplo, Fariba, que tuvo que escapar de Afganistán tras 14 años como jueza por miedo a las represalias de los talibanes. Llegó en abril de 2022, con su marido, su hijo y sus dos hijas.
En un primer momento, las personas refugiadas viven en centros de acogida hasta que se resuelva su solicitud de asilo —en el caso de Fariba, un hostal en el que estuvo nueve meses—. Una vez aprobada, "tienen la opción de acceder a unas determinadas ayudas para cubrir sus necesidades básicas, incluida la vivienda" durante un periodo máximo de 18 meses, en palabras del coordinador de Inclusión Social de ACCEM, Daniel Sánchez. En situaciones de extrema vulnerabilidad, el itinerario se puede alargar hasta los 24 meses.
Aun
así, Fariba cree que la búsqueda de vivienda es "uno de los desafíos
para los refugiados", ya que "nadie" les ayuda. En primer lugar, cree
que la ayuda económica que reciben es insuficiente para "pagar una vivienda para cinco personas". En su caso, la cuantía máxima que puede recibir es de 848 euros para asumir el coste de un alquiler. El precio medio de un arrendamiento en octubre de 2024 fue de 12,33 euros por metro cuadrado, es decir, un piso de 80 metros cuadrados supone un desembolso de 986,40 euros, según datos de Fotocasa.
Muchas inmobiliarias conocen la ayuda máxima que pueden recibir estas personas y calculan los alquileres en consecuencia, según la directora de Programas de CEAR,
Raquel Santos. "Casualmente, siempre están en este límite de precios,
cuando son viviendas que no tienen ese valor", asegura y añade que
muchos anuncios advierten que los propietarios del inmueble no alquilan a
personas extranjeras. "Hay un claro racismo inmobiliario", concluye.
Rechazo por falta de empleo
"Estamos encontrando que sufren estafas para acceder a viviendas, que son muy pequeñas y tienen que compartir con otras personas", añade Santos. Este no ha sido el caso de Fariba, que ha podido vivir sola con su familia hasta el momento, pero sí el de Karina. Esta
refugiada ucraniana aterrizó hace dos años y medio en Granada con dos
hijos, uno de ellos con discapacidad. Tras medio año en hostales, tuvo
que compartir piso con una familia colombiana en Sevilla, ciudad en la que sigue viviendo.
"Quería vivir sola, porque de la otra manera es todo un poco más
difícil", explica. Entonces, comenzó a buscar un piso para ella y sus
dos hijos. Buscó "mucho", pero dice que "nadie quiere alquilar piso a una mujer con dos niños pequeños" que, además, no tiene trabajo. Así, estuvo durante casi un año buscando un lugar donde vivir, el cual encontró gracias a Ainhoa, la trabajadora social que la ha acompañado en todo el proceso.
"Es
muy complicado conseguir un contrato de alquiler sin presentar un
contrato de trabajo o un aval", incide Raquel Santos. Por esa razón, el
tipo de viviendas al que pueden acceder los refugiados y los inmigrantes
más vulnerables están en condiciones poco adecuadas, "por no decir lamentables", en palabras de la portavoz de CEAR.
La inclusión laboral de las personas migrantes es fundamental para su acceso a la vivienda, pero es tan difícil encontrar trabajo como alquiler.
"Deberían facilitarnos la búsqueda de trabajo y empoderarnos", explica
Fariba, que cree que, durante esos 18 meses en los que deberían enfocarse en aprender español y encontrar un empleo, "pierden el tiempo" buscando una vivienda.
Apostar por la vivienda social para evitar la calle
Los refugiados se enfrentan a muchos trámites en muy poco tiempo y no llegan a aprender castellano, la herramienta necesaria para tener más opciones en el mercado laboral. Por eso, "en ocasiones", los migrantes más vulnerables terminan en situación de calle,
como admiten los representantes de ACCEM y CEAR a RTVE.es. Como explica
Raquel Santos, las personas refugiadas no han venido con un proyecto y,
por tanto, muchas no cuentan con una red de apoyo que pueda evitar el sinhogarismo o que les ayuden a reconocer posibles fraudes.
Las personas migrantes entrevistadas piden más empatía por parte de los propietarios y de las inmobiliarias
y hacen un llamamiento a las instituciones para facilitar su inserción
laboral, la cual les permitiría acceder a una vivienda. Desde ACCEM y
CEAR también demandan un mayor número de vivienda social pública.
"Hay
una cuestión de mercado que nos afecta a todas y todos –el precio de la
vivienda– y a ellos les afecta más", argumenta Daniel Sánchez, que
añade que al no haber "una vivienda de carácter social con suficiente
alcance" las personas vulnerables, incluidas las migrantes, se van a
encontrar "con muchísimas más dificultades de acceso".
TITULO: Mi casa es la vuestra - Loco’ Gatti ,. Viernes - 11 - Abril ,.
Viernes - 11 - Abril a las 22.00, en Telecinco, foto,.
Loco’ Gatti,.
Empeora la salud del ‘Loco’ Gatti,.
Tal y como informan en Argentina, el exguardameta pasa por dificultades después de una traqueotomía. Lleva 50 días ingresado.
Hugo Orlando Gatti, mítico portero argentino conocido popularmente como el ‘Loco’ Gatti, pasa por un momento delicado de salud tal y como han informado los medios argentinos. Olé y TyC Sports, dos de sus diarios más reputados, explican cómo su estado ha empeorado después de que se le realizase una traqueotomía. A sus 80 años, su pronóstico continúa siendo reservado pero el panorama no es nada halagüeño.
Gatti, exfutbolista y también colaborador de El Chiringuito, lleva algo más de 50 días ingresado en el Hospital Pirovano de Buenos Aires. Sufrió una caída mientras paseaba a su perro y la cirugía de cadera que le tuvieron que realizar se complicó, pues contrajo un virus en el postoperatorio que derivó en una neumonía y una insuficiencia renal.
Así pues, las próximas horas serán cruciales para la salud de Hugo Gatti, quien ya en 2020 estuvo ingresado en estado crítico tras ser contagiado de covid-19.
“Me dijeron que estuve cerca de morir”, dijo el arquero meses después
de restablecerse de ese envite. Ahora, cinco años más tarde, vuelve a
tener problemas serios de salud.
TITULO: Detrás del muro - PÁGINA DOS - Emma Heming , Martes - 8 - Abril ,.
Se casó con el actor Bruce Willis[2] en Turcas y Caicos el 21 de marzo de 2009. Entre los invitados estuvieron la exmujer de Willis, Demi Moore, sus tres hijas, y el exmarido de Moore, Ashton Kutcher. La ceremonia no era jurídicamente vinculante, por lo que seis días después se casaron en una ceremonia civil en Beverly Hills.[3] La pareja tiene dos hijas: Mabel Ray, nacida el 1 de abril de 2012, y Evelyn Penn, que nació el 5 de mayo de 2014.[4]
Carrera
Heming fue una modelo portavoz para la compañía de lencería La Senza.[2] En 2005, la revista Maxim la ubicó en el número 86 de su lista de "Top 100".
Ha realizado publicidades para Diore Bronze, Escada, Gap, Garnier, Intimissimi, John Frieda, Minelli, Oceano, Palmers, Redken y el perfume Sonia Rykiel. También ha aparecido en las portadas de revistas como Elle en Francia, Glamour en Estados Unidos, Town and Country y W Magazine.
Tiene un contrato con Models 1 de Londres, Mikas de Estocolmo, Visage Model Management en Suiza, Diva Models en Dinamarca, IMG New York, Elite Model Management en Barcelona, Next Model Management en Milan y The Fashion Model Management en Milan.
TITULO: Cartas de amor - 5 poemas de ‘Cómo guardar ceniza en el pecho’, de Miren Agur Meabe ,.
5 poemas de ‘Cómo guardar ceniza en el pecho’, de Miren Agur Meabe ,.
foto - Cómo guardar ceniza en el pecho es un poemario
que aborda sin pausa la somatización de los sentimientos, la herida
hecha voz, un mensaje que se manifiesta gaveta a gaveta porque la
escritura sostiene la capacidad de ceder la palabra al dolor sin
prescindir de la facultad de ironizar sobre los malestares propios y del
mundo.
En Cómo guardar ceniza en el pecho laten la memoria de
la infancia trenzada con los aprendizajes que aporta el paso del tiempo,
la reconstrucción personal y la reflexión sobre la escritura. Meabe
ha construido una de las obras más reconocibles en lengua vasca en un
ejercicio sostenido de unión entre tradición y vanguardia.
Desde el daguerrotipo, que ensombrece el mundo perdido, hasta la
vídeo-instalación, la diversidad temática y formal acompaña a esta
autora en una secuencia que revisa el peso de la vida.
Zenda adelanta cinco poemas de esta obra, merecedora del Premio
Nacional de Poesía 2021, la primera obra escrita en euskera que consigue
este premio.
CHARCO EN EL MUELLE
Te miras en un charco del muelle y un velo de arcoíris
esmalta tu semblante, rastros de gasoil que te conducen a
un remoto paraíso.
La luz saca la lengua por última vez antes de que en el agua
se borre tu ectoplasma. Te ves dentro, como una Ofelia
que acepta junto al sauce su accidente.
Discutes con los círculos que la punta del paraguas dicta
en tu reflejo.
La luna trae a remolque barcas sanándose al sol, galipote,
huellas en la arena que la misma arena desmaña, sangre,
redes, olor a algas en el pelo, a salitre en la falda.
Susurras una canción que habla de remos.
Tu fortuna se predijo cuando la pupila de aquel delfín
moribundo se enredó en tu pupila: “Con tu aliento
inflarás las velas. Con purpurina vestirás las anclas”.
Te tapas los oídos por no escuchar la voz letal de un
marinero.
Adoquines salpicados de pintura, maquillaje de fiesta.
Delantales de mahón en los balcones, lentejuelas de
escamas. Bolardos oxidados, inmóviles carrozas.
Llevas en las muñecas dos estrobos, sogas de palabras que
te atan a nada.
¿Por qué no aprendiste a jugar con anzuelos? A ti, que
confiabas en la nobleza de los peces, te roen ese corazón
tuyo empeñado en investigar nuevas fórmulas de botánica.
Quisieras pescar en la hondura del pozo y sacarte a ti
misma.
Pero el hilo se rompe.
Y tu imagen se escapa.
Y el agua vaciada deja que te alejes surcando cenizas, en el
puerto, sola.
***
MARY SHELLEY Y SU PIANO TRANSPARENTE
El piano era transparente, el armazón, la tapa, las cuerdas
blancas. Mary Shelley estaba sentada en la banqueta ante
una palmera enana, la palmera bajo una cristalera, la
cristalera repujada con escamas de alabastro. Aquellas
láminas podían ser sus senos aplastados, porciones de su
lengua cortada, el esquema de sus lóbulos cerebrales, la
pista circense de sus ojeras.
En el vestíbulo del buque, Mary la pálida tocaba por su
madre muerta, por sus hijos muertos, por su hermanastra
F. muerta de frío, por las líneas no nacidas. Dos hombres
pasaron junto a ella con chalecos salvavidas, pero no la
vieron. Y ella aporreaba las teclas como si sus manos fueran
las mazas de un galeón luchando en la galerna. A merced
del temporal estaba su amado, en trance de muerte, a
punto de morir para dejarla sola una vez más, como toda
su vida, una vez más y siempre: “Tú, secretaria mía,
ordena mis papeles y los tuyos. Ámame”.
Y de las teclas se alzaban jirones de vapor y cada uno era un
fantasma: la madre no madre, los hijos que se tragó la noche,
la hermana aniquilada por la distancia, los textos
abortados. En sus alveolos pulmonares, en los secos
estrógenos de sus cincuenta y tantos años, en sus castillos
celulares, en su alma huérfana, palpitan un rumor de
electricidad, una gárgola de carne, una semilla repetitiva,
un hilván que se le posa en las sienes cada vez que la aguja
corta del reloj le apunta al corazón.
Mary Godwin, luego Shelley, no muy lejos de aquí se ahoga
tu amado. Y Byron, de pie ante una gruta marina, aúlla
tonterías tales como que el amor es parte de la vida para un
hombre, pero para una mujer es toda su existencia. Y ahora,
en Porto Venere, los ambientadores para hogar llevan su
apellido y se venden en pomitos que imitan perfumes de
Chanel. En el espigón dejan sus grafitis George Sand,
Montesquieu, Passolini, Dante. Unas pocas palabras bastan
para que la historia se convierta en corteza de sal en la
bóveda de San Pietro o en las bodegas de los pescadores de
Liguria.
Mary no espera aplausos. Pasa la partitura digital sobre el
piano transparente, y practica trémolos y escalas mientras
se atraganta con sus llagas, sus ideas, sus letras, sus
socavones. Ha perdido las gafas, no ve nada. Los altavoces
políglotas anuncian la hora de la cena, las gaviotas vomitan
nanas, los científicos teorizan sobre el poder de la poesía
para restituir la vida a la materia inerte y los nuevos
Prometeos reniegan de su destino.
Todo es una gran cicatriz.
EL ASTILLERO
La madera, como tela musculada,
a las órdenes de los sastres carpinteros:
olmo para el codaste y la roda;
acacia para los barraganetes;
teca y pino para las tapas;
para cualquier miembro, eucalipto.
El latido del bosque,
ignorante del mar.
Y las raíces lejos,
anclas cautivas en tierra,
maldiciendo a la rosa de los vientos.
ENTOMOLOGÍA
Las mariposas rugimos sin dientes a los tifones,
como balas de cañón.
Nuestros ojos cosechan la vida en mosaico.
Hallamos el equilibrio
entre lo que es y lo que no es
sondeando las plantas que crecen delante,
midiendo las amenazas que llegan por detrás.
A veces sobrevivimos gracias al letargo,
sin acelerar el vuelo,
y aceptando los cuidados del tiempo y de la lluvia.
Otras veces nos aprisionan delgados alfileres
y morimos con las alas desplegadas
en una placa de corcho, como en un cielo artificial.
EXORCISMO
Las ciruelas caen sobre la hierba
como obedeciendo a una partitura.
El árbol se desprende de lo maduro:
la rama no es ya el lugar del fruto.
Nosotras, sin embargo, obcecadas
en anudar el amor y su secuela.
Igual que el mar clarea en la ribera,
no tienen el mismo tinte la lesión y su estela.
Mi amiga A. y yo reímos en el prado,
saboreamos prunas y leemos sonetos
escupiendo con ímpetu los huesos.
Para linchar fantasmas nos bastan estas balas.
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