TITULO : Noche de Cine - Espejismo antes de la desaparición total,.
Espejismo antes de la desaparición total,.
foto / La mediopatía causa ansiedad en el escritor de hoy. Yo espero quitarme de la mía, que no sé si ha sido grande o chica —habría que ver en comparación con la de quién—, así que escribo esto, entre otras cosas, para recordármelo.
Hemos hecho una sociedad tan mediática, el número de medios de todo tipo es tan extraordinario, que supongo normal que todos (no sólo los escritores) nos hayamos vuelto unos mediópatas del copón. Hoy no se es por lo que se hace, sino por lo que se sale. Visibilidad, lo llaman, una cursilería: el escritor no necesita visibilidad, al contrario, la visibilidad es un síntoma, una prueba de banalidad en el escritor. Hoy “existimos” allí, en los medios, lo cual es un engaño a los demás, pero, primero de todo, a nosotros mismos. Los medios se dejan porque son muchos y necesitan contenidos, a ser posible, gratis. De entre todos nosotros, aquí el que más y el que menos se ha convertido en un manipulador informativo sobre sí mismo y sus cosas: diminutos Goebbels atómicos repitiendo la bondad propia, la excelencia propia, y, además, la extraordinaria laboriosidad propia (tan afanados en el proyectarnos). Hoy cada cual tiene que vender lo suyo, desde el político hasta el poeta pasando por el guapo, la bella o el más zafio del lugar. También las “buenas personas” venden mucho su bondad bondadosa. El mediópata es un psicópata del salir, del figurar: un “maquiavelista» de sí mismo y de cómo volver a aparecer. El problema es que somos “buenas personas” allí, en los medios. Somos “grandes poetas” —o poetas que dan recitales y presentan libros y participan en eventos por zoom— afuera, en las pantallas. Somos decentes narradores o extraordinarios benefactores de la sociedad o la cultura allí, en el espejo que miran los demás y miramos nosotros mismos como brújula para saber si lo estamos haciendo bien. Espejito, espejito… Malos parámetros. La mediopatía es un espejo que, para unos, ejerce de pared que les impide llegar a la escritura, y, para otros, ejerce de pared que les impide llegar a la lectura. Así que unos mal escritos y los otros mal leídos, los que deberían leer se quedan con el espejismo de la imagen que proyectan los que escriben, sin alcanzar a leerlos, y los que escriben se quedan con la imagen que proyectan de sí mismos, a menudo sin haber escrito, y, también, sin haber sido leídos. Cada cual mirando su pared, su espejo, enganchados, porque la mediopatía es adictiva.
El mediópata quiere salir cada vez más, cada vez más y cada vez mejor. El mediópata, además, es un celoso de cómo salen los otros. Y, en cuanto que celoso, por supuesto, también, el mediópata es un mediocre. El espejismo que proyectamos y permitimos que nos configure e identifique es el mejor ejemplo de disgregación contemporánea. Ya no vivimos en nosotros. Estamos, como diría Josep María Esquirol, “disgregados”, afuera de nosotros, volcados hacia ese espejismo sin valor: publicidad, es decir, nada. El escritor de hoy no es por ser leído, no es por lo que ha escrito, sino porque aparece, o al menos eso han creído muchos de los que aparecen continuamente, y los hay que aparecen incluso sin haber escrito nada. Aparecer en vez de ser. Esto es perverso. A menudo, la imaginación del escritor está sirviendo más a la tarea de conseguir aparecer bien y más que a la de escribir. Pero es perverso, sobre todo, porque cualquiera puede atesorar un talento inusitado en el arte de aparecer, sin que ese talento se compadezca con haber escrito una obra. Conferimos valor al espejismo y el espejismo, aunque ficción, no es la literatura.
Los eventos del libro, errados en los valores, potencian el vender en vez del conocimiento: el espejismo de la venta en vez de la palabra de los que escriben obras de arte. Para el fomento del comercio de libros no hacen falta autores (para eso nunca han hecho falta autores, pero menos ahora), así que los eventos de libros se llenan de frikis, de estrafalarios autóctonos, de “personajes”. ¡Ah, la mala educación del friki, no sabe de los valores del escritor! Leemos poco, valoramos al que aparece, lo valoramos porque aparece y lo juzgamos por cómo aparece, y hasta ahí llegamos. Desconocemos al que no, y, por supuesto, desconocemos lo escrito por los unos y por los otros. Es fácil dar gato por liebre.
Un día de estos, alguien, aun imbuido del espejismo, seguidor de los dioses que espejean, se pondrá a leer en serio y descubrirá que los dioses, a los que creía conocer sin lecturas, eran sólo los más frikis del lugar (sin nada decente que se les pudiera leer), mientras los escritores apreciables eran otros, que, posiblemente, a esas alturas, ya no aparecerán —ni se querrá que aparezcan ni querrán aparecer— por ningún lado.
TITULO : LUNES - 24 - MARTES - 25 - Junio - CINE - El increíble Hulk,.
TITULO : DESTINO DE PELICULA - Cine - Blinded by the Light (Cegado por la luz),.- TITULO:
Yo soy Erasmus - La protesta propalestina se instala en la Complutense ,.
Sabado - 22 , 29 - Junio , la 13:25 por La 2, fotos,.
La protesta propalestina se instala en la Complutense ,.
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Yo soy Erasmus - La protesta propalestina se instala en la Complutense ,.
Sabado - 22 , 29 - Junio , la 13:25 por La 2, fotos,.
La protesta propalestina se instala en la Complutense ,.
Universitarios de Madrid se suman a las protestas con una acampada "contra el genocidio" en Gaza,.
- Los estudiantes exigen que las universidades y el Gobierno corten toda relación con el país sionista ,.
- Las protestas, que empezaron en los campus de Estados Unidos, se han convertido en un movimiento global,.
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La oleada de protestas propalestinas originadas en los campus de Estados Unidos y que se extendieron a varios países del mundo también ha llegado a España. Primero fue Valencia y otras comunidades y ahora han llegado a Madrid, donde los estudiantes han decidido acampar de forma indefinida hasta que se cumplan sus reivindicaciones. El Bloque Interuniversitario de Madrid, una agrupación de asociaciones propalestina de las diferentes universidades de la capital, ha convocado este martes una asamblea en Ciudad Universitaria para exigir a las universidades y al Gobierno español el cese de toda relación con Israel. Participan la Universidad Autónoma de Madrid, la Complutense, la Carlos III, la Rey Juan Carlos, la Politécnica, la de Alcalá y la UNED.
Los estudiantes se han reunido frente al monumento conmemorativo a los voluntarios de las Brigadas Internacionales, en Ciudad Universitaria, donde se puede leer el mensaje “sois la historia, sois la leyenda, sois el ejemplo heroico de la solidaridad y de la universalidad de la democracia. Dolores Ibárruri (1-XI-1938)”. Ahí han exigido el cese de relaciones entre España e Israel. “Queremos señalar la complicidad que tienen nuestras universidades y nuestro Gobierno con el genocidio que está ocurriendo en Palestina. El Gobierno mantiene la venta de armas a Israel y, aunque hace declaraciones para reconocer al Estado palestino, no rompe relaciones. Queremos denunciar esta hipocresía”, explica Daniel Maire-Richard, portavoz de la Acampada por Palestina, a RTVE.es.
Entre aplausos, gritos y proclamas como “¡que viva la lucha del pueblo palestino!” o “¡Palestina vencerá desde el río hasta el mar!”, los portavoces del Bloque Universitario por Palestina han exigido la “ruptura de relaciones con Israel, el fin del comercio de armas, la ruptura de convenios de investigación y de programas de intercambio de alumnos y el fin de las relaciones económicas y sociales con toda empresa cómplice del Estado de Israel”.
Al finalizar el discurso, han establecido una acampada en el Campus de Ciudad Universitaria, ya que argumentan que “es el único medio para alcanzar nuestro fin”. La acampada, según otra de las portavoces del Bloque, Aida, es indefinida. “Estaremos aquí hasta que se cumplan nuestras exigencias”, asegura a RTVE.es.
Apenas diez minutos después, varios de los asistentes se han puesto a levantar una veintena de tiendas de campaña en los campos de césped que hay enfrente de la Casa del Estudiante. En un lateral de la plaza, un grupo de profesores, en su propia asamblea, proponían dar clases en las calles y ofrecer tutorías a modo de clases de apoyo para mostrar su respaldo a los jóvenes. “Son los estudiantes los que están llevando la iniciativa. Nosotros solamente estamos aquí para apoyarlos y protegerlos”, ha afirmado Eva Aladro Vico, Catedrática en teorías de la información de la UCM.
Un movimiento estudiantil que se ha convertido en global
Esta acampada surge en plena ola de manifestaciones propalestinas en universidades de Estados Unidos y varios países europeos. El movimiento estudiantil empezó a mediados de abril en la Universidad de Columbia de Nueva York, donde los estudiantes montaron un “campamento de solidaridad con Gaza”, llenando el patio de la universidad con tiendas de campaña y barricadas en las entradas. Desde entonces, las protestas se han extendido a universidades de todo el país. Hay más de 2.000 detenidos y varios campamentos han sido desalojados por la Policía.
Las protestas también han llegado hasta las universidades de Canadá, México, Australia, Francia o Reino Unido. En España, estudiantes de diferentes campus en Valencia, País Vasco, Aragón o Cataluña también han empezado a movilizarse. “Hay muchos jóvenes que todavía no son capaces de procesar que está habiendo un genocidio en Palestina y una ocupación y nos gustaría intentar animar a la gente para que vengan con nosotros a protestar. Muchos se piensan que esto comenzó el 7 de octubre, pero no es así. Llevan más de 75 años de ocupación ilegal y masacre a civiles”, comenta Nelly El Rifai, que estudia Relaciones internacionales y Derecho.
““Estamos recogiendo la antorcha de las universidades estadounidenses, donde ha habido una represión espantosa”, ha afirmado Juan Pedro Ruiz, profesor de ecología humana en la UAM. “
Saad Yousef, miembro de la Juventud Palestina Al-Yudur, asegura que este movimiento “no es una cosa exportada de Estados Unidos” sino que entre todos se inspiran. “Nuestra obligación como internacionalistas y como personas de conciencia es seguir señalando la complicidad con Israel y seguir denunciando el genocidio”, afirma, aunque reconoce que es “bastante pesimista con la posibilidad de que el Estado español modifique su lugar en la escalera imperialista”.
Las universidades, germen del pensamiento crítico
“Las semillas hay que plantarlas. Yo creo que ha llegado el momento de Madrid y de España. Vamos a ver cómo esto prende y si la gente se va implicando”, cuenta Juan Pedro a RTVE.es. Su colega, la catedrática Eva Aladro, denuncia que es la primera vez "se presencia un genocidio en directo" y se ve en redes sociales cómo niños y bebés siguen siendo asesinados. “La universidad tiene que tomar una clara posición llamando a la conciencia. Las universidades estamos llamadas a defender la humanidad”, afirma. Coincide con ella Juan Pedro, que recuerda que “la universidad siempre ha sido y debe ser un sitio de vanguardia”.
Julia, estudiante de primero de Derecho, cuenta a RTVE.es que hay ciertos profesores que tienen una visión muy contraria y que por lo general tratan el tema muy por encima “porque al parecer no les gusta entrar en polémica”. Tiene claro que las acciones de la comunidad de estudiantes puede llegar a tener mucho impacto, pero reconoce que “no solo está en nuestra mano”.
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha pedido a los rectores mantener “la política fuera de las aulas”, algo en lo que no coincide la catedrática. "Defender la vida humana no es una cuestión política”, denuncia. “La medida de censurar las manifestaciones de los estudiantes es política, lo que no es política es que los estudiantes se revelen frente a un crimen, a una masacre”, señala a RTVE.es.
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