BLOC CULTURAL,

BLOC CULTURAL,

viernes, 31 de octubre de 2025

DESAYUNO CENA FIN DOMINGO - REVISTA BLANCO Y NEGRO - Encuentro del sector - David Alandete, periodista ,./ Las rutas Capone - Subida al Pico Acebo por la Senda del Castañal, bajando por el Alto de las Cruces,.

 

 TITULO:  DESAYUNO CENA FIN DOMINGO -  REVISTA BLANCO Y NEGRO -   Encuentro del sector -  Encuentro del sector - David Alandete, periodista ,.

 DESAYUNO CENA FIN DOMINGO - REVISTA BLANCO Y NEGRO -  Encuentro del sector - Encuentro del sector - David Alandete, periodista ,. fotos,.

 Encuentro del sector - David Alandete, periodista,.

Sobre cómo le afectó la dana: «Nos sentimos muy abandonados. Mi madre, con movilidad reducida, no pudo bajar de casa en dos semanas»,.

Para muchas familias valencianas, aquella tarde y los días posteriores siguen siendo un recuerdo crudo y difícil de asimilar,.

David Alandete, periodista, sobre cómo le afectó la dana: «Nos sentimos muy abandonados. Mi madre, con movilidad reducida no pudo bajar de casa en dos semanas» ,.

Hace un año, la costa levantina quedó marcada para siempre por un episodio meteorológico que desbordó todos los pronósticos. La dana del 29 de octubre de 2024 no fue solo un fenómeno atmosférico de intensidad extraordinaria, sino también un acontecimiento que alteró vidas, hogares y paisajes familiares. Aquel temporal dejó barrios enteros inundados, carreteras impracticables, pueblos incomunicados y una sensación de vulnerabilidad que todavía hoy permanece en la memoria de quienes lo vivieron. Para muchas familias valencianas, la tarde de aquella dana y los días posteriores siguen siendo un recuerdo crudo y difícil de asimilar.

 

 La Gavilla

( Desayuno)

Entre quienes vivieron la situación de cerca se encontraba David Alandete, corresponsal de COPE y ABC. En una intervención en el canal Trece, relató con detalle cómo él y su familia afrontaron aquellos momentos.

El periodista evocó las primeras horas del temporal con un marcado tono de desasosiego. «Fue muy duro, fue muy duro, nos sentimos muy abandonados», afirmó. No se trató únicamente del impacto material, sino de la sensación de aislamiento frente a una emergencia que superaba la capacidad de respuesta local. Su hermano, relató, quedó atrapado en plena carretera: «Mi hermano que trabaja en Picasén, había tomado la antigua AP-7 y me llamaba para decirme que había rescatado a una mujer mayor y la llevó hasta lo alto de... sabes estas rotondas en Valencia, hay algunas rotondas en las que tienen apisonadoras que se utilizaban antes y las dejan ahí encima, pues pasaron la noche allí con otras familias, no tenían forma de llegar a ningún servicio de emergencias y gracias a la COPE, que dio sus coordenadas en uno de los boletines, pudieron saber dónde estaba». Esa improvisación, esa cadena de llamadas, emisoras y avisos, constituyó para muchos la única vía para obtener ayuda.

 

 Huevos rotos con patatas y jamón serrano - ¡Listos en 30 min!

( Cena )

Por otro lado, su madre, con movilidad reducida, quedó confinada en casa durante casi dos semanas. «Mi madre con movilidad reducida no pudo bajar de casa en casi dos semanas, se acababa la comida, se acababan los enseres básicos de higiene y gracias a la enorme solidaridad, vino gente desde Asturias con excavadoras, vino gente con palas, de todo el mundo. Acamparon en unas condiciones muy duras en un polideportivo», recordó. La llegada de voluntarios, en algunos casos procedentes de cientos de kilómetros, puso de manifiesto el papel fundamental de la ayuda ciudadana frente a la lentitud de los dispositivos institucionales.

Desamparo por parte de las instituciones

La solidaridad, sin embargo, convivió con una profunda sensación de desamparo: «Fue muy duro, fue muy duro, nos sentimos muy abandonados, muy abandonados, muy abandonados por el Gobierno central, muy abandonados por el gobierno de la Generalitat de Valencia, pero muy acompañados por los alcaldes». Entre quienes estuvieron a pie de calle, el periodista destaca la figura del alcalde de Algemesí: «El alcalde de Algemesí estuvo quitando barro como el que más, estuvo sin dormir varios días y la gente a pie de calle, de verdad, ayudó a que aquello fuera más llevadero, pero las cicatrices son muy duras».

Hoy, el recuerdo persiste no solo en las fotografías de las calles cubiertas de barro o en las cifras de fallecidos, sino en las emociones que emergen cuando se recuerdan aquellos días. Porque, como confesó el periodista, las cicatrices siguen ahí, y no solo en los muros y carreteras, sino en una memoria colectiva que aprendió, quizás a la fuerza, que la vida puede cambiar en una tarde y que, a veces, la ayuda llega antes de quienes menos lo esperamos.

TITULO:  Las rutas Capone - Subida al Pico Acebo por la Senda del Castañal, bajando por el Alto de las Cruces,.

  Subida al Pico Acebo por la Senda del Castañal, bajando por el Alto de las Cruces,.

 Foto deSubida al Pico Acebo por la Senda del Castañal, bajando por el Alto de las Cruces

fotos / Ruta asequible, sin dificultades técnicas, que recorre zonas boscosas muy bien conservadas, en época de berrea nos puede permitir verla y escucharla. Por la fecha de la ruta el terreno estaba muy seco, por eso no hubo dificultades, lo normal es que tenga barro que puede hacer que sea algo peor de caminar y en la primera subida y ultima bajada tengamos que ir con mas cuidado. 

Foto deSubida al Pico Acebo por la Senda del Castañal, bajando por el Alto de las Cruces

Salimos de Coó en dirección al área recreativa y la iglesia, para tomar el sendero que va subiendo por zona boscosa algo empinada hasta llegar al desvió de la ruta del Castañal.
Esta travesía nos deja tras cruzar una zona boscosa bien conservada con muchísimos acebos en la falda del Pico Acebo, una vez ahí ascendemos hasta su cima (la senda del requete) cerca esta la cima del Mozagro, pero se puso a llover y con niebla y no pudimos acercarnos, pero esta muy cerca.
Bajamos desde el Pico Acebo hasta la Cabaña y fuente de Salces, este es el tramo con mas pendiente de toda la ruta.
Del la cabaña de Salces seguimos el cordal hasta la Cruz y giramos 90º a nuestra izquierda para bajar por la loma hasta el Prao de la Maestra, donde esta el refugio de de la Estranguadía, volvemos otra vez a zona boscosa.
Seguimos descendiendo y nada mas salir del Prao de la maestra encontramos una cruz de metal y al poco el cruce por el que pasamos anteriormente para el Castañal, seguimos descendiendo hasta Coó, donde ponemos fin a esta ruta.

No hay comentarios:

Publicar un comentario