Atención obras - Cine - Enrique Villén ,.Viernes - 10 - Enero ,./ Detrás del instante - Simone Fattal, artista: “No me creo a la gente que dice: ‘Soy de un país, esta es mi identidad”,. / TARDE DE CINE CON - Tiago Rodrigues, dos madres coraje y el Real Madrid del teatro ,. / Historia de nuestro cine -Cine - El gran Vázquez , Viernes - 10 - Enero ,.
TITULO:Atención obras - Cine - Enrique Villén ,. Viernes - 10 - Enero ,.
Viernes - 10 - Enero ,. a las 20:00 horas en La 2, foto,.
De vocación tardía, con 16 años trabajaba en salas de fiestas, era showman, monologuista, humorista, cómico e imitador y trabajaba en salas por toda España. Más tarde se enroló con la compañía Juan sin Miedo haciendo títeres en televisión.
En 1995 inicia su colaboración con Álex de la Iglesia en El día de la bestia, aunque en esa ocasión su papel de guardia de seguridad apenas se mantuviese un par de minutos en pantalla.
Encarna personajes de reparto en filmes como Libertarias (1996) -donde interpretó a un miliciano- y Matías, juez de línea (1996).
En 1998 Fernando León de Aranoa se fijó en él para interpretar en Barrio
a un hombre de mediana edad cuyo matrimonio naufraga y que se ve
obligado a mudarse de su casa a una furgoneta. El éxito comercial de la
cinta revirtió en un mayor número de ofertas en películas como Volavérunt o La mujer más fea del mundo.
En 2000 intervino en La comunidad
donde encarna a un vecino dispuesto a robar el dinero de un muerto y
que fallece en el intento de manera espeluznante. Por esas fechas logra
el papel de pretendiente de Pilar Bardem en la serie Abierto 24 horas. En 2001, da vida a Teo Navarro compañero de Fele Martínez, un duro policía en la película Tuno negro de Pedro Barbero.
Compagina sus trabajos cinematográficos con incursiones en series televisivas como Aquí no hay quien viva, en la que parodia al hombre trabajador cuyo hijo (Roberto: Daniel Guzmán) se iba a casar con la hija (Lucía: María Adánez) de un hombre corrupto (Rafael: Nicolás Dueñas).
En 2004 Álex de la Iglesia le encomienda en Crimen ferpecto
el papel de inspector de policía cuya mujer agujerea los condones que
él utiliza con el fin de quedarse embarazada. Este rol quedó asociada
con la imagen más característica del actor: un hombre hastiado,
resignado, incrédulo, situado en la clase media baja.
Ese año comenzó su relación profesional con José Luis Garci en Tiovivo c. 1950,
en la que representa el papel de oficinista de un banco que ayudaba a
un compañero a simular ser el director de la sucursal a la vista de sus
parientes del pueblo.
En 2005 repetiría con Garci en Ninette, donde el actor interpretó a Armando. Completó el año rodando Princesas
-donde incorporó al dueño de un bar que accedía a ayudar a una
prostituta latinoamericana a hacerse pasar como camarera a los ojos de
su familia-, El penalti más largo del mundo-en la que Enrique Villén repitió su rol de hombre agotado y que esta vez ejercía de entrenador de un pésimo equipo de fútbol-, y en Torrente 3, donde Santiago Segura
le encomendó la misión de satirizar a los policías corruptos instalados
en puestos de alta responsabilidad. Repetiría este mismo papel en Torrente 4 (2011).
En 2006 aparece en un episodio de Los hombres de Paco interpretando al padre de Rita (Neus Sanz). En ese año estrenó Los managers donde el actor interpretó al agente de dos cantantes novatos, La distancia -dando vida al dueño de un bar de estriptis-, y Los Borgia, donde encarnó a un enemigo de Rodrigo Borgia (Lluís Homar)
cruelmente torturado. De esta manera su filmografía se debate entre el
cine social -ya sea en vertiente dramática o cómica- y el cine de
prestigio, dando vida casi siempre a "hombres de la calle". Como El Tuerto de Siete mesas de billar francés,
un hombre que pierde la vista y roba a sus compañeros de un equipo de
billar a pesar de la preocupaciones que manifiestan algunos de ellos
(Fele: Raúl Arévalo) por él. En Luz de domingo vuelve a interpretar a un miembro de clase proletario y que sirve al cacique del pueblo (Carlos Larrañaga),
y que le ejecutará al traicionarle. Por su papel la Unión de Actores le
recompensa con una segunda candidatura, esta vez como mejor actor de
reparto.
En 2011 participa en la ficción para TVE ( Plaza de España.) Ese
mismo año hace su quinta película con José Luis Garci, que lleva por
título Holmes & Watson. Madrid Days. También en el 2011, y a las órdenes de Miguel Bardem, graba el telefilme Matar a Carrero para TVE.
TITULO:
Detrás del instante - Simone Fattal, artista: “No me creo a la gente que dice: ‘Soy de un país, esta es mi identidad” ,.
Miércoles - 8 - Enero a las 20:00 horas en La 2 / fotos,.
Simone Fattal, artista: “No me creo a la gente que dice: ‘Soy de un país, esta es mi identidad”,.
Simone Fattal, en su piso parisiense, cerca de los Jardines de Luxemburgo.
La
artista de 82 años evoca una biografía fascinante entre Oriente
próximo, Europa y Estados Unidos, mientras prepara su exposición en el
IVAM de Valencia,.
Los muebles de Simone Fattal (Damasco, 82 años) no son solo muebles,
son vestigios de su paraíso perdido. Proceden de la casa de sus padres
en Damasco, y acumulan una pátina de años. Ella tiene especial apego a
un magnífico sillón amarillo mostaza. “Originalmente era rojo, y en él
se sentaba mi padre”, rememora. Estamos en su piso parisiense, cerca de
los Jardines de Luxemburgo. El suelo está cubierto de exquisitas
alfombras persas y turcas, algunas procedentes también de la casa
familiar, otras compradas en los años setenta. Sentada en el sillón con
su atuendo de seda azul y un tobillo vendado (fue atropellada hace unas
semanas por una bici), la artista irradia cierta autoridad serena.
TITULO:TARDE DE CINE CON - Tiago Rodrigues, dos madres coraje y el Real Madrid del teatro ,.
Tiago Rodrigues, dos madres coraje y el Real Madrid del teatro,.
El
creador portugués, siempre combativo en lo político, presenta en España
la Hécuba que estrenó en el Festival de Aviñón; una historia que mezcla
el mito clásico de Eurípides con los abusos del siglo XXI,.
Tiago Rodrigues presume de llegar al Canal con los mejores, "con un equipo de alta competición, los de la Comédie-Française, con el Real Madrid del teatro",
puntualiza el dramaturgo y director. "Siendo de Portugal, con Figo, mi
ídolo de la infancia, y con Cristiano Ronaldo, no puedo ser de otro...",
sonríe un hombre que, en contraposición a ese poderío del club blanco,
se siente cómodo en la austeridad de los escenarios: "Quizá el teatro sea el hermano pobre. Es como la agricultura ecológica o un mercado de barrio. No somos un gran supermercado y eso nos hace más libres que otras formas de expresión artística o de comunicación".
Así regresa el autor a España; esta vez, con 'Hécube, pas Hécube', la pieza que montó en la Cantera de Boulbon durante el Festival de Aviñón
–del que también es director– y que le ha supuesto su primera
colaboración con la citada Comédie. Sin embargo, las dimensiones de
aquel estreno son imposibles de reproducir en la Sala Roja de los
Teatros del Canal. "Se pierde la experiencia inolvidable del cielo
abierto y de estar en mitad de la naturaleza, pero se gana en intimidad.
Se puede ver la sutileza de estos actores", explica de un montaje
concebido como "bilingüe", dice, "para estar al aire libre y en la sala
de teatro". Sin renuncias. "Solo es una traducción".
"Una madre que exige justicia me representa más que cualquier ministro"Tiago Rodrigues
De ese último
Aviñón todavía se recuerda la postura tomada por el festival ante la
"amenaza", señala, del partido de Marine Le Pen en las elecciones que se
celebraron el 30 de junio y el 7 de julio. "Viendo que el resultado
de la primera vuelta prometía la victoria de la ultraderecha en Francia
preferimos tomar el riesgo de actuar en conciencia con los valores que
fundaron esta muestra con la ayuda de la Resistencia antifascista.
Es un festival progresista, humanista, ecologista, feminista,
antirracista y todo lo contrario a lo que defiende la ultraderecha.
Nuestra posición fue una muestra de vulnerabilidad, pero también de
fuerza", justifica.
Sabe Rodrigues que
aquella ocupación del Palacio de los Papas "no fue el factor
determinante", asiente, "pero Le Pen perdió claramente en todo el país, y
en Aviñón, también", celebra un autor al que Giorgia Meloni intentó censurar antes de ser primera ministra de Italia.
Independientemente
del resultado en las urnas, el autor portugués era consciente de la que
sería su reacción: "No iba a dimitir". Y del mismo modo, "tampoco iba a
colaborar" con un gobierno de ese color. "Después surgiría un problema
que habría que vivir, porque yo, por supuesto, respeto la legitimidad de
las elecciones y no voy a organizar un golpe de Estado, pero en mis
valores está el no trabajar con la ultraderecha". Y zanja con ironía: "Y si soy criticado violentamente, pues otra medallita al lado de las otras...".
Sin antídoto
Rodrigues
asegura no tener el "antídoto" contra las ideas de Le Pen y compañía,
ni tampoco cree que exista "una cura total" para ello. De hecho, "de saberlo, estaría en política y lo daría gratis de inmediato".
Para él, la "vulnerabilidad" de la democracia es, en parte, responsable
de esas "amenazas" al sistema, pero también de la "posibilidad de
confrontación de pareceres y de diversidad de visiones del mundo". "Es
un tesoro, una fuente de riqueza intelectual, emocional, política y
social. Somos seres con contradicciones y debemos aceptar la complejidad
del mundo. Es más interesante así que si lo simplificáramos".
Y
en ese universo heterogéneo aparece su 'Hécube, pas Hécube', donde se
mezclan las historias de dos madres coraje: "A mí", afirma el director
portugués, "una madre que exige justicia es un colectivo que me representa más que cualquier ministro que intenta ocultar un escándalo".
A partir de esas dos figuras, Tiago Rodrigues entrelaza las cuestiones atemporales de una mujer troyana, como Hécuba, con los de una intérprete y madre actual.
Ambas, atrapadas en tormentos similares. Hace 25 siglos, Hécuba lo
perdió todo en la derrota de Troya: su marido, su trono, su libertad y
muchos de sus hijos; y en 2022, estallaba en Suiza (donde por entonces
se encontraba trabajando el director) un caso de maltrato de niños
autistas: "Descubrí que una de mis actrices era madre de uno de esos
chicos y me quedé impresionado. Todos los días ensayaba una pieza que
hablaba de sufrimiento mientras atravesaba su tragedia personal.
Sufrimiento en la vida cotidiana y representación de sufrimiento sobre
el escenario".
Se cumple así la máxima de Rodrigues de que
no escribe obras para el teatro, sino para los actores que dan vida a
los personajes, y en Teatros del Canal (3, 4 y 5 de enero) se verá cómo
una actriz ensaya la 'Hécuba' de Eurípides, la viuda de Príamo. "Es una
mujer que, tras aceptar las pérdidas de su esposo y de sus hijos, exige
justicia por la inaceptable muerte de su hija. Es como una Convención de Ginebra pero 25 años antes", resume.
Es
ahí donde «la tragedia ficticia se mezcla dolorosamente con la realidad
íntima de la artista, cuyo hijo autista ha sido víctima de abuso,
situación que denuncia y por la que protesta». Y tras ello, «el período
de ensayos de la obra se superpone ambiguamente con el de una
investigación judicial», presenta el programa de mano sobre dos mundos
en contacto y en los que tragedia y realidad se dan la mano en una
función metateatral.
"La justicia social se hace con multitud de gestos que no son siempre sexis"Tiago Rodrigues
"Cuando
la Comédie me invitó me surgió la idea de que, por rabia, estas madres
tienen un superpoder. Hécuba puede ser cualquier argentina de la Plaza
de Mayo, o una chilena, o una griega que exige justicia. Es la idea de una madre que, ante una injusticia, va a luchar hasta el final sin mirar las consecuencias.
Es una temática universal. Da igual que sea la sociedad suiza, que la
portuguesa, que la española, hay una democracia relativa. La mayoría de
personas accede a derechos y productos esenciales, pero todavía somos
negligentes de una manera flagrante hacia los vulnerables", desarrolla
Rodrigues de una pieza que habla "de justicia, pero también de los
valores éticos".
Muchos de esos principios ya los mostró el dramaturgo en la pieza que trajo a Madrid hace dos años, 'Dans la mesure de l’impossible',
donde quitaba romanticismo a la labor humanitaria y en la que ya
hablaba de esa "fatiga por empatía" que lleva a desconectar del
sufrimiento cuando se está en contacto con él demasiado tiempo: "En las
sociedades europeas tenemos mucha representación de la violencia y, a veces, es difícil guardar la capacidad de movilizarse. Existe un pensamiento crítico que todavía puede proteger a la gente, aunque en ocasiones nos frustremos. La justicia se hace con política, pero la justicia social se hace con multitud de gestos que no son siempre sexis –continúa–.
Son cosas sencillas, como involucrarte en la vida de tu barrio, hablar
con los vecinos, participar en alguna agrupación de la sociedad civil...
No quedarse en el lugar del individuo que consume y produce opiniones
pero que no se activa en la sociedad. Muchas veces estamos demasiado
tranquilos por haber publicado dos frases en redes diciendo que estamos
contra algo en lugar de hacer".
Sostiene Rodrigues que "el potencial de nuestras sociedades" está en "trabajar para ir a mejor", pues "pueden empeorar muy rápidamente y luego se necesita mucho tiempo para mejorarlas".
LA HERENCIA DE SU PADRE: UN CUADERNO El
director acaba de pasar las Navidades en casa, en Lisboa, pero solo
por unos días. El trabajo le lleva de nuevo más allá de los Pirineo.
Primero, a Gante (Bélgica), donde presentará 'No hay yogur para los
muertos' en el NTGent. "Una pieza en la que recupero los últimos días de
mi padre en el hospital. Él ya sabía que era su último ingreso y
comenzó a escribir en un cuaderno un reportaje sobre morir en el
hospital", explica un Rodrigues que recupera esas notas que sobre el
escenario se transforman en "una especie de pesadilla", apunta. "El
final de la vida puede ser muy triste, y al mismo tiempo, un momento de
mucha riqueza y fantasía". Tras su estancia en Bélgica, el
portugués regresa a la que ahora mismo es su otra casa, a Aviñón, para
continuar preparando la edición del 2025, en la que el árabe será la
lengua invitada (el español lo fue el pasado verano): "Lo elegimos por
su riqueza patrimonial y contemporánea, pero hay una dimensión política
que acompaña esta elección". Así se refiere el director al segundo
idioma más hablado de Francia y el quinto en el mundo. Por todo ello,
afirma que "no hay que justificar esta elección. Es una declaración
artística y cultural", zanja de una cita que volverá a abrir una
mujer, Marlene Monteiro Freitas, en el Palacio de los Papas.
El
ejemplo lo encuentra el director en su propia labor en Aviñón. Es
conocedor de que su posicionamiento del verano pasado, en plenas
elecciones, trae consecuencias. "Crea un contexto diferente", explica
sobre una situación nueva para nuestro país vecino: "Estamos en mitad
de una incertidumbre política muy importante y el contexto económico
está produciendo la disminución de presupuestos en muchas regiones.
Seguramente, el festival no será inmune. Sé que para un español o un
portugués es habitual, pero en Francia es algo inédito y nos batiremos
contra eso. En Aviñón será debate y habrá movilizaciones contra la
rebaja de dinero para la cultura, que ha sido una de las banderas del
país desde hace décadas y uno de los símbolos de esta democracia".
Y es que el compromiso del dramaturgo luso con los escenarios es indudable a pesar de que, como él mismo defiende, "el teatro no es política".
No obstante, "sí tiene un poder sobre la realidad. Puede ser una
antesala que te lleve a la política, pero no deja de ser una forma de
arte, de experiencia humana; y puede cambiarte humana y políticamente,
ofrecer consuelo, reparación, justicia poética, cuestionarte...",
enumera.
Por todo ello, Rodrigues, asegura, dejará de hacer teatro "el día que no pueda cambiar a la gente":
"¿Y a la sociedad entera? Si la política no lo consigue, tampoco lo
vamos a hacer nosotros. Pero sí tengo claro que se vive mejor con teatro
que sin él; permite hablar de otra manera de cosas que la opinión
pública o el periodismo no puede. Uno de los poderes de los escenarios
es hablar del mundo de una manera muy personal".
TITULO: Historia de nuestro cine - Cine - El gran Vázquez ., Viernes - 10 - Enero ,.
El Viernes - 10 - Enero ,. a las 22:15 por La 2, foto,.
Barcelona, 1964. Vázquez, el mejor dibujante de tebeos de España
disfruta de lo que quiere cuando quiere, no paga nada, esquiva con
ingenio a sus acreedores, burla y tima a sus jefes y colecciona
familias. Hasta que un gris contable de su editorial decide que debe
pasar por el aro, como todos,.
No hay comentarios:
Publicar un comentario