TITULO: El Telediario La 1 - Pérdidas,.
Pérdidas
foto / La vida es una sucesión de pérdidas que lamentamos cuando echamos de menos lo que perdimos. Del útero materno, donde estábamos tan seguros y nos sentíamos tan a gusto, dice Freud que quizás persista por siempre en nosotros la nostalgia de su abandono.
La última vez que tuve un ex acabamos repartiéndonos la ciudad. Lo hicimos porque no vivimos en Madrid, ese reino mágico donde «puedes cambiar de pareja y no volver a encontrártela nunca más». Nosotros, periféricos perdidos, no tuvimos más remedio que coger un plano y trazar líneas divisorias, como si fuéramos potencias europeas en la Conferencia de Berlín. Fue una negociación dura pero, al final, gané: aunque me quedé sin el bar donde hacían las mejores bravas, los museos y las tiendas de ropa fueron para mí. De aquella relación salí más culta y mejor vestida.
Como todas las historias que terminan en catástrofe, la cosa empezó con cervezas a morro. Poco después de acabar los fuegos artificiales, comenzaron a molestarme su respiración de locomotora vieja y su discurso apocalíptico y desintegrado. Era gilipollas, sí. Pero era, había sido, mi gilipollas. Por eso no quería volver a verlo; por eso sólo me atrevía a hacer incursiones en su territorio armada hasta los dientes con maquillaje, tacones y un chulazo colgando del brazo. Aquel día, en cambio, no tenía ninguna de las tres cosas, y sí un antojo violento e insaciable de comerme unas patatas bravas.
Crucé la frontera y me metí en aquel bar que había sido nuestro y, ahora, era suyo. Lo vi nada más entrar; el también me vio. Me miró con cara de qué haces aquí, le dije un tímido hola, qué tal, y me fui corriendo, avergonzada y con hambre. Desde entonces, respeto escrupulosamente los términos de nuestro acuerdo. Pero él no: esta mañana, en el desayuno, me lo he encontrado al abrir la caja de cereales. Ahí estaba el tío, sentado sobre un copo de avena. La he cerrado rápidamente y me he hecho unas tostadas. Mañana agarro la caja y me voy a Madrid.
TITULO: EL MAGO DEL TIEMPO - La otra oportunidad minera: el agua,.
La otra oportunidad minera: el agua,.
En Extremadura aún hay yacimientos por explotar. La Junta otorga la declaración de Agua Mineral Natural a dos manantiales y eleva a 18 los que ya hay en la región, donde funcionan cuatro plantas embotelladoras,.
Con una diferencia de 72 horas, el Boletín Oficial del Estado ha publicado este mes (los días 10 y 13) dos anuncios casi idénticos, ambos referidos a Extremadura y su subsuelo. En concreto, informaban de la futura declaración de Agua Mineral Natural para un manantial en Zarza la Mayor y otro en Alía. Con ellos, ya son 16 (ocho en cada provincia),.
La ruta del Reg Mil.lenari es un regreso al pasado de Torrent, una vuelta a sus orígenes cuando sus primeros pobladores no disponían de los recursos hídricos para poder subsistir y regar los campos, y tuvieron que ingeniárselas para canalizar el agua hasta llegar a lo que ahora es el casco urbano y la zona de regadío.
Un grupo de excursionistas tuvimos la oportunidad hace unas semanas de recorrer el primer tramo de los senderos, de seis kilómetros, acompañados por dos profesionales que han participado en su elaboración, el arqueólogo, Javier Máñez, y el historiador Rafa Jordá.
Esta primera ruta, que discurre por los lindes del barranco de l'Horteta, permite descubrir la estrecha relación de la ciudad con el agua y conecta los recursos patrimoniales ya recuperados o en fase de recuperación.
El punto de partida de la expedición es el Clot del Bailón, declarado microreserva de fauna en 2006 por la presencia del 'petxinot', un molusco que es indicador de aguas limpias. Desde allí, el agua circula por la acequia y los excursionistas recorremos por esta senda su trazado de origen musulmán, rodeados por la vegetación autóctona, cañizo, juncos y murtas que, en ocasiones se unen hasta formar una especie de pasillo vegetal.
Después, el camino se divide en dos ramales y la expedición seguimos hacia Mas del Jutje pasando por el azud del Manyet, un balsa de pequeñas dimensiones destinadas a acumular el agua. Rafa Jordá explica que esta zona servía de abrevadero para el ganado que llegaba por la veredas desde Cuenca y Teruel. «Aquí se arrendaban los corrales para que pudieran pasar el invierno porque había mejor pastura», explica.
Luego el sendero nos guía hasta la cantera de la Serra Perenxisa, una explotación minera que se cerró hace unos años y de donde salieron las piedras con las que se construyó el cauce del río de Valencia.
Uno de los carteles informativos, que ha colocado el ayuntamiento, recoge esta historia y el proyecto de recuperación que incluso puede descargarse en el móvil a través de un código QR.
Seguimos adelante y Rafa comenta los dos tipos de paisaje existente a lo largo del recorrido «el de sol, con su propio ecosistema, junto al barranco, y el de sombra, propio del bosque mediterráneo». Luego pasamos por el Arquet de l'Horteta, del que sólo queda el estribo lateral y que se ha reforzado para que la corriente del agua no lo haga desaparecer por completo.
Aunque el camino no presenta dificultad, en la zona montañosa la concejalía de Medio Ambiente ha construido pasarelas para salvar la discontinuidad de la senda y ha colocado barandillas de madera, integradas en el paisaje, en los tramos con más peligro. Así llegamos a una de las estructuras más destacadas del patrimonio hidráulico que ya se ha recuperado, els Arquets de Baix, por donde pasaba el agua desde hace más de 2.000 años hasta los años 80, cuando se canalizó.
La visita, después de cerca de siete kilómetros, termina en la ermita de Mas del Jutge, un lugar de parada obligatoria donde quedan los vestigios de una parte de la masía del siglo XVII, que se corresponde con una explotación vinícola.
Este es el primero de los tramos de siete kilómetros que el consistorio ha recuperado, pero desde este punto seguirá el sendero hasta la ciudad, pasando por una de las zonas con más importancia arqueológica como es el Pantano que se está recuperando actualmente.
Tras la visita, los excursionistas agradecieron al concejal de Medio Ambiente, José Gozalvo, que les acompañó en la ruta, este paseo por el pasado de la ciudad y sus parajes naturales y el esfuerzo realizado para su recuperación.
Gozalvo destaca que este sendero «tiene algo que no tiene los demás que es el contenido, donde se unen la historia, el deporte, la naturaleza y la cultura local».
Aunque reconoce que todavía quedan cosas por hacer, como «la limpieza de algunos márgenes del camino donde se acumulan los residuos para hacer el recorrido más agradable».
La ruta del Reg Mil.lenari se está realizando con las subvenciones de las consellerias de Turismo y Cultura. Los trabajos han consistido en la limpieza de la senda, en algunos tramos cubierta por la vegetación, la construcción de pasarelas y su adecuación. Además, ha servido para ampliar el patrimonio hidráulico porque ha sacado a la luz nuevas estructuras que se desconocían.
TITULO: Volando voy - Jesús Calleja - Diego Doncel Ganador del premio Loewe ,.
«La literatura enseña el camino para conocer el dolor y para superarlo»,.
El poeta extremeño publica 'La fragilidad', una mirada al sufrimiento y la esperanza tras la muerte de su padre,.
Han pasado más de tres décadas desde que Diego Doncel (Malpartida de Cáceres, 1964) ganara el premio Adonais por 'El único umbral', el exitoso inicio de una asentada carrera literaria hecha de poesía, novela y crítica y jalonada por numerosos galardones. En octubre de ese 2020 que pegó un revolcón a la humanidad,.
Diego Doncel (Malpartida de Cáceres, 1964) es el ganador del Premio Loewe de Poesía 2020, dotado con 25.000 euros y que falló este martes su 33ª edición. Se lo adjudicó gracias a 'La fragilidad', un poemario sobre la superación del dolor que publicará el sello Visor y que es «muy sólido y compacto tanto en el fondo como en la forma», según el jurado que lo premió.
«La fragilidad es un libro sobre la superación del dolor y de la enfermedad. Lo corregí durante los meses del confinamiento y vi con claridad que es una metáfora de este tiempo que nos ha tocado vivir», explica el poeta cacereño. «Tiene una enorme carga autobiográfica. Es un homenaje a mi padre, a su vida y a cómo murió. También a la belleza de cuidar a alguien a quien amas y al sentido que tiene ese cuidado» añade Doncel, que desde que ganara el Premio Adonais en 1990 con 'El único umbral' ha afianzado su arriesgado y singular registro poético.
«No hay poema que falte ni que sobre. Es un poemario absoluto, total, de una admirable madurez vital y expresiva. Confiere una voz profunda con una cosmovisión personal singular y propia que expone una teoría de la vida y que humaniza su dicción al mostrarnos el espectáculo que la civilización actual rehuye y no quiere ver, el dolor y la muerte, y lo hace de una posición abierta a la solidaridad de la esperanza», dijo Jaime Siles, portavoz del jurado, del libro ganador.
Mario Obrero (Madrid, 2003) ganó Con 'Peachtree City' el Premio a la Creación Joven, dotado con 8.000 euros. Con solo 17 años -16 cuando escribió el poemario- Obrero, se convierte en el galardonado más precoz en la historia del premio. Paradójicamente, esta edición era la primera en la que la edad límite para participar se había aumentado hasta los 33 años, casi el doble de la que tiene el ganador.
«Es un poeta que se revela en un libro que con imágenes inusuales y un aliento poético retrata la multiplicidad cultural de la globalización, a la vez que consigue, con ironía y destreza, un poemario muy sorprendente», afirmó Gioconda Belli.
A esta convocatoria del Loewe se habían presentado 1.247 originales de 36 países, lo que supone un incremento del 19,3% respecto a la cita anterior y el número más alto de originales presentados en los 33 años de historia del premio.
Víctor García de la Concha presidio un jurado compuesto por Gioconda Belli, Antonio Colinas, Aurora Egido, Margo Glantz, Juan Antonio González Iglesias, Carme Riera, Jaime Siles, Luis Antonio de Villena y Aurora Luque, ganadora de la pasada convocatoria.
No hay comentarios:
Publicar un comentario