El legado de Gallardo,.

Ahora que en Extremadura estamos ávidos de megaproyectos, el empresario jerezano fue capaz de crear un imperio desde la nada que ha generado muchos empleos y riqueza,.

foto / Los grandes empresarios siempre generan sombras entre la opinión pública. Amancio Ortega, sin ir más lejos, observa cómo la donación de millones de euros para extender la tecnología médica no es bien recibida por todos, que prefieren rebajar el gesto generoso y poner el acento en los impuestos o las condiciones laborales de sus empleados, que la perfección ya sabemos que no existe. Son muchísimos empleados, por cierto, miles de personas cuyas nóminas dependen del imperio creado desde un pequeño taller de costura y la venta de batas.
Nuestro Amancio Ortega, salvando la distancias y cambiando las batas por la chatarra, ha sido Alfonso Gallardo, un empresario también hecho a sí mismo, desde muy abajo, y que igualmente ha recibido en su largo periplo elogios y críticas, pero al que nadie debería discutir su capacidad para generar empleo y crear riqueza desde Jerez de los Caballeros.
Su sueño de levantar una refinería no le granjeó, sin duda, la mejor de las imágenes entre ciertos colectivos de la región. Otros sectores, más silenciosos, todavía se preguntan cómo habría sido el presente y futuro de Extremadura si ese ambicioso proyecto hubiera salido adelante. El cuento acabó con la renuncia de muchos puestos de trabajo.
A sus 87 años, a Gallardo le ha llegado esta semana lo que parece su último capítulo profesional, aunque aún conserve un par de sociedades. Como bien ha ido contando Celestino J. Vinagre en estas páginas, el empresario jerezano ha visto cómo el fondo extranjero que le salvó hace varios años cuando la deuda del grupo superaba los mil millones, se ha hecho con el dominio completo del grupo, desplazándolo de su propiedad. Un golpe duro para un empresario tozudo y orgulloso, supongo que cualidades casi irrenunciables para alguien que comenzó vendiendo chatarra y llegó a ser la persona más adinerada de Extremadura.
La región está necesitada de muchos 'gallardos' para seguir avanzando. Ahora que estamos ávidos de megaproyectos que nos ilusionan con el anuncio de cientos de puestos de trabajo, bastantes más extravagantes que la construcción de una refinería, Gallardo fue capaz durante décadas de levantar un imperio empresarial que ha generado riqueza en Extremadura y particularmente en Jerez de los Caballeros y su entorno. Gallardo salía en las páginas económicas de la prensa nacional como un rara avis del ecosistema extremeño, capaz un día de pujar por la nostálgica GaleríaPreciados y otro de acordar la compra del grupo Zeta. También de quedarse con siderúrgicas vascas de rancio abolengo.
Para hoy está prevista en el pueblo jerezano una concentración de personas agradecidas a su trabajo. Es un gesto infrecuente y al mismo tiempo de justicia con una persona al que tal vez su carácter poco propenso a salir en las páginas de los periódicos, un sector en el que también llegó a entrar, tal vez ha restado valor ante la opinión pública a su legado.
Una herencia, la de los trabajadores, que es responsabilidad ahora de mantener por parte del fondo KKR. Aunque las empresas de Gallardo redujeron su facturación y la crisis económica también mermó la cifra de trabajadores, no es pequeño el número de empresas que aún ostentaba. Los 1.200 empleados de la actualidad, no todos en la región, deben ser en cualquier caso un motivo de atención por parte de la Junta de Extremadura para que no se pierdan los puestos directos y los muchos indirectos que generan las firmas del grupo.
Los empresarios como Gallardo ni se retiran ni se jubilan. Él sigue activo pero en otra dimensión empresarial muy inferior a lo que fue. No hay que olvidar las aristas y los fallos que haya podido cometer, pero sin duda pesa más el tiempo que ha dedicado a pensar cómo multiplicar sus empresas, y con ellas, los empleos y la economía de una zona que no se entendería sin su esfuerzo y su trabajo. No todos sus sueños se cumplieron, pero muchas familias los han logrado gracias a él.

TITULO: EL MAGO DEL TIEMPO - Cielo nuboso o cubierto en la mayor parte de la península,.

Cielo nuboso o cubierto en la mayor parte de la península,.

foto / Nuboso o cubierto con precipitaciones en el entorno del sistema Central, sur de Castilla y León, norte de Cáceres y nordeste de Castilla-La Mancha, sin descartarlas en otros puntos de la zona centro, remitiendo por el sur, y extendiéndose por la tarde a Galicia y oeste de Castilla y León. Podrían ser persistentes en las proximidades del sistema Central occidental. Probables precipitaciones débiles por la mañana en zonas dispersas del Cantábrico, norte de Navarra y Pirineos, tendiendo a poco nuboso durante el día. Predominio de poco nuboso en el resto, aunque con algunos intervalos nubosos en la vertiente atlántica y en el norte de Canarias. Brumas y posibles bancos de niebla matinales en el interior noroeste peninsular, zonas de montaña del centro y valles de la mitad sur. Temperaturas en aumento en la zona centro peninsular y en Canarias. Sin cambios en el resto. Viento de componente oeste en la Península y Baleares, y del nordeste en Canarias.

TITULO:'Volando voy -Jesús Calleja -La maravilla de Ordesa y Monte Perdido ,.

La maravilla de Ordesa y Monte Perdido, en 'Volando voy',.

Este domingo 1 de Diciembre , a las 21.30, Cuatro emite una nueva entrega de 'Volando voy',foto .

Jesús Calleja se desplazará hasta Huesca para visitar los espectaculares enclaves de Ordesa y Monte Perdido. Allí, mano a mano con los habitantes de la zona y junto a meteorólogos de la AEMET, explicará las características climáticas de este gran jardín botánico de montaña y emprenderá una importante misión para mejorar el turismo en la zona: instalar una estación meteorológica para poder mejorar las previsiones del tiempo.

Jesús Calleja también tendrá que encontrar a alguien que se comprometa a recoger cada día los datos de la nueva estación. Para ello, tratará de convencer a Sergio, un pastor veinteañero muy vinculado a su tierra y a su familia.

Charlas con gente de la zona

Otros de los implicados serán Kike, un guarda de refugio con una relación muy estrecha con las montañas y una visión muy particular del mundo actual, y los hermanos Palazio, que apostaron hace más de veinte años por montar un hotel en esas tierras, con las que tenían una vinculación de varias generaciones. En su visita, Calleja conocerá también a una familia holandesa que llegó a Buisán, uno pueblo de la zona, para poblarlo después de casi cincuenta años desde que se fuera el último habitante.

Como colofón, Calleja tratará de que en la sección de El Tiempo de Informativos Telecinco se haga una mención de las particularidades climáticas de Ordesa y Monte Perdido. Para comprobar si lo consigue, organizará una reunión en uno de los bares de la zona para verlo juntos en la tele.