BLOC CULTURAL,

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miércoles, 6 de abril de 2022

Mi casa es la tuya - Felipe Cabrerizo Escritor . Viernes-8- Abril ,. / Pekín Express - Will Smith renuncia a la Academia de Hollywood . / La Historia del Fútbol en Castuera - Gimnástico Don Benito. 2-0. Castuera ,. / UN BUEN PLAN ES IR AL CINE - Imitación a la vida ,. / Días de cine -' Cine - Penélope Cruz y el viaje del cine español hacia el Oscar.- ., Viernes-8- Abril . / Saber Vivir - Veinte cosas que dejamos de hacer cuando llegó el móvil,.

 

TITULO: Mi casa es la tuya - Felipe Cabrerizo Escritor  Viernes - 8- Abril  ,.

 

Mi casa es la tuya,.


Este viernes  -8- Abril  a las 22.00, Telecinco emite una nueva entrega de 'Mi casa es la tuya', con Bertín Osborne charlando con  - Felipe Cabrerizo Escritor , foto.

Felipe Cabrerizo Escritor,.

Biografía «De Loquillo no sabemos nada porque toda su vida se ha protegido tras el escudo de su personaje»,.

El escritor donostiarra repasa la vida y la trayectoria del rockero catalán, en una biografía que atraviesa las cuatro últimas décadas de la historia musical del país,.

Cuatro años de intenso trabajo ha invertido Felipe Cabrerizo (Donostia, 1973) en la biografía «oficial y definitiva» de Loquillo, que hoy sale a la venta (Ed. Debate). A lo largo de más de 400 páginas, el autor recorre la vida y obra del rockero de El Clot, afincado en Donostia, y de alguna forma, las cuatro últimas décadas de historia de este país. Subidas y caídas, estajanovismo y dispersión narcótica, éxitos y fracasos y, por encima de todo, un empecinamiento extremo en salvar todos los obstáculos que han dado al traste con las carreras de sus compañeros de generación caracterizan el periplo vital, en un relato tan alejado del encarnizamiento como de la hagiografía. «Todo el mundo conoce a El Loco, pero no sabemos nada de él porque es un tío que ha estado toda la vida protegiéndose tras el escudo de un personaje», asegura el escritor donostiarra.

– Da la sensación de que lo que explica la carrera de Loquillo es su tenacidad extremista.

– Es una cosa bárbara. Es de una tenacidad obsesiva. Su guitarrista Josu García me dijo: «Ten en cuenta que El Loco llega a las 8.30 de correr por la playa y empieza la batalla». Y era verdad. Es una persona que vive para su carrera. Ha cumplido ese sueño de adolescencia de ser una estrella de rock y es para lo que trabaja, lo cual implica una mecánica imparable para la que se requiere una fuerza de voluntad enorme. Incluso en los peores momentos de su carrera, en los noventa, seguía considerándose a sí mismo una estrella y trabajaba para esa idea.

– Su primer disco de poemas está dedicado a «las personas que se pasan la vida escapando». ¿Es Loquillo uno de ellos?

– Desde luego, sus raíces lo explican todo: el ser un chaval de barrio, el tener esa necesidad de huida de un lugar tan difícil como era entonces El Clot y proceder de una familia no tradicional: su padre era un combatiente republicano que había estado preso en los campos de Argelès-sur-Mer. Eso en los sesenta aún marca.

– Por otro lado, contrasta su imagen áspera y si se quiere dura con la cantidad de gente que ha abusado de su confianza o directamente le ha engañado. No sé si tiene que ver con una suerte de código de lealtades que no siempre ha sido correspondido.

– Sí, es verdad que maneja una serie de códigos de lealtad, honor y trabajo que han quedado muy trasnochados, pero que en el siglo XX eran muy frecuentes. Esto lo puedes mantener en un círculo íntimo, pero es muy complicado cuando te conviertes en una figura que mueve muchísimo dinero a su alrededor. La historia de robos es la de cualquier estrella del rock. Cuando te metes en estos fregados no entiendes que gran parte de tu trabajo es llevar una contabilidad de manera muy estricta. Si les han tangado a los Rolling, cómo no le van a tangar a él.

Altibajos

«Incluso en los peores momentos de su carrera, Loquillo seguía considerándose a sí mismo una estrella y trabajaba para esa idea»

– Llama la atención lo temprano que percibe a Los Trogloditas como un apoyo, pero también como un lastre en sus intenciones.

– Sí, lo sorprendente es que El Loco lo mantuviera como grupo hasta 2008. En realidad, cuando cumple treinta años, a principios de los noventa, entiende que necesitaba un campo mucho más amplio que el que Los Troglos le podían ofrecer. En 1991, publica 'Hombres', un disco en el que empieza a alejarse del camino del rock y a apuntar en otras direcciones con el referente de la música europea. Y al final su romanticismo es lo que le llevó a mantener a Los Trogloditas porque en el fondo era su banda de juventud y sus viejos amigos. Sin embargo, es verdad que ya Los Troglos se mantenían con respiración asistida y llegó un momento en el que eran más una molestia que otra cosa. Y aunque económicamente le convenía mantener ese marca de Loquillo & Los Trogloditas, yo creo que su auténtica liberación fue cuando ya se los quitó de encima y en 2008 saca 'Balmoral', considerado unánimemente su gran disco.

– ¿Y qué papel juega su compañera. Susana Koska?

– Susana es una persona fundamental para entender el recorrido posterior de El Loco. Ellos se conocieron siendo unos chavalitos en un concierto en el Autódromo de Lasarte y es una compañera fidelísima y fundamental para la formación de El Loco. Es una persona que viene del mundo de la cultura, ha trabajado en el teatro y ha conocido mucho mundo, con unas referencias culturales amplísimas que fueron fundamentales en los años de formación de El Loco, cuando era un rocker frenético acelerado. Poco a poco le fue filtrando una serie de elementos y gustos, no sólo musicales, sino culturales.

– Y que explica su traslado primero a Lasarte y posteriormente a Donostia.

– Lasarte fue un momento particularmente luminoso después de unos años de éxito frenéticos, con una vida no especialmente sana, en la que había perdido el norte y el control de su carrera. Decide romper, y se aleja de Madrid y Barcelona, que son dos focos muy peligrosos cuando eres una persona famosa. El contraste de vivir con Susana en Lasarte y hacer una vida normal, hacer deporte e ir a comer a la sidrería a hablar con los trabajadores de allí y con la gente de la calle fue lo que le permitió volver a pisar tierra e intuir la posibilidad de que Donostia iba a ser en el futuro importante. Y ahí se ha asentado.

Cambio de aires

«Viene a Lasarte cuando decide romper y alejarse de Madrid y Barcelona, dos focos muy peligrosos cuando eres famoso»

– Hay quien dice que el gran talento de este hombre es rodearse de gente mejor que él.

– Sí, es algo que lleva a gala. El Loco empezó jugando a basket y dice que ahí entendió las claves: podías hacer tu trabajo individual, pero te hacía falta otra gente para poder crecer. Lo entendió rápidamente y tras el éxito arrollador con Los Trogloditas, se da cuenta de que tiene muchas carencias: no sabe componer música, ni tocar instrumentos y aún estaba en fase de formación, con lo cual, tuvo a gala desde el primer momento contar con gente que pudiera hacer ese trabajo y, sobre todo, que le pudiera abrir otras vías.

– Ahí la primera persona importante es Gabriel Sopeña.

– Sí, tras un recorrido larguísimo y triunfal con Sabino Méndez, que desarrollla sus canciones fundamentales de los ochenta de las que luego El Loco se quiere desprender, aparece Sopeña, que es músico y compositor, pero también vicerrector de la Universidad de Zaragoza. Su aparición a principios de los noventa fue fundamental porque le abrió el camino hacia otro tipo de música y de lecturas. A partir de ahí, entra en contacto con gente de primera fila de la cultura que, en ocasiones, se quema rápido porque el propio ritmo de vida de El Loco y de una banda de rock & roll no es fácil de llevar en el día a día.

– Le habrá resultado difícil desentrañar a alguien que se ha ocultado durante tanto tiempo detrás de tantas máscaras.

– Me ha resultado dificilísimo. Empecé a tratar con el Loco cuando llevaba un año en el libro porque primero hice un trabajo de hemeroteca. En efecto, el primer problema con el que me encontré es que a El Loco todos le conocemos, su nivel de popularidad es pasmoso, puedes ir al lugar más recóndito de España que todo el mundo le conoce y, sin embargo, no sabemos nada de él porque es un tío que ha estado toda la vida protegiéndose tras el escudo de un personaje que crea muy temprano: con 18 ó 19 años se convierte en una superestrella. Ahí había que romper ese muro y entender a este personaje porque lo primero que hay que hacer para escribir una biografía es comprender lo que le motiva en esta batalla.

 TITULO:   Pekín Express  -  Will Smith renuncia a la Academia de Hollywood ,.

 

Pekín Express ,.

  Cristina Pedroche conduce 'Pekín Express: La ruta de los elefantes', una aventura en mitad del Índico, en la que 10 parejas con perfiles muy diferentes, etc.

Will Smith renuncia a la Academia de Hollywood ,.

El presidente de la Academia, David Rubin, responde diciendo que continuarán avanzando en los procedimientos disciplinarios, y confirma que el próximo 18 de abril discutirán las posibles sanciones,.

foto / El actor Will Smith ha renunciado a la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas de Hollywood después de que el pasado lunes abofeteara en directo al presentador Chris Rock, cuando el cómico hizo una broma sobre su mujer, que sufre de alopecia, según ha informado el medio especializado en cine 'Variety'.

Smith ha enviado una carta en respuesta a la Academia de Hollywood, que abrió el pasado miércoles un expediente disciplinario contra él por «violaciones de los Estándares de Conducta de la Academia», que incluyen «contacto físico inapropiado y comportamiento abusivo o amenazante».

«La lista de personas a las que he lastimado es larga e incluye a Chris, su familia, muchos de mis queridos amigos y seres queridos, todos los asistentes y la audiencias del mundo entero desde casa», ha lamentado Smith en una carta recogida por 'Variety'.

El actor ha asegurado que se quiere centrar en «aquellos que merecen atención por sus logros», así como en permitir que la Academia «vuelva al increíble trabajo que hace para apoyar la creatividad y el arte en el cine». Además, ha calificado su actuación en los premios como «impactante, dolorosa e inexcusable».

El presidente de la Academia, David Rubin, ha respondido a la renuncia del actor diciendo que continuarán avanzando en los procedimientos disciplinarios, y ha confirmado que la Academia tiene una reunión prevista el próximo 18 de abril donde se discutirán las posibles sanciones, según 'Variety'.

Durante la ceremonia el presentador realizó un chiste sobre la esposa de Smith, Jada Pinkett Smith, también actriz, que ha sufrido problemas de alopecia, y acto seguido el actor se levantó de su asiento y se dirigió al escenario propinando un bofetón al humorista. Cuando volvió a su butaca desde ahí le gritó al presentador: «Saca el nombre de mi mujer de tu puñetera boca».

Smith se disculpó el pasado martes públicamente con el presentador Chris Rock, y señaló en su perfil oficial de Instagram que tal acto «estuvo fuera de lugar» y «estuvo mal». «Me siento avergonzado y mis acciones no han sido representativas del hombre que quiero ser», agregó.

TITULO: La Historia del Fútbol en Castuera -Gimnástico Don Benito. 2-0. Castuera,.

Gimnástico Don Benito. 2-0. Castuera,.




foto / El Gimnastico Don Benito realizo un gran partido contra el Castuera que perdio en un partido muy disputado,.

TITULO: UN BUEN PLAN ES IR AL CINE -Imitación a la vida,.



Reparto

Lora Meredith (Lana Turner), una actriz viuda en paro, vive con su hija adolescente (Sandra Dee) en Nueva York. Un día, conoce por casualidad a Annie, una mujer negra (Juanita Moore) a la que contrata como sirvienta. Ese mismo día conoce también a Steve (John Gavin), un fotógrafo que se enamora de ella.

TITULO: Días de cine -' Cine - Penélope Cruz y el viaje del cine español hacia el Oscar,. Viernes -8- Abril .






Viernes -8- Abril a las 20:35 horas en La 2 / foto,.


Días de cine -' Cine - Penélope Cruz y el viaje del cine español hacia el Oscar,.

  • El director Fernando Trueba logró su primer Oscar con esta película
  • Una cinta indispensable de nuestro cine, con guion de Rafael Azcona
  • Desde la primera lectura del guion al Oscar, Belle époque (1992) fue una fuente inagotable de alegrías. Una película creada por dos de las mentes más brillantes del cine español, Fernando Trueba y Rafael Azcona, con un reparto excepcional encabezado por Fernando Fernán GómezPenélope CruzMaribel Verdú o Jorge Sanz y que obtuvo todos los reconocimientos posibles. Primero encandiló en Berlín, después arrasó en la ceremonia de los Goya y, finalmente, logró la estatuilla a la mejor película de habla no inglesa en 1994.

    Concebida como un canto a la vida, Belle epoque nos cuenta la historia de una familia que incluso hoy día estaría considerada avanzada a su tiempo, en la que se respira un ambiente bucólico, hedonista y evasivo. Un pequeño oasis al que llega por casualidad Fernando (Jorge Sanz), un joven soldado que deserta poco antes de la Guerra Civil y encuentra refugio en casa de Manolo (Fernán Gómez), un viejo artista que vive retirado en su mansión de campo con su mujer y sus cuatro hijas: Rocío, Violeta, Clara y Luz.

    El propio Trueba decía que Azcona y él quisieron provocar alegría y melancolía a partes iguales. Una película “contra el muermo”, decía el director. Algo así como una ensoñación idílica para una España que muy poco entraría en su periodo más miserable y oscuro. Belle epoque fue un golpe de aire fresco”dice el crítico de cine Luis Martínez en Historia de nuestro cine. “Estamos ante una película distinta en muchos aspectos, la refutación de ese lastre que arrastraba el cine español de que solo se podían hacer películas sobre la guerra civil, aquí se aborda de otra manera, situándola en 1931, antes de la proclamación de la Republica”, añade.

  • Primeros pasos en Hollywood para Penélope Cruz

    Belle Epoque también dibujó un futuro prometedor a sus jóvenes protagonistas. Para Penélope Cruz aquella era su segunda película tras su rodaje de Jamón, jamón (1992) con Bigas Luna. La primera y última película que Cruz pensó que haría en su vida. Afortunadamente Trueba se cruzó en su camino para darle uno de los grandes papeles de su carrera.

    Para Penélope, la noche de los Oscar de 1994 fue una de las más importantes de su vida, el primer paso en un Hollywood que años después se rendiría a sus pies. “Era todo nuevo, mágico y podíamos compartirlo todos juntos. Estábamos sentadas en el gallinero, ¡aún me sorprende que no nos echaran con la que liamos allí arriba!”, contaba la actriz en una entrevista.

  • Jorge Sanz también recodaba hace unos años en sus redes aquella gran noche en Los Angeles. La película también abrió para el actor un ascenso a su popularidad. Tras la película de Trueba, en los noventa, Sanz confirmó su popularidad con títulos como ¿Por qué lo llaman amor cuando quieren decir sexo? (1992), Chá-chá-chá (1998), o La niña de tus ojos (1998).

    Coincidiendo con el 95 aniversario del guionista Rafael Azcona, Historia de nuestro cine recupera este viernes Belle epoqué (1992), en una sesión doble en la que también podrá verse El pisito (1958). Aprovechando la ocasión repasamos algunas claves de la película que Azcona firmaba con Trueba a principios de los 90. 

    Violeta, un personaje transgresor 

    Ariadna Gil rompió moldes con el personaje al que dio vida en Belle epoque. Mucho antes de que el feminismo tomará fuerza, Ariadna se convirtió en uno de los primeros referentes LGTBIQ+ de nuestro cine. “Los hombres son todos unos egoistas, tú lo que tienes que hacer es encontrar a una chica que te comprenda, que te quiera”, le dice en el filme la madre de Violeta.

    Dos generaciones de nuestro cine

    Trueba logró algo que pocas veces ha tenido lugar en el cine español, reunir un reparto brillante en su emergencia y veterania. En él se daban la mano varias generaciones de actores. Veteranos como Fernán-Gómez y Agustín González; jóvenes ya consagrados por entonces como Jorge Sanz o Maribel Verdú, y nuevos rostros que en aquellos años venían pisando fuerte como Ariadna Gil o Penélope Cruz. Para Trueba la película siempre se planteo como una historia coral, con 11 protagonistas.


    Es difícil decir algo así de una obra de Azcona, porque cada historia que salía de su mente se convertía en una obra maestra, pero Belle epoque no solo logró hacerse con la deseada estatuilla dorada, también marcó la historia reciente de nuestro cine. Su mano se perfila en el trazo de una comedia cruel, en la que nada es malo ni bueno. “Si fuera verdad que la vida es dramática y trágica, nos hubiéramos muerto todos hace siglos”, decía el propio Azcona.

    El guion en el que también intervino Trueba y José Luis García Sánchez, planteba una historia de época, por aquel entonces un terreno no muy explorado en nuestro cine, siguiendo la estela de películas como El año de las luces (1986).

    Un éxito fuera de genero

    Es habitual que Fernando Trueba huya de los géneros puros. Belle époque es un buen ejemplo de ello, una película que recurre a la sátira costumbrista y al humor, pero que no podría clasificarse como comedia. “Cuando él empezó a plantear la película, pensaba mucho en el cine de Renoire, inspirándose en obras como La regla del juego (1939)”, comenta Luis Martínez. El propio cineasta siempre ha contado que el cine, como la vida, no tiene generos. Lo cierto es que aquella fórmula le llevó al éxito, no solo cualitativo sino cuantitativo. Belle epoqué logró convertirse en la película de habla no inglesa más vista en Estados Unidos en 1994 y recaudó más de 800 millones de euros en taquilla. 

  • TITULO: Saber Vivir   - Veinte cosas que dejamos de hacer cuando llegó el móvil,.

  • Veinte cosas que dejamos de hacer cuando llegó el móvil,.

    Un viaje en el tiempo nos permite ver cómo muchos hábitos de antaño ya son auténtica arqueología,.



    foto / Hay cosas que delatan nuestra edad (madura). Por ejemplo, hablarles a los jóvenes –a los de verdad, a los nacidos en torno al año 2000– en pesetas y recordar aquellos tiempos en los que se vivía sin móvil. El tema monetario se acaba pronto, pero el otro da para mucha batallita y arqueología sentimental sobre aquella era ya extinguida.

    Este sábado, Día Internacional del Móvil, vamos a repasar, con algo de humor y melancolía, veinte cosas que hemos dejado de hacer desde que llegaron los primeros celulares y ya después los smartphones, sus hermanos evolucionados. Y todo sin apenas darnos cuenta...

    1

    Llegar puntual a las citas

    Desde que vamos con móvil, somos unos 'relajados'. Si llegamos tarde, mandamos un whatsapp pidiendo cinco minutos más.Y luego otro. Y otro. Antaño abochornaba mucho más no ser puntual, porque tenías a la otra persona esperando y en la incertidumbre.Así que nos esmerábamos en no demorarnos. La evolución de la especie no siempre es a mejor, diga lo que diga Darwin.

    2

    Estar ilocalizable

    «Antes organizábamos nuestra comunicación telefónica en franjas horarias: solo en la comida o en la cena, que es cuando la gente estaba en casa», indica Montserrat Huguet, doctora en Historia Contemporánea y catedrática de la Universidad Carlos III. Ahora estamos las veinticuatro horas localizables, 'non-stop'.

    3

    Preguntar a un desconocido la hora o una dirección

    «¿Me dice la hora, por favor?». «Perdone, ¿dónde queda la calle...?». Antes del smartphone, le plantábamos a cualquier desconocido estas preguntas con toda naturalidad. Ahora, si lo hacemos, algunos ya nos miran raro y se preguntan por qué no miramos nuestro móvil... O, si son algo retorcidos o vanidosos, si queremos, en realidad, romper el hielo.

    4

    Coquetear y vacilar sin emoticonos

    Ahora mismo, el WhatsApp y sus emoticonos nos ayudan en el flirteo, en la ironía, en el vacile (a veces con clamorosos malentendidos). ¡Pero en la era premóvil tenías que tener labia! O creatividad. «Mis novios hacían ellos sus propios emoticonos o caritas en sus cartas», recuerda Huguet. Así que los emoticonos tienen antecesores 'artesanales'...

    5

    Ser infiel (fácilmente)

    Ser infiel en los tiempos modernos se ha vuelto sumamente difícil. Te pilla el del Google Street View o la vecina de enfrente, que se pone en plan 'pararazzi' y te saca una foto con su teléfono. Además, dejarse el móvil en casa (reiteradamente) es sospechoso. «Hemos automatizado tanto lo de ir siempre con móvil que, cuando nos salimos sin él, siempre hay alguien que te advierte de que te lo has dejado», indica Joaquín González Cabrera, investigador del Grupo de Ciberpsicología de la Universidad Internacional de La Rioja (UNIR). Sí, 'esfumarnos', por la razón que sea, está ahora muy complicado.

    6

    Pagar a escote y al contado

    Maldito bizum. Los humanos premóviles y buenos pagadores salíamos con los amigos y pagábamos a escote y al contado. Ahora, siempre hay alguno que sale con lo del bizum. Y no es lo mismo que sentir el tacto de la 'pasta' en tu mano.

    7

    Esperar... sin más

    Antes, estabas en una sala de espera o en la parada del bus y sacabas un libro, observabas tu entorno y, a veces, increíble..., ¡entablabas conversación con otro humano! Ahora el móvil ocupa esos momentos.

    8

    Oír música con el walkman o con el discman

    Estos ya son artículos de anticuario, claro. Ahora todo eso es vía móvil. ¿Ha sido a mejor? «Bendito Spotify con auriculares sin cable. Dicen que una de las torturas del infierno es intentar desenredar el cable de los auriculares», comenta el historietista Pedro Vera.

    9

    Hacer la lista de la compra en un papel

    ¿Tenemos que hacer la compra? Mensaje de WhatsApp a nosotros mismos o foto de lo que necesitamos con el móvil. ¿Apuntar un teléfono? Foto con el móvil. ¿Una sugerencia para un regalo? Otra foto. Todo lo 'anotamos' en el celular: antes simplemente lo memorizábamos o lo apuntábamos en papel. «No solo eso: en algunos casos, cuando se trata de guardar información ajena, además de ahorrarnos el papel, podemos prescindir del cerebro. Lo maravilloso de sacar una foto a la información que queremos retener es que ni siquiera necesita pasar por nuestra cabeza», ironiza Alejandro Romero Reche, sociólogo de la Universidad de Granada.El colmo de los colmos ya es mandarnos audios a nosotros mismos.

    10

    Comprar mapas y planos

    Todos recordamos cuando teníamos que hacernos con un mapa de carreteras ¡y luego usarlo! Esas peleas con el copiloto del coche, «que no sabía interpretar el mapa y no dejaba de darle vueltas y plegarlo y desplegarlo sin acertar a decirnos dónde demonios estábamos», evoca entre risas Romero Reche. Hoy en día esto ya es muy anacrónico, como un sainete de otro tiempo.

    11

    Mandar o entregar currículums físicos

    Cuántas fotocopias y fotos de carné habremos gastado en este cometido tan penoso. Y sellos. Y visitas, llenas de esperanza, para entregarlos en mano. Esta constumbre casi perdida no es como para añorarla. ¿O sí? «Es peor la moda de llenar las redes sociales de videocurrículums chispeantes bailando en un vagón de metro o exponiendo a tu abuela con gafas de sol para que diga lo que mola su nieto 'cool'», puntualiza Vera.

    12

    Comprar carretes y revelar fotos

    Esto ya suena a prehistoria.Como las frases de los mayores que nos advertían a los jóvenes de que nada de sacar fotos haciendo el tonto, que se acababa el carrete y revelarlo costaba 'un Congo' (expresión viejuna en sí misma).

    13

    Correr por casa para coger el fijo

    Era la lucha por la vida.Si no querías que toda la familia supiese quién te llamaba (y muchas veces teníamos razones para no querer que lo supieran), tenías que hacer los cien metros lisos por la casa.Pero siempre había alguien más rápido que tú.Incluso los abuelos llenos de achaques, porque no hay que subestimar su velocidad cuando se trata de cotillear.

    14

    Usar una cabina

    Qué recuerdos... «Las cabinas ofrecían una experiencia sensorial infinitamente más rica que la asepsia del smartphone. Teclados pegajosos, auriculares grasientos, micrófonos rezumantes de gérmenes... Tampoco se pueden comparar 'banners' y demás intrusiones publicitarias de diseño con el encanto artesanal de los mensajes manuscritos en el cajetín del teléfono, lleno de insultos y ofertas de sexo», bromea con el asunto Romero Reche.

    15

    Desaparecer en vacaciones

    «Si lo apagamos, tenemos sentimiento de culpa y obligación», dice Huguet. Mientras que antaño las vacaciones eran sagradas.

    16

    Enviar postales y cartas

    Era una bonita costumbre que casi ha desaparecido, aunque están saliendo 'insurgentes' que predican una vuelta a esta tradición. «Con el móvil se están estandarizando y simplificando los mensajes», advierte la historiadora.

    17

    Llevar reloj de pulsera

    «He recuperado el gusto por los relojes y son cojonudos para mirar la hora con aspavientos y dar a entender a los demás que vayan abreviando porque tienes prisa», asegura Pedro Vera.

    18

    Poner el despertador y tener linterna

    «¿Queda alguien que compre despertadores de mesita o linternas para no golpearse cuando te levantas a mear de madrugada?», se pregunta Vera. Vale, solo unos pocos chapados a la antigua.

    19

    Mirar la agenda de papel

    «Antes, en todas las casas estaba el listín familar y luego tenías el tuyo propio», recuerda Huguet. Ahora, esas agendas «que teníamos que actualizar de cuando en cuando» son reliquias de otros tiempos.

    20

    Comidas y cenas... ¿en paz?

    Ahora nos sentamos a la mesa y la bronca por el móvil, ausente o presente, es casi segura. En épocas 'presmartphone', la familia comía y hablaba.Esto no garantizaba que no hubiese broncas, pero, al menos, eran por razones ajenas al uso de la tecnología. «El móvil nos ha dado cosas, pero otras nos las ha quitado... y lo que es seguro es que todo lo ha complejizado», apunta González Cabrera, quien destaca que, si educar a los hijos ya era antes difícil, ahora entender su realidad 'online' y 'offline' es ya para maestros.


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