BLOC CULTURAL,

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jueves, 11 de marzo de 2021

Cuadernos de paso - La sonrisa del pelícano - Esta noche cruzamos el Mississippi - Crónicas marcianas - 8 de marzo en pandemia ,. / DESAYUNO - CENA - SABADO - ENREDATE - ¡ QUE HAY DE NUEVO ! - ¡ ATENCION Y OBRAS ! CINE - Vivan los novios - Telecinco - Kazuo Ishiguro: «Prefiero no escribir nada antes que un libro cualquiera»,. / REVISTA MUJER HOY DE CERCA PORTADA - VIAJANDO CON CHESTER - Samantha ,. / Viaje al centro de la tele -Tesoro de la tele - Marvel expande su universo televisivo ,. / Me voy a comer el mundo - El Helga de Alvear, cantera de artistas . / Cine de barrio - Cine - Que baje Dios y lo vea ,. / Versión europea -Cine - El viaje de Nisha , Sabado -13- Marzo,.

    TITULO: Cuadernos de paso - La sonrisa del pelícano - Esta noche cruzamos el Mississippi - Crónicas marcianas - 8 de marzo en pandemia  .
  
  La sonrisa del pelícano ,.
 
 La sonrisa del pelícano fue un programa español de televisión emitido por Antena 3, Presentado y dirigido por Pepe Navarro,.

 Esta noche cruzamos el Mississippi,.
 
 Esta noche cruzamos el Mississippi fue un programa de televisión producido y presentado por el periodista Pepe Navarro y emitido por la cadena española Telecinco entre el 18 de septiembre de 1995 y el 10 de julio de 1997. Se emitía de lunes a jueves en la franja del late night., etc.

 Crónicas marcianas ,.

Crónicas marcianas fue un late show de televisión, producido por Gestmusic Endemol y emitido por la cadena española Telecinco entre 1997 y 2005. Estaba dirigido y presentado por Javier Sardá y contaba con Miquel José y Jordi Roca, con quienes Sardá había creado La Ventana en la Cadena SER, como subdirectores y guionistas.
Es el programa de late night más longevo y más visto de la historia de la televisión en España.1​ A pesar de ser considerado por muchos como uno de los máximos exponentes de la llamada telebasura en España, obtuvo multitud de premios, como un Ondas, dos de la Academia de la Televisión y seis TP de Oro., etc.

 8 de marzo en pandemia ,.

Ni entendí las críticas feroces del año pasado a las asociaciones de mujeres ni entiendo este año el empeño de estas asociaciones feministas por celebrar el 8 de marzo al límite de lo imposible, con unas concentraciones que los expertos sanitarios desaconsejan,.

8 de marzo en pandemia

foto / De que el equilibrio es algo muy difícil de alcanzar da buena cuenta la bronca que se está formando con motivo de las celebraciones del 8 de marzo. Sí, otra vez este año toca bronca, y posiblemente el próximo año también. La razón es que los dos sectores que montan la bronca no dudan en instrumentalizar el día de la mujer,.

La celebración del 8-M viene lastrada por un año desolador. Si 2020 ha sido duro para casi todos, la crisis del Vovid-19, que no tiene visos de acabar, se ha cebado aún más en las mujeres. Han visto menguado sus salarios y sufrido con mayor crudeza el desempleo, al tiempo que durante el confinamiento han padecido una exacerbación de la violencia machista.

De nuevo las mujeres alzarán su voz este 8 de marzo, aunque no se producirán las manifestaciones masivas que en años precedentes han recorrido las calles de las ciudades españolas. El coronavirus obliga a la prudencia y a marchas testimoniales: presenciales y con un aforo reducido, en unos casos, o meramente virtuales. En Madrid, la justicia ha ratificado la decisión de prohibir las manifestaciones.

En Valencia, en cambio, hoy 8 de marzo y teniendo en cuenta también las convocatorias de los días precedentes, se han organizado 43 concentraciones, 23 en la provincia de Valencia y otras 20 en la de Alicante. La asistencia oscilará entre las 500 personas al acto de la calle colon y las 300 en los eventos organizados en los barrios.

Estas concentraciones han sido organizadas por la Assemblea Feminista que se ha desmarcado de la estrategia de la Coordinadora Feminista que se limitará a realizar una gran performance en la plaza del Ayuntamiento de Valencia.

Las convocantes han desoído la recomendación del Consell de evitar las concentraciones y buscar formas alternativas de reivindicación ante la emergencia sanitaria. Las organizadoras han argumentado que se van a respetar todas las medidas de seguridad sanitarias como la mascarilla y la distancia social.

La Delegación del Gobierno ha decidido mantener estas concentraciones porque no hay ningún informe en contra ni de las fuerzas de seguridad ni de la Conselleria de Sanidad.

En este sentido, fuentes de Sanidad explicaron que en la actual situación epidemiológica en la Comunitat, con una incidencia por debajo de los 100 casos, no se justifica prohibor estas concentraciones amparadas por los derechos fundamentales.

Pero en vez de las concentraciones de cientos de miles de personas de años anteriores, en esta edición las protestas tendrán especial protagonismo en las redes y emisiones por 'streaming'. Las plataformas animan a exhibir pañuelos morados en el trasporte público, las terrazas y los supermercados, acciones que se complementarán con mesas informativas, paseos al aire libre, comidas y marchas en bicicleta. En su mayoría, las organizaciones en defensa de la mujer llaman a un respeto escrupuloso de las recomendaciones sanitarias. Aun así, unas 500 acciones están convocadas en todo el país.

A las reivindicaciones clásicas de esta jornada, como la persistencia de la brecha salarial, el desigual reparto del trabajo doméstico o la inferior representación en los órganos de poder político, judicial y económico, las mujeres tienen un motivo añadido para salir a la calle, siempre que las autoridades sanitarias lo permitan. La covid ha arrasado con las expectativas económicas de las mujeres. No en balde, España terminó 2020 con más de tres millones y medio de parados, de los cuales casi dos millones son mujeres.

Desde la Assemblea Feminista han defendido, en esta línea, la importancia de la salir a la calle especialmente este año porque consideran que las mujeres son las que más han sufrido el impacto de la pandemia.

Lacoordinadora de Igualdad en la Universitat Oberta de Catalunya (UOC), María Olivella, certifica que la pandemia ha empobrecido a las mujeres. Pero además, el SARS-CoV-2 ha golpeado con especial saña a las trabajadoras que desempeñan servicios esenciales, profesiones sanitarias o procuran cuidados a niños y ancianos. «La mayoría de trabajos de atención al público y de cuidados están ocupados por mujeres. A ellos se añaden la enfermería y la medicina, que son sectores muy feminizados. Están las que trabajan en los supermercados, comercios, las que hacen la limpieza... Toda la primera línea de oficios más expuestos a la covid están ocupados mayoritariamente por mujeres, que han contraído más contagios».

El virus ha traído como consecuencia la vuelta a la doble jornada. Las mujeres ya se hacían cargo de la mayoría de las responsabilidades del hogar y del cuidado de los niños a pesar de su ingreso en la fuerza laboral. Pero ahora todavía más. «Las madres son las que están costeando, en detrimento de su economía, con sus sueldos, las cuarentenas preventivas de sus hijos e hijas y los cuidados», argumenta Laura Baena, fundadora del Club Malasmadres.

La jornada se desarrollará en un clima enrarecido a causa de ataques cruzados entre las diversas corrientes feministas. La 'ley trans' no es el único punto de discordia. Las discrepancias entre el feminismo antineoliberal y el más institucional es palpable. Según las primeras, la primera huelga de 2018 descolocó a líderes históricas que no supieron venir el cambio que se avecinaba. Para las segundas, la Comisión del 8-M, convocante del primer paro general feminista, puede morir de éxito al intentar abarcar demasiado e intentar bloquear ciertos debates como la abolición de la prostitución.

 

TITULO:  DESAYUNO - CENA - SABADO - ENREDATE - ¡ QUE HAY DE NUEVO ! - ¡ ATENCION Y OBRAS ! CINE - Vivan los novios - Telecinco - Kazuo Ishiguro: «Prefiero no escribir nada antes que un libro cualquiera» ,.

 

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   ¡Atención y obras! es un programa semanal que, en 
La 2, aborda la cultura en su sentido más amplio, con especial atención a las artes escénicas, la música, los viernes a las 20:00 presentado por Cayetana Guillén Cuervo, etc, foto,.

 

Vivan los novios - Telecinco ,.




Vivan los novios fue un concurso del género Dating show, emitido las tardes de los sábados por la cadena española Telecinco entre 1991 y 1994., Presentador Andoni Ferreño, Arancha del Sol, Natalia Estrada y Gabriel Andres Corrado Andreacchio, etc,

DESAYUNO - CENA - SABADO - ENREDATE -  ¡ QUE HAY DE NUEVO ! -  Kazuo Ishiguro: «Prefiero no escribir nada antes que un libro cualquiera»,.

DESAYUNO - CENA - SABADO - ENREDATE -  ¡ QUE HAY DE NUEVO ! -  Kazuo Ishiguro: «Prefiero no escribir nada antes que un libro cualquiera» ,. , fotos.

 

Kazuo Ishiguro: «Prefiero no escribir nada antes que un libro cualquiera»,.

«La inteligencia artificial nos traerá un desempleo masivo», vaticina el autor de 'Klara el sol', su primera novela tras el Nobel de Literatura | Indaga en la esencia del ser humano en la era del 'big data' y la selección genética,.

Kazuo Ishiguro, premio Nobel de Literatura en 2017. /R.C.
 
Kazuo Ishiguro, premio Nobel de Literatura en 2017. 
 
Rebanada De Tostadas, Mermelada Y Una Taza De Café Fotos, Retratos,  Imágenes Y Fotografía De Archivo Libres De Derecho. Image 32916751.

Klara es una máquina con sentimientos. Una AA, una Amiga Artificial especializada en el cuidado de niños. Desde un escaparate contempla el mundo y no deja de preguntarse qué pasa por las cabezas de los transeúntes. Aprende sus emociones y como ellos, necesita energía solar para cargarse. Es la protagonista de 'Klara y el sol' (Anagrama), la nueva novela de Kazuo Ishiguro (Nagasaki, 66 años) premio Nobel de Literatura en 2017 que indaga en esta fábula sobre la esencia del ser humano en los tiempos del 'big data', la manipulación genética y la dilución de las ideologías.

 Corazones de Merluza al Curry | Pescanova

 

A caballo entre la ciencia ficción el cuento infantil, Ishiguro aborda problemas agudos en un momento de cambio crucial para la humanidad. Cree que el 'big data' «cambiará nuestra percepción del alma» y nos obligará a preguntarnos «si hay algo más allá de lo cartografiable por la tecnología». «Klara, que es una especie de mascota electrónica, se pregunta qué hace distintos a los seres humanos, y yo creo que la diferencia radica en la capacidad que tenemos amarnos y de cuidar los unos de los otros, algo que nos hace únicos e irreemplazables», razona Ishiguro desde su casa en Reino Unido en un encuentro virtual con periodistas de habla hispana. «No sé si los robots acabarán siendo tan emotivos como los humanos», dice.

Los desafíos de la genética es otro de los temas de esta novela en la que Ishiguro se pregunta cómo abordaremos la creación de seres humanos mejorados física e intelectualmente mediante la edición genética, «una técnica cada vez mas fácil y que no está regulada». «¿Cómo evitaremos nacimientos de niños mejorados intelectualmente, físicamente o que no caigan enfermos?», se pregunta. «Habrá una especie de meritocracia salvaje y será peligroso que existan personas mejores que otras», se responde.

Cree que la inteligencia artificial acabará con muchos de los empleos actuales y cambiará el modelo económico y político. «Eliminará la mayoría de los trabajos considerados hoy parte de la élite intelectual», vaticina Ishiguro, muy crítico con imperios tecnológicos como Facebook o Google. «El negocio de las tecnológicas no favorece al bienestar de los seres humanos y hay que encontrar la manera de controlarlos para obtener ventajas», plantea. Lejos de hacernos la vida más fácil, cree que «generan desigualdad». «Facebook se lleva casi toda la tarta publicitaria observando contenidos y comerciando con ellos. Hay que encontrar la fórmula para alinear los intereses de la sociedad y de la tecnología. Necesitamos despertar para organizarnos y despejar lo de los peligros ingentes que trae la tecnología».

También le preocupa que el monopolio digital y la inteligencia artificial, «amenacen a las democracias liberales, que tienen más difícil competir con sociedades autoritarias, con modelos alternativos a la democracia muy potentes, como China y Rusia, que pueden tomar decisiones económicas eficaces y tienen sistemas de vigilancia sobre todos los ciudadanos de forma efectiva». «El análisis de izquierdas-derechas ya no es suficiente», señala.

Asegura, con todo, que 'Klara y el sol' no es un libro «oscuro o triste». Que se limita a mostrar una sociedad que cambia. «No soy pesimista, pero no tengo soluciones más allá de invitar a reflexionar sobre lo que está pasando y constatar los grandes desafíos ante los cambios científicos y tecnológicos», dice. Admite que los años le han vuelto «un poco más optimista respecto a la naturaleza humana». «Quiero celebrar lo bueno de los seres humanos en los que hay algo fantástico que surge cuando quieres proteger a los demás en un mundo duro y hostil en el hay que encontrar formas amor, de decencia y de bondad y de esperanza».

Ritmo Lento

El escritor británico de origen japonés es más que premioso. Empezó a escribir en 1982 y recuerda que esta es «solo» su octava novela. «No escribo todos los días y nunca me marco objetivos. Hablo, dialogo, pienso y reflexiono muchísimo antes de ponerme a escribir. Persigo ideas y pasa mucho tiempo antes de empezar escribirlas. Prefiero no escribir nada antes que un libro cualquiera», asegura.

No repetirse es otro de los objetivos de este lentísimo narrador que tiene como modelos a Stanley Kubrick en el cine y a Bob Dylan en la música, que buscaron siempre hacer cosas diferentes. «Dylan cambiaba en cada disco y Kubrick hacía lo propio con cada película. Yo me propongo hacer lo mismo y eso me da energía con cada libro, que refleja una época», dice. «La literatura es un espejo de lo que siento en cada momento y de por donde va la sociedad. Sirve para intercambiar emociones y sentimientos además de ideas», dice el autor de 'Lo que queda del día' (Premio Booker) o 'Los inconsolables' (Premio Cheltenham).

Asegura que el Nobel no ha sido un lastre para terminar esta novela. «Había escrito una tercera parte cuando me concedieron el premio y no me afectó. Era ya un proyecto sólido», dice el escritor, que bromea con los «superpoderes» que debía haberle dado el galardón. «Al volver de Estocolmo creí que todo funcionaría a la perfección, pero no cambió nada. Todos los problemas de la escritura estaban ahí y eran los mismos. Era como si el Nobel me lo hubieran dado en otro planeta», ironiza.

 

TITULO:   REVISTA MUJER HOY DE CERCA PORTADA - VIAJANDO CON CHESTER -  Samantha ,.





 VIAJANDO CON CHESTER Resultat d'imatges de VIAJANDO CON CHESTER

Viajando con Chester es un programa de televisión español, de género periodístico, presentado por Pepa Bueno, en la cuatro los domingos las 21:30, foto, etc.








REVISTA MUJER HOY DE CERCA PORTADA -
Samantha ,.
 
 Samantha,.
 
 
 

Samantha: "Es absolutamente cierto que en Operación Triunfo nos enrollamos todas con todos",.


 

foto / SAMANTHA. Beniarrés, Alicante, 1986. Fue una de las concursantes estrella de la última edición de Operación Triunfo, pese a sufrir una hipoacusia que provoca que sólo tenga un 40% de audición.Publica ahora un poemario de lo más íntimo: Mi refugio.

Sales de estar expuesta 24 horas al día en OT y escribes un libro en el que te expones aún más. ¿Tienes una vena exhibicionista?
Escribo de lo que siento y vivo porque no sé escribir desde la imaginación, sólo desde lo que me sucede. A mí me gusta escribir crudo. Si tengo que escribir 'joder', lo escribo, no busco ninguna metáfora para suavizar. Soy muy directa en todo. A los dos o tres días de salir de la Academia me ofrecieron la publicación del libro y les envíe todo lo que había escrito dentro. Les gustó y a partir de ahí escribí más. Y exponerme es la única forma que tengo de escribir.
Uno de los temas centrales del libro es el miedo. ¿Te persigue?
Constantemente. El miedo vive conmigo desde pequeña. Fui una niña con unos miedos terribles, con muchísimos problemas para dormir sola. Tengo un dragón en el estómago desde pequeña. He necesitado mucha terapia para aprender a convivir con él. Cuando tenía 8 años, mis padres dijeron: "Esta niña necesita ayuda". Y la recibí, pero luego llegó la adolescencia que fue mucho peor. La ansiedad, la incertidumbre y la presión para que estudiase. Y Samantha no quería estudiar ni filología catalana, ni matemáticas, ni biología ni nada. Samantha quería ser cantante. Pero con mucha terapia, ahora al fin estoy bien.
Y eres artista. Al final, ganaste.
No entendían que, mientras mis amigos se iban a la universidad, yo estaba haciendo mi carrera también. Pero por otro camino mucho más lento donde no existen oposiciones. Por suerte, están los concursos, que han abierto una puerta a ese mundo para quien no tiene contactos. Y aún así es dificilísimo entrar.
Necesitaste tres intentos para entrar en OT.
Sí, no me rendí tras las dos primeras y esta vez me preparé los castings a muerte mientras trabajaba en Lanzarote de animadora y cantante en un hotel. Y lo logré.
¿Fuiste una adolescente complicada?
Fui lo peor como adolescente. En el instituto me obsesionaba la popularidad, me creía lo más. Estaba todo el día pendiente de las redes sociales y me interesaba más ir bien vestida al instituto y que me conociera la gente que estar atenta en clase y sacar buenas notas. Eso me pasó hasta los 16 o 17 años. Ahí ya me empecé a centrar.
Es la edad.
Sí. Y he tenido mucha suerte de que mi círculo de amistades de toda la vida son ingenieros, doctores, personas supercentradas que me hacían recordar que hoy no podía salir porque tenía que estudiar. Aunque me costó.
Y obsesionándote así una popularidad de instituto, ¿cómo estás llevando ahora la real?
Bien, poco a poco. Llevaba siete u ocho años dando vueltas en el mundo de la música, haciendo bolos para diez personas, 50 como mucho, y en todo ese tiempo había logrado 1.000 o 2.000 seguidores en Instagram. Y antes de empezar el programa, sólo con los castings, ya estaba en 7.000. Y luego sales de la Academia y tienes 300.000. Buah, ¿cómo se gestiona esto? Te explota la cabeza. No eres ni la diosa griega que te dicen unos ni el demonio que te dicen otros. Al final, creo que todos los concursantes hemos pasado por terapia al salir.
¿Qué es lo que más te cuesta asumir?
Que incluso la gente que te conocía de antes ya no te trata de la misma manera.
¿Te sientes sola rodeada de gente que no conoces?
Al principio tenía mucha dependencia de mis compañeros del programa. Si no estaba Flavio llamaba a Maialen, si no estaba Maialen llamaba a Nia... No me quería quedar sola en casa porque no sabía gestionar ciertas cosas y no quería que me pillase sola un ataque de ansiedad. En septiembre asumí que necesitaba volver a terapia. Y me ha funcionado. Ahora estoy en un etapa muy buena, he conseguido estar bien sola. Al fin siento que tengo mi trabajo y mi vida. Pedir ayuda cuando la necesitas es lo más bonito del mundo, sé que hay gente a la que le cuesta, que lo considera un síntoma de debilidad, pero es un error: que a nadie le sepa mal pedir ayuda.
Sufres hipoacusia: sólo tienes un 40% de audición. ¿Sientes que se te trata distinto por ello?
A menudo. Siempre, desde que me lo diagnosticaron, he sido muy transparente con este tema, aunque a muchísima gente le da apuro preguntarme por el audífono. Es un prejuicio absurdo. Siempre lo digo: si llevas audífono no eres sorda, igual que si llevas gafas no eres ciega. Igual que no es ceguera tener miopía o astigmatismo, te falta muchísimo para ser sorda por tener hipoacusia.
Te lo diagnosticaron ya cerca de los 20 años. ¿Te ayudó a entender cosas de tu pasado que no sabías por qué te ocurrían?
Sí. un montón. Mis amigos me consideraban una persona aislada, estaban hablando todos y yo, en mi mundo; en mi familia era una constante que "Samantha es muy despistada", y en mis notas siempre ponían que "se distrae con facilidad". Joder, claro, es que no me enteraba. Tenía un 60 por ciento de pérdida auditiva, que es una barbaridad, y no lo sabíamos. El diagnóstico explicó muchas cosas sobre mí.
¿Cómo te afecta a la hora de cantar?
En nada. Absolutamente nada, porque estoy acostumbrada a ello y he aprendido a cantar en esas circunstancias. Sólo afecta en los directos porque hay muchos sonidos que tengo totalmente perdidos y tengo que pedir a los técnicos que me pongan el volumen de todo mucho más alto. Se asustan: "¿Más? Te van a doler los oídos". Y claro, cuando se lo explico se sienten superincómodos. Esas situaciones incómodas son frecuentes, sobre todo cada vez que no oigo algo, pido que me lo repitan y me sueltan: "¿Tú estás sorda o qué te pasa?".
Saliste del programa con la etiqueta de "la indepe de OT".
Peor: la indepe sorda de OT. Esa soy yo... o eso dicen. La verdad es que no entiendo por qué. ¿Por cantar Lluís Llach en catalán en la Gala 1? Yo nunca he dicho que fuera indepe.
¿Lo eres?
¿Sabes qué pasa? Que de joven milité en una asamblea de jóvenes de izquierdas, Assemblea de Joves del Comptat, pero lo que hacíamos eran cosas sociales: conciertos solidarios, manifestaciones por el Día de la Mujer, eventos en favor del valenciano como recitales de poesía... Pero nada que tuviera que ver con el independentismo. Si hubiese cantado en gallego y no en catalán, no me llamarían independentista.
¿Te molesta ese prejuicio?
No, ya me da igual. Sé lo que soy: soy valenciana, me encanta mi tierra y la defiendo, pero no he despreciado a España en ningún momento. Nunca me habrán oído decir nada malo. Incluso llamaron independentistas a mis padres. Todo por hablar con ellos en nuestro idioma materno. Bah, allá cada cual con sus prejuicios.
El lío que sí montaste tú fue decir que los concursantes os habíais enrollado todas con todos.
A ver, dije eso porque era verdad y para nosotros era algo sabido. La gente no se lo cree, pero lo que dije es absolutamente real. Estábamos allí metidos 12, éramos seis chicas y seis chicos y, ya antes de la Gala 0, estábamos en un parque haciendo botellón, cuando aún se podía antes del Covid, jugamos a un juego de adolescentes que disparó el tema. No caí en que se iba a escuchar, la verdad, pero tampoco mentí.
¿La lías mucho?
Muchas veces me digo: "Joder, Samantha, qué poco filtro tienes". Y si eso me pasa en el día a día, imagina en la Academia que todo lo graban. Pero nunca he ofendido a nadie aunque se me haya ido la olla, sólo soy un poco más payasa que la mayoría.

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