'La Hora Musa', presentado por Maika Makovski ,
a las 22:55 horas, en La 2 martes -7- Julio ,. , foto,.
Los abrazos prohibidos: Vetusta Morla homenajea a los sanitarios en la letra de su nueva canción,.
El
grupo madrileño Vetusta Morla ha lanzado este viernes Los abrazos
prohibidos, una canción solidaria en la que la banda está acompañada por
múltiples voces
El grupo madrileño Vetusta Morla ha lanzado este viernes Los abrazos prohibidos, una canción solidaria en la que la banda está acompañada por múltiples voces.
Todos los beneficios que genere el single irán destinados al Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) para ayudar a la investigación sobre el SARS-CoV-2 que ha causado la pandemia.
El tema es un homenaje a los trabajadores de la sanidad pública. La canción nace del poema colectivo El vals de los salvavidas, que se fue completando a partir de unos versos de Benjamín Prado y Elvira Sastre al que se han unido Andrea Valbuena, Andrés Suárez, Guille Galván, Irene G., Jorge Drexler, Leiva, Loreto Sesma, Marwan, Raquel Lanseros y Rozalén. Ese poema ha sido adaptado a la canción gracias a Benjamín Prado y Guille Galván.
Junto a Vetusta Morla cantan Alice Wonder, Andrés Suárez, Carlotta Cosials (Hinds), Christina Rosenvinge, Dani Martín, Depedro, Eva Amaral (Amaral), Ismael Serrano, Iván Ferreiro, Joaquín Sabina, Kase.O, Leiva, Luz Casal, Maika Makovski, Marwan, Nacho Vegas, Nina de Juan (Morgan), Rozalén, Santi Balmes (Love Of Lesbian) y Xoel López.
Por los ángeles de alas blancas del hospital
Por los que hacen del verbo cuidar su bandera y tu casa
Y luchan porque nadie muera en soledad
Por esas centinelas que no duermen
Para que el enfermo sueñe que va a despertar
Sin temerle a su miedo y usando su piel como escudo
Moviendo las camillas del peligro como un vals
Por los que hacen del trabajo sucio
La labor más hermosa del mundo
Y pintan de azul la oscuridad
Cada noche aplaudimos en los balcones
La muerte huye con sus dragones
Callamos al silencio un día más
Nunca olvidaremos vuestro ejemplo
Nunca olvidaremos la dedicación
Nunca olvidaremos el esfuerzo
Vuestro amor es nuestra inspiración
Por los que nunca miran el reloj mientras curan
Por los que hacen suyas las heridas de los demás
Por los que merecen los abrazos prohibidos
Y se meten contigo en la boca del lobo sin mirar atrás
Por los que hacen del trabajo sucio
La labor más hermosa del mundo
Y pintan, y pintan de azul la oscuridad
Cada noche aplaudimos en los balcones
La muerte huye con sus dragones
Callamos la boca al silencio un día más
Porque ya os habéis ganado a pulso
El aplauso más largo del mundo
Respeto y dignidad
Cada vez que salimos a los balcones
El miedo huye con sus dragones
Y callamos al silencio un día más
Supervivientes sí, maldita sea
Nunca me cansaré de celebrarlo,.
Todos los beneficios que genere el single irán destinados al Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) para ayudar a la investigación sobre el SARS-CoV-2 que ha causado la pandemia.
El tema es un homenaje a los trabajadores de la sanidad pública. La canción nace del poema colectivo El vals de los salvavidas, que se fue completando a partir de unos versos de Benjamín Prado y Elvira Sastre al que se han unido Andrea Valbuena, Andrés Suárez, Guille Galván, Irene G., Jorge Drexler, Leiva, Loreto Sesma, Marwan, Raquel Lanseros y Rozalén. Ese poema ha sido adaptado a la canción gracias a Benjamín Prado y Guille Galván.
Junto a Vetusta Morla cantan Alice Wonder, Andrés Suárez, Carlotta Cosials (Hinds), Christina Rosenvinge, Dani Martín, Depedro, Eva Amaral (Amaral), Ismael Serrano, Iván Ferreiro, Joaquín Sabina, Kase.O, Leiva, Luz Casal, Maika Makovski, Marwan, Nacho Vegas, Nina de Juan (Morgan), Rozalén, Santi Balmes (Love Of Lesbian) y Xoel López.
Letra de Los abrazos prohibidos, de Vetusta Morla
Por los ángeles de alas verdes de los quirófanosPor los ángeles de alas blancas del hospital
Por los que hacen del verbo cuidar su bandera y tu casa
Y luchan porque nadie muera en soledad
Por esas centinelas que no duermen
Para que el enfermo sueñe que va a despertar
Sin temerle a su miedo y usando su piel como escudo
Moviendo las camillas del peligro como un vals
Por los que hacen del trabajo sucio
La labor más hermosa del mundo
Y pintan de azul la oscuridad
Cada noche aplaudimos en los balcones
La muerte huye con sus dragones
Callamos al silencio un día más
Nunca olvidaremos vuestro ejemplo
Nunca olvidaremos la dedicación
Nunca olvidaremos el esfuerzo
Vuestro amor es nuestra inspiración
Por los que nunca miran el reloj mientras curan
Por los que hacen suyas las heridas de los demás
Por los que merecen los abrazos prohibidos
Y se meten contigo en la boca del lobo sin mirar atrás
Por los que hacen del trabajo sucio
La labor más hermosa del mundo
Y pintan, y pintan de azul la oscuridad
Cada noche aplaudimos en los balcones
La muerte huye con sus dragones
Callamos la boca al silencio un día más
Porque ya os habéis ganado a pulso
El aplauso más largo del mundo
Respeto y dignidad
Cada vez que salimos a los balcones
El miedo huye con sus dragones
Y callamos al silencio un día más
Supervivientes sí, maldita sea
Nunca me cansaré de celebrarlo,.
TITULO:
Cachitos de hierro y cromo - Ilu Ros ,. - ,. .
Martes-7- Julio,.
Martes-7- Julio a las 22:00 horas en La 2, foto.
TITULO: Cachitos de hierro y cromo - Ilu Ros ,. - ,. . Martes-7- Julio,.
Ilu Ros: "Aquí a la que se recuerda con respeto es a la Piquer pero a Franco, no"
La
dibujante desarrolla una nueva crónica sentimental de España a través
de lo aprendido de su abuela y de la cultura que confeccionó a dos
generaciones y que, de algún modo, tuvo su difícil extensión con la
llegada de la democracia
Cosas nuestras,
de la dibujante Ilu Ros (Mula, Murcia, 1985), es un libro difícil de
definir: mezcla de novela gráfica y diario ilustrado que, a través de un
diálogo entre una nieta (la autora) y su abuela, recorre casi un siglo
de cultura popular española enfrentando, como si fueran dos espejos, el
hoy y el ayer: dictadura y democracia, emigración e inmigración, mujeres
poderosas y mujeres empoderadas . Un juego que permite medir la
distancia que media entre dos tiempos subordinados para, así,
entenderlos a ambos, multiplicando, de paso, como pasa cuando se
enfrentan dos espejos, el reflejo de lo singular hasta volverlo
universal.
Un libro que, desde su portada, nos empuja a dejar Instagram para hablar con la abuela.- ¿Propone aparcar un rato Instagram para escuchar a nuestras abuelas?
- No creo que haya que dejar Instagram, pero es cierto que estamos viendo todo a través de una pantalla, y sería mejor hablar con las personas, con tu abuela o con quién sea. Porque en internet, al final, sólo vemos a quienes son afines a nosotros.
- ¿Hablar con la abuela es una forma de romper la burbuja digital?
- Es no estar solo rodeado de la gente que es afín a ti o de tu misma generación. Yo soy quien soy por muchísimas cosas, cosas que han pasado con anterioridad, incluso cosas que han pasado en mi familia antes de que yo existiera.
- ¿Y hablar con la abuela es una forma de entenderse con los que piensan diferente?
- Es eso. A la hora de hablar con una mujer de la edad de mi abuela sobre feminismo, inmigración, etc, vez que los puntos de vista son diferentes pero luego, hablando, encuentras puntos comunes. En el fondo, aunque no lo parezca, nos queremos entender con los otros.
- Tras varios años viviendo en Reino Unido acaba de regresar a España. ¿Su libro es lo único bueno que nos va a dar Brexit?
- No me vine por el brexit en sí, pero influye. Yo sabía que me quería volver a España. Me fui para quedarme un año y me quedé ocho. Vivía en Londres, que es una isla multicultural dentro de Inglaterra, así que el día en que salió el Brexit no me lo esperaba y lloré. Podría poner a Boris Johnson en los agradecimiento por mi vuelta, pero no mucho más.
- ¿Le ha sorprendido que la corrección política haya desembarcado de esta manera tan fuerte en España?
- Hay mucha mas corrección política allí, en Londres. Tienen una larga historia de inmigración y supongo que es una forma de gestionar eso. Pero luego ves que, aunque sean mas correctos, la corrección es su forma de mandarte a la mierda. Te dicen: «¿hace un poco de fresco, no?», y lo que te están diciendo es: «¡Cierra la puta ventana!».
- Decía Borges que el amor y el odio son equidistantes a la comprensión. ¿Nos falta encontrar ese punto para hablar de España?
- La verdad es que yo no entiendo los nacionalismos. No entiendo el sentirte orgulloso de haber nacido en un sitio u otro. Otra cosa es que te gusten y disfrutes de tus raíces, de tu cultura, de tu familia, de la educación que te han dado, de tu abuela... ¡de la cocina que hace tu abuela! Pero el amor por la patria es que no lo entiendo.
- ¿Venimos del miedo?
- Yo no viví en dictadura pero la visión que tengo es lo que me han contado en el colegio y en mi familia. Y el hecho de hablar con mi madre o mi abuela te hace entender cómo se vivía entonces. Recuerdo a mi padre contarme que para comprarse cierto libro que estaba prohibido tenía que ir a cierta librería. Hacían lecturas a escondidas porque venía la guardia civil. Para leer un libro de poesía... Para leer poemas... ¡¿Pero qué locura es esta?!
- Incluso en los totalitarismos la avidez de libertad deja registro en la cultura...
- Lo cuento en el libro: en pleno franquismo hay una canción que está censurada y no se puede cantar una parte de su letra, pero va Concha Piquer y la canta igual por sus santos ovarios. La censura le pone una multa y ella va y la paga. Y vuelve a cantar la canción y vuelve a pagar la multa. Ahí la Piquer se está revelando contra la censura y, por otra parte, el régimen la está dejando revelarse porque es ella. Y eso está ahí, en nuestra cultura.
- Cuenta en su libro que otros no tuvieron esa suerte...
- Claro: Miguel de Molina se tuvo que pirar y a García Lorca lo mataron. Y Juanita Reina se casó a los 39 años porque a su padre no le salía de las narices que se casara con su novio de toda la vida. Todo eso está, también, en la memoria de los abuelos y en sus propias experiencias. Son maneras de intentar sobrevivir en épocas muy duras.
- Hablar con su abuela te permitió entender cómo era el fascismo real, dice.
- Claro, y me enfada que se utilice la palabras fascismo a la ligera. Pero también depende del contexto. Si es una conversación o un chistes, ahí da igual todo. Pero, en realidad, lo que me da, más bien, es miedo. Miedo de que pueda haber gente que se crea, de verdad, que está viviendo en una dictadura. ¡Joder! ¿Sabes lo que es una dictadura de verdad? Bueno, no, no lo saben porque nunca lo han vivido...
- ¿Los logros de la lucha por la igualdad de la mujer se ven mejor comparándolos con el mundo de nuestras madres y abuelas?
- No estaríamos aquí si antes no hubiera habido una Clara Campoamor o ,incluso, una Rocío Jurado, que se decía a sí misma feminista. Muchas otras no hablaban de feminismo pero su actitud ante la vida tendía a intentar conseguir esa libertad que no tenían. Y eso es feminismo. Aunque no lo nombraran. Lo importante es que eso es lo que ha hecho que ahora, las mujeres, estemos donde estamos hoy.
- En su libro habla de Corín Tellado. ¿Corín Tellado era empoderada?
- Corín Tellado hacía novelas de ese amor romántico que ahora mismo el feminismo rechaza, pero era mujer e hizo que muchas mujeres leyeran. Mujeres a las que no se les facilitaba la lectura leyeron gracias a ella. Y yo pienso: publicó cinco mil novelas y es la escritora española más leída después de Cervantes... ¡¿Perdona?! ¡¿Hola?! A esa mujer, como mínimo, hay que hacerle un monumento.
- ¿Cómo fue el proceso creativo del libro?
- Quería crearme una atmósfera que me ayudara a entender el tiempo que le tocó vivir a mi abuela. Leí, por ejemplo, a Carmen Laforet y a Carmen Martín Gaite. Hay un libro de esta última, "Usos amorosos de la postguerra española", que cuenta cómo eran los estereotipos femeninos en aquellas épocas, cómo se enamoraban, cómo era el flirteo... Estos libros me servían, también, como documentación. Y de ahí viene el tema de la copla.
- ¿La memoria familiar también está en la ropa o en los discos?
- Cuando yo iba a ver mis abuelos, de pronto se levantaba mi tío con su camiseta de Rosendo, y se hacía sus bocatas de atún con mayonesa y se ponían a ver la tele. Y, al final, tu tienes siete años y te sientas ahí y también escuchas a Rosendo. Y no lo eliges pero también es parte de quién eres. No sólo Los Planetas o Lagartija Nick. La copla y Rosendo.
- ¿La cultura puede desactivar la carga simbólica del pasado?
- Es que a la hora de hablar de Franco, por ejemplo, no quiero hablar de él dándole esa grandeza. Así que voy a hablar de ti, o de tu tiempo, de otra manera. Es importante que se mantenga la memoria de todo el mal que ha hecho pero, oye, ¡eh!, que aquí a la que se recuerda con respeto es a la Piquer pero a Franco, no.
- Su abuela, en el libro, te da un consejo que me ha parecido el mejor consejos que he escuchado. ¿Se lo dio de verdad?
- Sí, ese consejo me lo dio de verdad. Y me lo dio tal cual lo cuento en el libro. Cuando le dije que yo nunca me casaría, me dijo: «Aunque no te cases cómprate una cama grande para que duermas ancha»...
TITULO: Saber y Ganar,.
Dedicamos un sentido homenaje al recientemente fallecido Pau Donés,
cantante y compositor, vocalista de la banda Jarabe de Palo. En varias
pruebas de este programa especial, como la Última Llamada y Con la
Música a Otra Parte, tenemos la ocasión de escuchar de nuevo temas que
nos han marcado como La Flaca o Bonito.
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