La hora de los Fósforos - La Cope - CARLOS HERRERA - Cáceres se rinde a la magia mundial . / RADIO - TELEVISION - La escritora Christina Dalcher - Las mujeres que se quedaron sin la facultad de hablar./ EL TRANVÍA DEL TIEMPO - José María Ramírez: «Me duele ver una ciudad sin futuro y sin aspiraciones»,.

TITULO: La hora de los Fósforos - La Cope - CARLOS HERRERA  -   Cáceres se rinde a la magia mundial . 
 
La hora de los Fósforos - La Cope - CARLOS HERRERA  - Cáceres se rinde a la magia mundial    .   , fotos,.

 Cáceres se rinde a la magia mundial . 

Las dos mejores selecciones del planeta se dieron cita en un Multiusos que vibró de principio a fin con el mayor espectáculo de fútbol sala a nivel internacional,.

Un España-Brasil, por mucho que intente etiquetarse como amistoso, a la hora de la verdad, sobre el parqué, nunca lo será. Y buena prueba de ello se pudo ver en el Multiusos en la tarde de este domingo. Cáceres, como pocas veces se recuerda, acaparó la atención del fútbol sala mundial para brindar el mayor espectáculo que puede ofrecer esta disciplina hoy en día. Las dos potencias del panorama internacional se midieron en un duelo sin igual en un pabellón tan abarrotado como entregado. A ritmo de charanga, los aficionados vibraron con una auténtica exhibición solo a la altura de los mejores que acabó con tablas en el marcador.
El combinado de Fede Vidal saltó al campo con Paco Sedano, Carlos Ortiz, Sergio Lozano, Miguelín y Juan Emilio, mientras que Marquinhos opt{o por la columna vertebral del Barcelona al completo: Guita, Dyego, Arthur, Leo Santa y Ferrao. Ambas selecciones salían con todo y, acompañados con el particular sonido de orquestal, daba comienzo el partido.
Los primeros minutos fueron un tanto locos. No hubo un dominador claro aunque se pudieron ver algunos detalles en las botas de Ferrao y Leo Santana por la parte visitante y las de Juan Emilio por el lado local. En una de ellas, intervino magistralmente Paco Sedano para no dar un disgusto inicial a los suyos. Tras esto, en el minuto cuatro, el juego se paró, para dejarle la palabra al Multiusos. El graderío, con una atronadora ovación, despidió a una de las figuras más importantes de 'la roja' en los últimos años. Tal y como manda la tradición para aquellos que han sido campeones del mundo, el guardameta fue homenajeado. Recibió, de la mano de Pedro Rocha, presidente de la Federación Extremeña de Fútbol y de la Federación Española de Fútbol Sala, una placa conmemorativa, un camiseta con su nombre y dorsal, y otra elástica firmada por todos sus compañeros. Con el público en pie, el portero decía adiós a su papel con la selección y sintió el reconocimiento de todos en su partido número setenta y uno como internacional.
Tras la emotividad del acto, la pelota volvió a rodar. Jesús Herrero sustituyó al homenajeado Paco Sedano y el partido se puso serio. Una pared de Ferrao acabó en un disparo picado de Pito que se marchó fuera por poco. Brasil estaba siendo ligeramente superior tras la reanudación del juego y España, con jugadas colectivas y con la figura de Lin como principal protagonista, fue sintiéndose cada vez más cómoda, hasta escribir el partido a su antojo. Pito, de nuevo, con un trallazo que fue directo al larguero, y luego Dieguinho, con otro palo, pusieron el peligro en las filas brasileñas. Instantes después, el portero español tuvo que actuar por partida doble para que la 'canarinha' no se estrenara en el marcador. Los locales fueron ganando terreno y Sergio Lozano primero, y Raúl Campos después, dieron el aviso a su rival. Tal fue así que, en el minuto 16, una sublime pared entre Lin y Raúl Campos, acabó con el balón en la red. El futbolista del MFK KPRK ruso dio en primera instancia al palo, pero aprovechó el rechace para adelantarse en el electrónico. Con un último disparo de Miguelín, se dieron por concluidos los veinte primeros minutos.
En la segunda mitad, la intensidad creció. Tanto que en ciertos momentos se transformó en agresividad. Arthur y Raúl Campos vieron la cartulina amarilla tras un encontronazo. El duelo cada vez tenía menos cariz de amistoso. Sin dueño, ambos conjuntos se repartieron las ocasiones y Pola pedía al público que se entregara todavía más. Quería que el Multiusos entrara en ebullición. Un doble intento de Sergio Lozano precedió al segundo gol de España. A raíz de un error de Ferrao, Rafa Usín fusiló sin piedad a Guita. Corría ya el minuto 12 y España ganaba 2-0. Frente a esto, Brasil reaccionó para poner las tablas en el marcador. No sin antes un nuevo rifirrafe. Esta vez, entre el autor del segundo tanto y el propio Ferrao. Dyego, en el 35, con una bicicleta sobre Miguelín, terminó en la escuadra de Jesús Herrero. Tan solo un minuto después, Gadeia, tras una internada por la banda, empató el encuentro. La emoción estaba servida hasta el final. Usín de nuevo y Miguelín, tuvieron en sus botas el tanto de la victoria, pero no llegó.
Reparto de goles y sensaciones en una de las tardes más mágicas que se recuerdan en el Multiusos. Con abucheos y pitos hacia el rival, y cánticos, 'ohs' e incluso olas para arropar a los suyos, la afición cacereña no defraudó y disfrutó de la élite del fútbol sala. Con este empate, España y Brasil ponen rumbo a Madrid para disputar el compromiso de vuelta de este desafío entre los dos transatlánticos del fútbol sala. En el WiZink Center se decidirá el todo por el todo y se alzara con la hegemonía mundial.

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  La escritora Christina Dalcher - Las mujeres que se quedaron sin la facultad de hablar.

 

Las mujeres que se quedaron sin la facultad de hablar,.

Christina Dalcher.

La escritora Christina Dalcher publica 'Voz', una distopía sobre la prohibición de comunicar como arma para el dominio social

Cien palabras al día es el límite para las mujeres. Cuando llegan a pronunciar esa cantidad, un brazalete les sacude una descarga de voltios que les recuerda que han sobrepasado los límites. Un nuevo gobierno extremista ha establecido esta regla que convierte a las mujeres en ciudadanas de segunda frente a los hombres, y sólo cuando el hermano del presidente sufre un extraño accidente que le deja sin habla, la neurolingüista Jean McClellan puede retomar sus investigaciones. Esta es la historia que cuenta 'Voz' (Roca Editorial), la primera novela de Christina Dalcher, doctora en Lingüista por la Universidad de Georgetown, que se publica este jueves.
Como todos los relatos distópicos, 'Voz' asusta por la posibilidad que detecta el lector de que las situaciones que se narran en ella puedan convertirse en realidad. «De hecho, algo parecido a lo que cuenta el libro ya está ocurriendo en algunos países, no en Estados Unidos, aunque aquí ya pasó antes. Yo me inspiré en el libro del siglo XIX 'Cultura de la vida del hogar', en el que se defendía una separación de los roles según el género (los hombres debían estar en la esfera pública; las mujeres, en la privada), y ese libro tuvo una versión en 1950. ¿Quién nos dice que no se puede repetir otra vez?», se pregunta Dalcher.
En inglés, la novela se titula 'Vox', una casualidad que invita a pensar en el auge del radicalismo político y religioso en todo el mundo. «El extremismo religioso es sólo uno de los movimientos que intentan imponer sus creencias a la gente. Pero tenemos otros radicalismos no basados en la religión y que pueden venir desde cualquier lado: el marxismo, el fascismo, el nazismo, la eugenesia... Deberíamos recordar que la religión no es un problema 'per se'; el problema es la gente que usa la religión como herramienta para oprimir a otros», asegura.
Los paralelismos entre la trama de la novela y los Estados Unidos de Trump parecen evidentes. «Es un error dar por garantizado que todo lo que ahora tenemos se mantendrá en el tiempo. Ante este riesgo, tenemos que estar alertas frente a cualquier señal, por muy insignificante que nos parezca», apunta la autora de un libro que ha sido comparado con 'El cuento de la criada'.
En la obra, el joven hijo de la protagonista se ve pronto atraído por las creencias machistas que se le inculcan en el colegio. Dalcher cree que hay una facción de votantes dispuesta a imponer «sus fines y sus ideales y son distintos a los de personajes como Jean», de opiniones más liberales.
«No conozco a nadie que quiera vivir en una sociedad autoritaria y totalitaria y por eso tengo la esperanza de que mi libro pueda ayudar a algunas personas a despertar. En alguna ocasión he pensado que me sentiría feliz por haber escrito esta novela si sólo consiguiera que alguien hiciera una de estas dos cosas: salir y votar en las próximas elecciones o pensar en la sorprendente facultad para el lenguaje de la que disfrutamos los humanos».

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José María Ramírez: «Me duele ver una ciudad sin futuro y sin aspiraciones»,.

Ramírez, de 58 años, es licenciado en Derecho y Políticas. 

El candidato socialista promete diálogo, escuchar al ciudadano y tejer lazos con otras ciudades y pueblos,.

«Cualquier tiempo pasado fue peor, también los nuestros», confesó José María Ramírez.
Con esa premisa, incluida en el manifiesto del 'Movimiento 2050', del que se declara entusiasta, se presentó el candidato a la alcaldía de Almendralejo por el Partido Socialista, 'Chema' Ramírez, en un acto arropado por el presidente y secretario regional, Guillermo Fernández Vara, los alcaldes de Mérida, Villanueva, Don Benito y por el secretario provincial del partido, Rafael Lemus, y por medio millar de simpatizantes.
Ramírez también destacó el último de los puntos del manifiesto: «Nuestras visiones y modelos tradicionales están pasados y hay que buscar nuevos referentes para seguir creciendo».

«Lo primero, abriría el Ayuntamiento, que parecía un metro y ahora una catacumba»

El que fuera director general de la Función Pública, alcalde y ahora director de Fomento de la Diputación, se mostró «muy ilusionado» en esta primera intervención pública tras su candidatura, a la que opta «en este mundo egoísta que vivimos», porque quiere a Almendralejo «simple y llanamente».
«Yo no quiero ninguna prebenda, ningún cargo, ni aspiro a ello», apuntó cuando confesó que él tiene la «vida asegurada», la presente y la futura, aunque lo que le preocupan son los ciudadanos y las generaciones futuras.
Sin criticar al gobierno de José García Lobato, Ramírez reconoció que dio el paso de ser el candidato a la Alcaldía que dejó en 2011, tras diez años en la gestión municipal, pensando que «antes de la cabeza, está primero el corazón» y porque le duele ver a «una ciudad sin futuro y sin aspiraciones, con demasiadas desigualdades».
Aseguró que la «maldad también existe en política» y que se muestra en acciones como «querer aniquilar al adversario político».
Frente a ello, asegura que si llega de nuevo al Ayuntamiento «no voy a perder ni un segundo en buscar en los cajones, en sacar trapos sucios» y lo primero que haría sería hartarse de escuchar.
«Yo me presento para pensar en el futuro, para hacer cosas. Lo primero que voy a hacer va a ser abrir las puertas del Ayuntamiento, que antes parecía un metro y ahora parece una catacumba», afirmó.
Se muestra enamorado de Almendralejo, a la que considera «la ciudad ideal», por su situación geográfica estratégica, por el carácter emprendedor y trabajador, por su sector servicios, por sus empresas, por el sector agrícola pionero, aunque lamenta que «la han adormecido, la han anestesiado» por «egoísmo y falta de solidaridad».
Frente a ello cree que puede aportar experiencia de gestión, responsabilidad, compromiso, honradez, pero sobre todo diálogo, algo que le llevó a conseguir logros como la reforma del cuartel de la Guardia Civil siendo ministro del Interior Mariano Rajoy, la construcción de la circunvalación o el hospital. «Tenemos que dialogar», recalcó.
Por ello, reivindica que Almendralejo retome su papel de cabecera de la comarca de Tierra de Barros y la relación con los pueblos y estrechar lazos de colaboración con las grandes ciudades extremeñas.
A sus 58 años, cita a su padre, Manuel, también político, fallecido con apenas 50 años, del que aprendió cosas como el «compromiso por el que estoy aquí»; y lo que le decía su madre, recientemente fallecida, que quedó viuda con 49 años, «pequeño, sé bueno, honrado, responsable y trabajador», que cada domingo le repetía por teléfono en su época de estudiante de Derecho en Madrid.