MARCA - AS - Isco podría irse como Özil o Di María, fotos,.
El malagueño no se siente fijo en el Real Madrid de Ancelotti y Wenger le desea como bandera del Arsenal,.
madrid. Isco Alarcón, hincha culé hasta hace un par de años y con un
perro llamado Messi, cumple con éxito su segunda temporada en el Real
Madrid y ha hecho un máster para comprender lo que significa jugar y
competir con estrellas foráneas de más relumbrón en el club. Sus
desbordantes actuaciones de este curso, con sacrificio al servicio del
talento, no le han servido para ser un jugador básico en los esquemas de
Ancelotti.
Ha participado en 31 de los 34 partidos de Liga, igualado en el 'top' con Cristiano Ronaldo, y ha sido titular en 23, para un total de 2.093 minutos. En Champions, ha salido de inicio en ocho de los diez encuentros, con 715 minutos disfrutados. Pero él siente que es el futbolista número 12. Ya fue clave el curso pasado para la consecución de la Copa del Rey y de la Champions, y se le consideró el mejor fubolista blanco en la inmaculada racha de esta campaña, con esos 22 triunfos consecutivos, récord en el fútbol español.
La lesión de Luka Modric le convirtió en indispensable y en el ojito
derecho de los aficionados merengues. Tanto ayudó en las tareas
defensivas que en varios partidos llegó a ser el jugador con más
distancia recorrida. Luego se produjo un descenso en su rendimiento,
considerado lógico desde el cuerpo técnico, acompañado de un bajón
anímico. Cuando volvieron Modric y James y la BBC al completo, Isco fue
carne de banquillo en Vallecas, volvió en el trámite del Bernabéu ante
el Eibar y sólo jugó 14 minutos en el primer asalto de Champions ante el
Atlético. Sí partió en el once en el choque de vuelta, pero se sintió
minusvalorado porque actuó por las ausencias de Marcelo, Modric, Benzema
y Bale.
«Después de tantos meses jugándolo todo y de buenas a primeras no hacerlo. Muy contento no estoy, yo creía que estaba haciendo un buen trabajo». Esa declaración sincera de Isco se produjo justo después de que el Real Madrid apease al Atlético de Europa y pasó algo desapercibida entre tanto festejo. Isco fue en 2013 el fichaje del consenso. Contó con la bendición de Florentino Pérez, Ancelotti y Zidane. Lo veían joven pero sobradamente preparado, el jugador nacional con más proyección y estrella en el último Europeo sub-21. El Madrid pagó al Málaga 25 millones, más cinco en variables.
Desde Inglaterra se asegura que el francés Arsène Wenger le desea para el Arsenal y se habla de una primera oferta de 45 millones. ¿Se repetiría el caso del alemán Mesut Özil? En la propia plantilla merengue le consideraban el jugador con más talento. Pero combinaba exhibiciones con citas indolentes. Un jugador que le costó al Madrid 18 millones en 2010 y que tres años más tarde lo vendió por 45, más cinco por incentivos, al gran club del norte de Londres. Özil se colocaba al frente del escalafón de traspasos más caros del Real Madrid hasta el verano de 2014, cuando el Manchester United decidió gastarse 84 millones de euros en Di María.
El 'Fideo' llegó en junio de 2010 al Madrid, procedente del Benfica. Costó 25 millones, más 11 en variables. Mantuvo una progresión geométrica en su rendimiento hasta convertirse en una de las joyas más preciadas del mercado y en un negocio enorme para el Madrid, donde ya pocos se acuerdan de él.
TÍTULO: EL EXTRA DIA DE LA MADRE, LAS CUENTAS DEL CALENDARIO,.
El Arroyo, por rivales, lo tiene mejor que el Cacereño, pero el equipo de Marcos cuenta con dos partidos como local por los dos de visitante del conjunto de Pato,.
A falta de tres jornadas para el final de Liga, nueve equipos del grupo IV se van a jugar la salvación en tan solo nueve puntos. Solo cuatro de esos nueve se salvarían, y otro promocionaría (formato que en los últimos años se asemeja a una especie de purgatorio con olor a infierno). Cinco puntos separan al colista Córdoba B del Marbella, que es duodécimo.Hay entrenadores que tienen clarísimo que los filiales no bajan, otros opinan que los que jueguen más partidos como local tienen mejores opciones de salvación, pero la mayoría coincide que la clave estará en medirse a rivales que no se juegan absolutamente nada. Y este caso es paradójico: el Córdoba B es el colista, a dos puntos de la salvación, pero es el único de los nueve equipos que no tiene ningún enfrentamiento ante rivales directos, que todos sus partidos son ante conjuntos que no se juegan nada y con dos partidos como local y uno solo como visitantes. El equipo en el que milita el extremeño César Morgado recibirá al campeón Cádiz y a un Jaén en mitad de la tabla y visitará a otro filial, el Betis B, que nada tiene que hacer ni por arriba ni por abajo.
Y, sin embargo, el que peor lo tiene en este aspecto es, precisamente, el Marbella, el mejor clasificado de todos. Los malagueños sólo tienen un partido en casa (Linense), se medirán a dos rivales directos a domicilio (El Palo y Lucena) y se enfrentará a tres equipos que se están jugando algo en este tramo final de Liga (la cuarta plaza el Linense y la salvación El Palo y Lucena).
«Lo que pasa que todo es relativo», coinciden varios entrenadores. «A lo mejor un equipo que ahora se está jugando algo, dentro de tres semanas no se está jugando nada, y viceversa... y ya ese calendario no es tan difícil o tan fácil como se ve o se analiza ahora». Los equipo que más partidos tienen ante rivales directos son Lucena, La Roda, Cacereño y Marbella (dos cada uno). El que menos, el Córdoba B (ninguno). Y el que mejor lo tiene porque sus rivales no se juega nada a estas alturas de campeonato es otra vez el filial cordobés (tres partido antes rivales sin opciones) y los que peor lo tienen son El Palo, La Roda, Cacereño y Marbella (con tres partidos de aúpa cada uno de ellos).
Bajo este aspecto, el Arroyo lo tiene algo mejor que el Cacereño. En las tres últimas jornadas, los de Pato se medirán a dos equipos que se están jugando algo (Villanovense, la cuarta plaza, y Cacereño, la salvación) y tan solo a un rival directo (Cacereño). El otro partidos para los arroyanos será el último ante un Cádiz que ya es campeón y que estará pensando en la siguiente semana, en la ida del playoff de ascenso. Los de Ángel Marcos, por su parte, aún tienen que medirse a dos rivales directos (Arroyo y Sevilla Atlético) y los tres equipos a los que le queda por enfrentarse se están jugando cosas (el Villanovense y el Melilla, la cuarta plaza, y el Arroyo, la salvación). Aunque también es cierto que el Cacereño tiene dos partidos en casa, donde se muestra tan fiable como un equipo de playoff, y el Arroyo dos a domicilio, donde tan solo ha ganado un partido en toda la temporada.
Todos los técnicos intuyen que para estar seguros hay que sumar seis de esos nueve puntos, aunque algunos creen que con cuatro serán suficientes. El calendario dirá.
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