TÍTULO: Un albañil de 32 años muere por un golpe de calor cuando trabajaba en Gévora,.

El fallecido, natural de Olivenza, se encontraba cavando una zanja en una finca con temperaturas superiores a los 35 grados,./ foto,.

Juan Francisco Díaz, de 32 años y vecino de Olivenza, falleció en la tarde de ayer debido a un golpe de calor cuando se encontraba trabajando en una finca de Gévora, una pedanía situada a escasos seis kilómetros de la ciudad de Badajoz.

CC OO alerta del aumento en la gravedad de los accidentes laborales

El Centro de Urgencias y Emergencias 112 de Extremadura recibió una llamada alertando de la situación a las 18.09 horas de ayer, en la que se informaba de que una persona había sufrido un mareo. Según pudo saber HOY, el fallecido es Juan Francisco Díaz, un vecino de Olivenza de 32 años que estaba dedicado al sector de la construcción.
Este hombre se encontraba trabajando en una finca situada junto al arroyo de Enviciados. En el momento en el que comenzó a sentirse indispuesto, se encontraba cavando una zanja para instalar el riego por goteo en una explotación de tomates.
En ese instante, cerca de las 18.00 horas, en Gévora el termómetro superaba los 35 grados, como en buena parte de Extremadura, debido a la inusual ola de calor que la región y el sur peninsular están viviendo durante estos días.
Una ambulancia del 112 con base en Badajoz se desplazó hasta la rotonda de las casas aisladas, cerca de la finca en la que trabajaba el hombre y junto a la zona de la conocida Cantina de Gévora.
Allí fue asistido por la ambulancia, que le trasladó hasta el Hospital Infanta Cristina de Badajoz. Sin embargo, los sanitarios no pudieron evitar la muerte del trabajador.

TÍTULO: FALLECE EN CHARLEROI A LOS 20 AÑOS EL EXJUGADOR DEL MANRESA RASMUS LARSEN,.

-foto-RASMUS LARSEN,.

El drama de su fallecimiento, del que aún se desconocen las causas, se vio aumentado porque su familia se había desplazado desde Dinamarca para arroparle en el partido que debía disputar ayer,.

El mundo del baloncesto resultó impactado ayer cuando a primera hora de la tarde se conoció la noticia de la muerte del jugador danés Rasmus Larsen, que la pasada campaña militó en el Bruixa d’Or Manresa. El pívot, ahora en las filas del Proximus Charleroi, estaba citado junto al resto de la plantilla al mediodía para desplazarse a Ostende donde iba a afrontar el primer partido de su semifinal de los play-off de la competición belga. No se presentó, lo que extrañó obviamente al cuerpo técnico por lo que enviaron a personal del club a su domicilio en Jumet, donde le encontraron muerto.
El jugador, de sólo 20 años, dejó un grato recuerdo a su paso por la franquicia manresana, donde batió varias plusmarcas de precocidad en poder de Ricky Rubio, siendo la más sonada su valoración ACB de 37 en el partido inaugural de la pasada campaña, merced a 21 puntos y 13 rebotes, el mejor registro histórico para un menor de 18 años.
El drama de su fallecimiento, del que aún se desconocen las causas, se vio aumentado porque su familia se había desplazado desde Dinamarca para arroparle en el partido que debía disputar ayer.