TITULO: El
paisano - Viernes -16 - Junio - Premio Trayectoria: Vegenat ,.
Viernes -16- Junio a las 22:10 horas en La 1 , foto,.
Premio Trayectoria: Vegenat,.
Fundada en 1982, Vegenat S.A, es una empresa alimentaria con más de 35 años de experiencia en el diseño, desarrollo y producción de productos alimentarios. Está especializada en deshidratados de productos vegetales como cebolla, cítricos, aceitunas, entre otros, tanto convencional como ecológico, que integra en sus actividades toda la cadena de valor del producto, desde la semilla hasta la comercialización de los productos. Son líderes europeos en fabricación de cebolla blanca deshidratada,.
TITULO:
VACACIONES - EUROPA DE PELICULA - Vivir “el mismo infierno dos veces”: la crisis golpea a los venezolanos que emigraron a Líbano,.
Vivir “el mismo infierno dos veces”: la crisis golpea a los venezolanos que emigraron a Líbano,.
Los migrantes que huyeron de la pobreza del país latinoamericano dudan entre regresar tras la mejoría económica o quedarse en un Líbano en caída libre,.
foto / Raghida Naim,.
Raghida Naim tenía 33 años cuando decidió mudarse de su país natal, Venezuela, al país de origen de su familia, Líbano, revirtiendo así el camino que sus padres y millones de libaneses habían seguido desde mediados del siglo XIX. , en particular a Brasil, pero también a Colombia, Argentina o la propia Venezuela.Era 1998, Líbano crecía a buen ritmo tras dejar atrás la guerra civil y Naim se acostumbraba a comunicarse en árabe, lengua que entendía de niño pero no hablaba. Un día le pidieron que preparara comida venezolana para darle variedad a una fiesta local y montó un pequeño quiosco vendiendo arepas, empanadas y chicha. “Preparé comida para tres días, pero el primer día se acabó todo”, recuerda sobre su casa en la localidad de Chouaifet El Aamroussieh, en las afueras de Beirut, que fue construida en el terreno donde estaba la casa de sus abuelos.
Comenzaron los pedidos en el país y en el extranjero. gastronomía para eventos Crecieron tanto que en 2011 lanzó oficialmente Doña Arepa, una empresa venezolana de alimentos que lo obligaba a tener siempre a mano un freezer lleno de empanadas y tequeños. Pero a medida que avanzaba 2019, quedó claro para todos que el rey de la economía libanesa estaba desnudo y que el país estaba sumido en una crisis que el Banco Mundial ha calificado como una de las tres peores del mundo desde mediados del siglo XIX. El coronavirus y la explosión en el puerto de Beirut un año después pusieron el broche de oro al país, que ahora está gobernado por un corralito bancario y el Estado proporciona solo cuatro horas de luz al día.
Como el resto de la electricidad depende de generadores privados, que a veces fallan, Naim ya no se atreve a comer empanadas y tequeños congelados. “La luz se apaga tantas horas que se puede estropear. Ya no los hago, los hago por encargo. Siempre les digo a los clientes que me envíen un mensaje con unos días de anticipación y luego los preparo”, señala. También comenzó a cotizar precios directamente en dólares, ya que el tipo de cambio es tan volátil (la moneda ha perdido el 99% de su valor) que terminó “cambiándolo cada semana”. De todas formas, admite, muy pocos clientes piden las mismas cantidades que antes y solo tiene casi latinos que extrañan el sabor de su país.
“Fue muy malo para ellos allí durante muchos años. Lo están haciendo un poco mejor en este momento. […] Los medicamentos ya están disponibles. Antes no había nada, yo les mandaba medicinas de aquí, ahora nos mandan de allá las que aquí no tenemos. Sí, ahora estamos peor que ellos”, admite Naim, que ha considerado volver pero se queda porque su marido -que nació en Líbano y no habla español- rechaza la idea. La mayor de sus dos hijas ya planea hacer un máster en España.
familias divididas
Su caso refleja el dilema que enfrentan los miles de venezolanos en el Líbano, que muchas veces son de ambas nacionalidades. Algunos, como Naim, vinieron por motivos familiares o de identidad; otros escaparon del colapso económico o de la oposición al chavismo. Y todos han visto cómo el país que dejaron poco a poco va mejorando económicamente mientras el de sus antepasados pasa por un túnel que ofrece pocas esperanzas. Hay alrededor de 340.000 descendientes de libaneses en Venezuela, según estimaciones de la comunidad. Hay rostros conocidos en altos cargos, como el fiscal Tarek William Saab o el hasta hace poco influyente ministro del Petróleo Tareck El Aissami, que proviene de una familia sirio-libanesa. En total, hay 14 millones de personas en el mundo (el doble que el Líbano), entre ellos el expresidente brasileño Michel Temer, el empresario mexicano Carlos Slim o la cantante colombiana Shakira.
Las crisis en ambos países están dividiendo a algunas familias. es el caso Rashel Lahoud, de 23 años, regresó a Venezuela en 2020. El Covid le dio el empujón que necesitaba. Viajaba a su país de origen para una boda y la pandemia la obligó a extender su estadía mientras observaba desde lejos cómo Beirut seguía decayendo. Decidió quedarse en Caracas, donde su familia emigró hace 13 años cuando era la ciudad más violenta del mundo. Su padre había llegado a Venezuela a los 18 años en busca de trabajo. Allí, los Lahoud se ganaban la vida vendiendo zapatos como comerciantes de varias marcas, lo que sigue siendo su sustento en la actualidad. “Durante los peores años en Venezuela, mi padre no cerró. Y afortunadamente, porque no sé qué haríamos en Líbano sin lo que tenemos aquí”, dice la joven. «Me escapé por un tiempo antes de que empeorara. Vine a Venezuela cuando el dólar estaba en 5.000 libras esterlinas. Ahora son 40.000», dice.
Junto con un hermano que regresó antes, ayuda a su padre en la zapatería. Otros dos hermanitos y su madre han estado esperando que se gradúen y vuelvan a estar juntos en Venezuela. “Ahora Líbano está aún peor”, dice, aunque matiza que la comparación entre las dos crisis es también una cuestión de magnitud y de temporalidad, que es mucho menor y no se hunde en cinco años.
En ambos países, la gente está condicionada por la inflación y la economía se ha dolarizado informalmente. En el primer país, el 80% de la población vive por debajo del umbral de la pobreza. La misma asociación existió durante varios años entre 28 millones de venezolanos, pero el año pasado la pobreza en el país se redujo a la mitad, según la encuesta de condiciones de vida realizada por universidades de Venezuela. Atrás quedaron los días en que los controles de cambio provocaban una grave escasez de alimentos y medicinas. Ahora hay comida disponible, incluso si la mayoría de la gente no puede pagarla.
apertura economica
La familia de Cristel Yamin está entre los siete millones que salieron de Venezuela. Hace una década vendió todo, cerró sus tiendas y se mudó al Líbano. En 2021 sucedió todo lo contrario, al calor de la apertura económica de Nicolás Maduro, quien “forzado por la hiperinflación y las sanciones internacionales que lo rodeaban financieramente” ha desmantelado algunos de los controles impuestos por su antecesor Hugo Chávez. .
«En el Líbano solíamos pasar los fines de semana sin electricidad», recuerda Yamin. En Venezuela, los servicios públicos fallan constantemente, pero las tarifas siguen siendo asequibles para quienes están conectados oficialmente. El joven de 28 años también da matices a las libertades económicas. “Aquí no se podían tener dólares en bancos venezolanos por muchos años, así que muchos de nosotros los teníamos en el exterior. En Líbano, todas las cuentas estaban en dólares, y cuando estalló la crisis bancaria, la gente se quedó en la cárcel con su dinero. Lo que hice profesionalmente, que era muy poco, lo pude hacer por partes. Mi padre tuvo la intuición de sacar su dinero antes”, explica. Yamin ha iniciado un negocio en su país de origen con una marca de bolsos que fabrica en el Líbano e importa productos libaneses. Los amigos que quedan allí emigran a Europa y otros países árabes, como los Emiratos Árabes Unidos.
Dida Saab es la otra cara de la moneda. Ella lo tiene claro: mientras en Caracas «Seguir hablando” [en referencia al chavismo], se queda en Beirut. Sus 58 años de vida los repartió entre Venezuela, México y Líbano. La guerra de 2006 entre Israel y la milicia de Hezbollah lo atrapó de vacaciones en la ciudad natal de sus padres y creó un «vínculo» especial para él. «Fue como, ‘Lo que todos experimentan, yo también lo experimentaré'». […] O sea: me voy a hundir con el barco”, recuerda en una cafetería de la capital libanesa. Tres años más tarde se instaló en el país con su marido. «Y no», se interrumpe, «no estoy pensando en vivir en otro lugar ahora».
Saab cree que los venezolanos en Líbano “han vivido dos veces el mismo infierno”, pero también que las experiencias anteriores los prepararon mejor que al resto de los libaneses para lo que estaba por venir. Y señala otra diferencia. En Venezuela, las manifestaciones fueron antigubernamentales y uno podría “culpar a alguien” de la situación. En Líbano, en cambio, la frustrada revolución iniciada en 2019 puso en entredicho todo el sistema, con sus políticos y sus corsés identitarios. “Mientras no haya una revolución interna dentro de cada grupo religioso y político, aquí no podemos exigir un cambio de gobierno”, lamenta.
TITULO: HOSPITAL - Asfixia palestina en Jerusalén ,.
Asfixia palestina en Jerusalén ,.
Siete muertos en tiroteo frente a sinagoga de Jerusalén Este,.
Es el último episodio de una espiral de violencia que se desató el pasado jueves tras una operación militar israelí,.
Siete personas murieron el viernes en un tiroteo frente a una sinagoga de Jerusalén Este y el autor del atentado fue abatido, en el último episodio de una espiral de violencia que se desató el jueves tras una letal operación militar israelí en Cisjordania ocupada.
El atentado, en un barrio de colonización judía del sector de Jerusalén anexado por Israel, se produjo pocas horas después de un bombardeo israelí de la Franja de Gaza, en respuesta a disparos de cohetes desde ese enclave palestino.
El jefe policial israelí, Kobi Shabtai, calificó el tiroteo como «uno de los peores ataques que hemos tenido los últimos años». Ocurrió en el Día Internacional de Recordación del Holocausto.
Según la policía, «hacia las 20H15 [18H15 GMT], un terrorista se acercó a una sinagoga en la avenida Neve Yaakov de Jerusalén y abrió fuego contra las personas en la zona», señaló un comunicado policial.
«Como resultado del ataque terrorista, siete civiles fueron declarados muertos y otros tres civiles resultaron heridos», según la policía.
Agregó que el atacante huyó del sitio en un vehículo pero que fue rápidamente rastreado y muerto en tiroteo con la policía.
El Magen David Adom (MDA, equivalente israelí de la Cruz Roja), dio parte de 10 personas baleadas, incluyendo una de 70 años y otra de 14.
«Oí una verdadera balacera», contó Matanel Almalem, un estudiante de 18 años que vive cerca de la sinagoga.
Joe Biden
El presidente estadounidense, Joe Biden, condenó el ataque en una llamada con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu.
«El presidente dejó claro que se trató de un ataque contra el mundo civilizado», dijo la Casa Blanca en un resumen de la llamada, agregando que Biden también «subrayó el férreo compromiso de Estados Unidos con la seguridad de Israel.»
Poco antes, Washington había llamado a «todas las partes involucradas» en este «escalada de violencia» a buscar «urgentemente desactivar la crisis».
Nueve personas murieron el jueves en una incursión israelí en el campamento de refugiados palestinos de Yenín, en el norte de Cisjordania, según el ministerio palestino de Salud.
Otro palestino murió ese mismo día por disparos israelíes en un incidente separado cerca de Ramala, también en Cisjordania.
Israel
Israel afirmó que se trató de una operación de «contraterrorismo» contra la organización armada Yihad Islámica.
La Autoridad Palestina la calificó de «masacre» y anunció que dejaba de cooperar en materia de seguridad con Israel.
Según la ONU, no ha habido tantos muertos en una operación israelí en Cisjordania desde que comenzaron los registros de esas operaciones en 2005.
El Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos llamó el viernes a «poner fin al ciclo de violencia sin fin» y se dijo «muy preocupado por el fuerte aumento de muertes de palestinos en operaciones israelíes en Cisjordania ocupada».
La ministra palestina de Salud, Mai Al Kaila, denunció que las fuerzas israelíes, antes de retirarse, «lanzaron de manera deliberada granadas de gas lacrimógeno» en el servicio de pediatría de un hospital de Yenín, lo que «provocó la asfixia de algunos niños».
«Nadie lanzó gas lacrimógeno deliberadamente en un hospital (...), pero la operación se llevó a cabo no lejos de un hospital y es posible que entrara gas lacrimógeno por una ventana abierta», dijo a la AFP un portavoz del ejército israelí.
Campo de refugiados de Yenín
El campo de refugiados de Yenín, creado en 1953, alberga cerca de 20.000 refugiados, según la UNRWA, la agencia de la ONU a cargo de los refugiados palestinos.
El ejército israelí, que ocupa Cisjordania desde 1967, efectúa operaciones casi diarias en ese territorio y en particular en los sectores de Yenín y Naplusa, bastiones de grupos palestinos armados.
Israel bombardeó el viernes la Franja de Gaza en respuesta a un disparo de cohetes desde el enclave palestino.
El ejército indicó que realizó al menos dos rondas de bombardeos aéreos contra islamistas de Hamás, tras varios disparos de cohetes procedentes de Gaza hacia el sur de Israel.
Los bombardeos israelíes alcanzaron la ciudad de Gaza, capital del enclave, constataron periodistas de la AFP.
TITULO: VUELTA AL COLE - Comunidades de regantes - iRiego acerca el medio rural a 80 alumnos de 1º de Primaria del Colegio Leonés,.
Comunidades de regantes - iRiego acerca el medio rural a 80 alumnos de 1º de Primaria del Colegio Leonés,.
foto / Los alumnos de 1º de Primaria viven «una experiencia única» en la zona del Páramo Leonés de la mano de la empresa leonesa iRiego.
La empresa leonesa, ligada y comprometida con el mundo rural, organiza cada año diferentes actividades para dar a conocer el pueblo a los más pequeños para que vean la importancia que tiene el sector primario en nuestras vidas,.
La empresa leonesa iRiego, en colaboración con el colegio Leones, han organizado una jornada con 80 niños de primero de primaria. La jornada forma parte de la línea social de la empresa, encaminada a dar a conocer las zonas rurales de la provincia de León.
En esta ocasión, la visita ha estado centrada en la zona del Páramo leones, con la visita a una majada de ovejas en Urdiales del Páramo y de una granja de vacas en Palacios de Fontecha.
En la majada de ovejas Granja del Medio, propiedad de Nico, los niños han podido conocer de la mano del propietario y de tres veterinarios, lo importante que es el cuidado de los animales por su salud y la de los humanos. Los niños han podido tocarlas y caminar entre ellas. Una experiencia tan natural hace años, pero que es tan rara en los momentos actuales.
«Una experiencia única e irrepetible»
En la granja de vacas propiedad de los hermanos Beneitez, los niños han podido ver y tocar los terneros que hay en la granja, así como las vacas grandes, presenciando el parto de una vaca. «Una experiencia única y seguramente irrepetible para ellos. La gran explicación y cariño por parte de Alfonso, Elena y de todos los propietarios, ha hecho que esta sea una gran experiencia para ellos». Como despedida, Lactiber les ha obsequiado con zumos para todos los niños y les ha explicado dónde va toda la leche de sus vacas.
A continuación, se han desplazado a la estación de bombeo del sector A de la Comunidad de Regantes del Páramo Medio, donde su presidente, Julio César Carnero, ha plantado un árbol con una de las niñas del colegio, como seña de compromiso con el medio ambiente y prometiendo su cuidado hasta la próxima visita de los niños.
Para culminar la jornada, se visitó la empresa referente en la zona Agroalimentación Mendoza Pérez en Villagallegos, donde los niños pudieron ver los productos obtenidos del campo y su utilidad tanto para animales, como para humanos.
«Fomentar lo rural frente a la despoblación»
iRiego como empresa ligada y comprometida con mundo rural, cada año organiza diferentes actividades para dar a conocer el pueblo a los más pequeños, intentando que los niños, desde bien pequeños, vean la importancia que tiene el sector primario en nuestras vidas. Según palabras de su gerente: «La importancia de conocer de dónde vienen nuestros antecesores y entender de dónde vienen los productos que consumimos, es de suma importancia cuando hablamos de la España vaciada, ya que la única manera de luchar contra esta despoblación es trayendo el pueblo a la ciudad, es fomentando lo bueno que tiene el campo y atrayendo con la libertad que suponen las zonas rurales«, aseguran desde iRiego,.
Por todo esto, «no debemos permitir que nuestros hijos no hayan visto nunca vacas u ovejas ya que nosotros, sus padres, los hemos tenido de manera habitual en nuestra niñez. Hay pocas cosas más felices y baratas que subirse a un montón de maíces y llenarse de polvo, y estos niños hoy han podido experimentarlo, así como presenciar el nacimiento de un animal. Es algo único y que solo los pueblos nos pueden dar y no debemos dejar de mostrarlo», añaden.
iRiego seguirá organizando visitas a zonas rurales y anima a todo aquel que quiera que se ponga en contacto con ellos,.
TITULO:
EN PRIMER PLANO - A FONDO - REVISTA XL SEMANAL PORTADA ENTREVISTA - En
la tuya o en la mía - Miercoles -21- Junio -Macarena Olona ,.
En la tuya o en la mía - Miercoles -21- Junio ,.
En la tuya o en la mía',
presentado por Bertín Osborne, acerca a los espectadores el lado más
desconocido de personajes relevantes de diversos ámbitos. Durante
aproximadamente una hora, los telespectadores tienen la oportunidad de
conocer mejor al invitado y también al propio Bertín Osborne, en La 1 a
las 22:30, el miercoles - 21- Junio , etc.
EN
PRIMER PLANO - A FONDO - REVISTA XL SEMANAL PORTADA ENTREVISTA - En la
tuya o en la mía - Miercoles -21- Junio - Macarena Olona ,.
Macarena Olona ,.
Interior aplaza la inscripción del partido de Olona por un defecto de forma,.
La exdirigente de Vox tiene de plazo hasta este miércoles para subsanar los errores en los estatutos de Caminando Juntos,.
El Ministerio del Interior ha congelado, por el momento, la inscripción en el Registro de Partidos de Caminando Juntos, la formación política con la que Macarena Olona pretende presentarse en las Elecciones Generales del próximo 23 de julio.
El departamento que dirige Fernando Grande-Marlaska comunicó este martes a la exdirigente de Vox que se ha frenado el alta oficial de su formación por defectos de forma, fundamentalmente en los estatutos de la nueva formación. Según fuentes de Interior, hay fallos en las direcciones de notificación, en los órganos de representación y gobierno, en los órganos territoriales, en la asamblea general y en el comité permanente.
La exdiputada, según reveló ella misma, tiene de plazo hasta este miércoles para subsanar esos errores en la documentación presentada a Interior. De no conseguirlo, Caminando Juntos no podría concurrir a los próximos comicios, en los que la propia Olona quiere ser cabeza de lista por la circunscripción de Granada.
Macarena Olona se quejó este martes de que el Ministerio del Interior haya tardado casi una semana en comunicarle oficialmente la existencia de trabas para la inscripción de su partido, cuya alta en el registro solicitó el miércoles de la semana pasada.
«Plan B»
La exdiputada, que denunció el supuesto trato de favor de la administración con el partido de Yolanda Díaz que obtuvo la inscripción en apenas 24 horas, anunció que si finalmente Caminando Juntos no consigue el alta en el registro habrá un «plan B» para concurrir a los comicios de julio, aunque no dio detalles sobre esta otra vía para estar presente en las elecciones generales.
La idea de Olona es que su formación, si finalmente consigue la inscripción en el registro de Interior, se presente en diez provincias: Madrid, Barcelona, Valencia, Alicante, Murcia, Málaga, Cádiz, Sevilla y Las Palmas, además de Granada. En la actualidad, Olona y sus afines se encontraban precisamente en el proceso de captar los avales necesarios en esas provincias para presentarse: un 0,1% de los censados.
En Granada, el último puesto lo ocupará un antiguo compañero en Vox, Ramón Quesada. La lista por Cádiz la encabezará Héctor Párraga, abogado laboralista y expresidente del Comité de Garantías de Más Madrid.
En Málaga el número será José Luis Cortés, también exmilitante de Vox; igual que la lista por Sevilla, donde se incorporarán el exdirigente de Vox Diego Romero, la procuradora Silvia Carrión y el presidente de 'Somos España', Luis Nogués.
En una entrevista en Canal Sur este martes, la exdirigente de Vox explicó que conoció en Sevilla el anuncio del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de adelantar las elecciones generales y que no contaba con «un plan preconcebido» para concurrir a ellas. «Pero sí se abrió una ventana de oportunidad que nos puso en la tesitura de 'todo o nada'», confesó. En todo caso, se «encerró» toda la noche del martes 30 de mayo para redactar los documentos que presentó el miércoles siguiente ante el Ministerio del Interior para el registro de Caminando Juntos.
La propia Olona sabe que su proyecto lo va a tener difícil en los comicios de julio. De hecho, admitió sin ambages que ve complicado que su partido consiga representación parlamentaria «porque necesitamos el 12 por ciento de los votos en Granada o el 5 en Madrid», las dos circunscripciones en las que alberga más esperanzas de entrar en el reparto de diputados. Si Caminando Juntos no logra representación en la el Palacio de la Carrera de San Jerónimo -anunció- esta vez sí se retirará definitivamente de la vida política,.
MI CASA ES LA TUYA - VIERNES -16- Junio ,.
MI CASA ES LA TUYA -', presentado por Bertín Osborne,.
acerca a los espectadores el lado más desconocido de personajes relevantes de diversos ámbitos. Durante aproximadamente una hora, los telespectadores tienen la oportunidad de conocer mejor al invitado y también al propio Bertín Osborne, en Telecinco a las 22:00, el viernes -16- Junio ,etc.
EL BLOC DEL CARTERO - LA CARTA DE LA SEMANA - MI CASA ES LA TUYA - viernes -16- Junio - Arturo Pérez Reverte -Por qué no escribo sobre política,.
La literatura y la política son dos campos o disciplinas que históricamente han caminado de la mano. Pensemos en el exilio de Dante, que tuvo su razón de ser precisamente en intrigas políticas locales. O, más cercana en el tiempo, en la depuración de literatos llevada a cabo en el siglo XX por dictaduras de todo signo, desde la Alemania Nazi hasta la Unión Soviética pasando, claro, por el régimen de Franco en España.
La política ha sido, desde el inicio de la civilización, una de las facetas principales, si no la principal (en el sentido de que es la que más afecta a la existencia diaria) del pensamiento. La literatura, en cambio, ha sido relegada comúnmente a un escalón secundario, arrinconada como mero entretenimiento, un arte (como todas) sin utilidad práctica, incluso susceptible de poseer efectos nocivos, especialmente en su manifestación más pura, la poesía. No en vano Platón expulsó a los poetas de su República ideal.
Sin embargo, el hecho antes mencionado de que los dictadores más perversos de la historia tuvieran la precaución de perseguir y silenciar a los grandes escritores de su tiempo es la mejor muestra de que la literatura va mucho más allá del mero entretenimiento. Más que un «arma cargada de futuro», ha de considerársela como un «arma cargada», sin más. La pluma es menos expeditiva y eficaz que la espada en el corto plazo, pero en el largo es evidente que la pluma adopta el papel de la tortuga en la fábula, y casi siempre termina por salir victoriosa.
Así, no hay un solo régimen político que no haya patrocinado de un modo u otro a su propia cohorte de literatos, o que haya censurado la labor de estos según sus propios intereses. Incluso en los regímenes democráticos se puede defender esta idea si se piensa en qué autores son habitualmente objeto de reconocimiento académico o mediático por parte de las instituciones.
Ahora bien, no es esta una relación propiciada por una sola de las partes, en absoluto. No es solo el poder quien busca el favor o el silencio de los escritores, sino que son los propios escritores los que se arriman al poder buscando o bien amparo o seguridad económica, o bien con voluntad sincera de mejorar la sociedad en que viven. Podríamos, como el caso del propio Dante, hacer referencia a autores clásicos que en su momento se refugiaron bajo el ala de poderosos mecenas políticos. Pero por ir acercándonos a nuestros días, y a nuestra patria, citaremos mejor los casos de Espronceda, Larra, Galdós, Unamuno, Ortega, Azorín o Alberti, todos ellos diputados en las Cortes españolas (o candidatos a, en el caso de los dos primeros), cada uno por sus propias motivaciones personales. Cabría añadir a otros como Semprún o Labordeta, también diputados (aunque no fueran escritores en el sentido más tradicional del término), o, remontándonos un poco más atrás en el tiempo, a nuestro primer Premio Nobel de Literatura, José de Echegaray, más conocido en su tiempo por su labor política y científica que como dramaturgo (la ausencia de escritoras en este compendio, por cierto, responde a razones históricas: exceptuando el breve lapso republicano, donde hubo algunas, y muy importantes, como Clara Campoamor, Margarita Nelken o Victoria Kent, hasta el advenimiento de la democracia no estuvo permitido el acceso de mujeres a la política, y aun en los primeros años de democracia la participación de estas fue inexcusablemente limitada).
No cabe duda, por tanto, de que el conocido mantra que se usa actualmente (seguro que lo han escuchado y leído infinidad de veces) de «no mezclar política con X» (siendo el contenido de la X variable según el contexto) no ha sido aplicable a la literatura hasta fechas muy recientes. Ni durante el siglo XIX ni durante las primeras o últimas décadas del XX (dejemos aparte el largo paréntesis de la dictadura) a nadie en su sano juicio se le hubiera ocurrido espetar un razonamiento del tipo «no hay que mezclar la política con la literatura». O, peor aún, «dedícate a escribir y no te metas en política», una advertencia que, enunciada de un modo u otro, muchos jóvenes autores llevamos escuchando desde el comienzo de nuestras carreras literarias.
Dedicarse a escribir y no meterse en política. Algo verdaderamente complicado, salvo que uno se limite a escribir poesía modernista al estilo de Rubén Darío (el arte por el arte) o novelas y cuentos de carácter puramente escapista (qué se yo, literatura erótica o de terror). Porque esto de no meterse en política no es tan sencillo como parece: cualquier novela histórica o novela negra, pongamos por caso, contiene un fuerte contenido, si no político, al menos social, ya que suele tratar de reflejar fielmente las luces y sombras de la sociedad en que se ambienta la narración. O sea, no es necesario que una novela sea puramente “política” para que en esta se vislumbren aspectos como la desigualdad, la educación, la sanidad, o el sistema de justicia, que dependen en último término de la situación política de cada momento.
Aunque lo cierto es que el prurito de asomarse al hecho político normalmente no se sacia solo con lo anterior. Los escritores no son solo gente que junta letras, sino gente que observa, reflexiona, y que tiene la posibilidad (y la habilidad) de poner sus reflexiones por escrito, con o sin la ayuda de un marco narrativo ficcional. Algunos, pocos, se mantienen realmente al margen de la política, pero la mayoría no lo hace: la mayoría suele aliviarse el escozor publicando opiniones políticas en Twitter o Facebook, sin atreverse a entrar más al fondo, mostrando simpatías por una u otra bancada del Hemiciclo (la izquierda o la derecha) pero no significándose explícitamente como seguidor de ningún partido político concreto. También, por supuesto, hay algunos (los elegidos) que son contratados por radios o periódicos para compartir sus opiniones políticas en tertulias o columnas. Pero estos, de la misma manera que los anteriores, no suelen compartir abiertamente el sentido de su voto.
Este es el estado actual de las cosas. Los casos de escritores que hoy se atreven a dar el último y definitivo paso hacia adelante, el de transitar el trecho desde la observación y la reflexión hasta la acción, entrando ellos mismos a formar parte de una lista electoral, son testimoniales. De primeras, es poco probable que alguno de ustedes pueda citar más de dos o tres. Quizá Luis García Montero, candidato hace no mucho de IU a la Comunidad de Madrid; Álvaro Pombo, en su momento candidato al Senado por UPyD; o Ángeles Caso, en la lista de Podemos a la alcaldía de Oviedo allá por 2015 (los tres, por cierto, con un resultado altamente insatisfactorio).
Se podría citar seguramente algún ejemplo más (Fernando Iwasaki, Andrés Trapiello, Fernando Delgado, etc.), pero aun así parece claro que en nuestros días la relación entre política y literatura dista mucho de la de otros períodos históricos. Sin ir más lejos, muchos de los nombres apuntados ocuparon únicamente puestos «de relleno» en las listas en que iban inscritos, es decir, que no tenían auténtica voluntad de ocupar ningún cargo público. Y desde luego, no hay un solo autor de primer orden en España que lidere un partido político, ni mucho menos uno que se postule como candidato real a entrar en el Congreso de los Diputados, o en ninguna otra institución política de relevancia, ya puestos. No hay hoy un solo Galdós, un Unamuno, un Ortega dispuesto a combinar su tarea literaria con el ejercicio de la política. La única excepción relevante en nuestras letras, en nuestra lengua, sería la de Mario Vargas Llosa, ex candidato a la presidencia de Perú, quien accedió a la nacionalidad española justamente tras su fracaso electoral, ante la amenaza de ser despojado de la peruana por su rival.
Hace quinientos años, el mismísimo Fernando de Rojas, autor de La Celestina, llegó a ejercer de alcalde de una ciudad como Talavera de la Reina. Díganme, ¿acaso se imaginan a Juan José Millás, Arturo Pérez-Reverte, Elvira Lindo o Alicia Giménez-Bartlett al frente de un consistorio? Resultaría harto difícil de concebir, y no precisamente porque los aludidos carezcan de la capacidad necesaria para ejercer el cargo; en todo caso, se antojan más bien sobrecualificados para ello.
Me remito a la advertencia enunciada anteriormente, y me pregunto: ¿por qué los escritores actuales, tanto los más jóvenes como los menos jóvenes, han decidido que les es más conveniente dedicarse a escribir y no meterse en política? ¿Por qué han decidido mantenerse en un segundo plano, como analistas o espectadores, sin bajar al barro, al contrario de lo que hicieran muchos de los escritores de antaño? ¿Por qué hoy lo más cercano que tenemos a un gran escritor en el Congreso es el diputado del PSOE por Burgos, Agustín Zamarrón, vivo retrato del insigne Valle-Inclán (con el permiso, claro, del presidente Pedro Sánchez, autor de un libro de memorias donde citaba erróneamente a fray Luis)? ¿Acaso el motivo es el bajo nivel general de la política, que solo deja sitio para políticos de perfil «profesional» (provenientes de la cantera de los partidos), cerrando el paso a cualquiera que intentara acceder a ella con un discurso más elaborado; acaso es el miedo a cerrarse las puertas a una parte del mercado (los lectores de signo contrario), algo intolerable en el actual estado de la industria del entretenimiento; o acaso es que los que antes se consideraban con el deber moral de poner su pluma y su retórica al servicio no solo de una causa, sino de un partido, han decidido que su lugar en la sociedad debe ser otro, sin que medie otra razón de peso que el simple cambio de las sociedades y los tiempos?
Yo, la verdad, desconozco la respuesta. Pero no me resisto a remitirme a la célebre cita de Machado (normalmente transcrita con errores) con que su heterónimo Juan de Mairena aleccionaba a sus alumnos: “Vosotros debéis hacer política, aunque otra cosa os digan los que pretenden hacerla sin vosotros, y naturalmente, contra vosotros”.
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