BLOC CULTURAL,

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viernes, 24 de julio de 2020

Domingo -26- Julio - LIARLA PARDO - Javiera Mena ,. / ESPAÑOLES POR EL MUNDO - Capadocia y Pamukkale,. / Escala humana - La Salvaora ,. ,.Miercoles -22- Julio,. / LA MAQUINA DE ESCRIBIR - Esta noche, 'En primera línea - El país de las gestorías,.

TITULO: Domingo -26- julio-  LIARLA PARDO   -  Javiera Mena  ,.  

El domingo -26- Julio - a las 18:00 por La Sexta, foto,.

 

Javiera Mena: "Madrid me gusta porque puedo andar sola por la calle de noche",.



Javiera Mena. Santiago de Chile, 1983. Cantante. Podríamos explicarla como una especie de Mina, moderna y latinoamericana, aunque desde hace unos años, vive en Madrid. Su última canción, Flashback es el presagio de un nuevo disco.
Si le digo que a mi hija le aburre mi música y que a mí también me cuesta conectar con la de ella, pero que a veces ponemos canciones suyas y funcionan muy bien...
Ay, me hace ilusión oírlo. Digamos que mi público está entre los 20 y 40 pero últimamente empezaba a ver niños en los conciertos... Empiezo a sospechar que pasa eso, que son los hijos de mi público.
¿Qué música se escuchaba en casa de sus padres?
Mi padre escuchaba pop en inglés de los 70: Bee Gees, Electric Light Orchestra, cosas así. Mi madre estaba en la música romántica de Ana Gabriel, Camilo Sexto... Y mi abuelo era el más melómano, el que tenía una colección enorme de música clásica y, al mismo tiempo, escuchaba Luz Casal, Ace of Base...
¿Su abuelo escuchaba Ace of Base?
Sí, quería estar a la última. Y yo iba con mi abuelo, claro. Mi rebeldía fue contra la música de mis padres... Además, tenía unos primos mayores que me ponían a escuchar a My Bloody Valentine cuando tenía 11 años.
¿Los ha ido a ver después del encierro?
No. Pero estuve con ellos cuando empezó la pandemia. Viajé de Chile a Madrid dos días antes de que cerraran la frontera. Fue un viaje increíble, como irreal: las caras de la gente, la sensación de estar en shock.
¿Cómo fue su relación con la música en los meses duros de cuarentena?
Fue el consuelo más grande que tenía. Tuve días de desconexión con la realidad, no querer hacer nada. Y luego volví a escuchar música. Se murió el hombre de Kraftwerk y empecé por ahí. Luego escuché Morrissey, cosas antiguas... Siempre estoy pendiente de lo nuevo, como una obsesión, pero en la pandemia busqué música antigua para refugiarme.
¿Hizo música?
Sí. Estoy bendecida como música: tengo en casa un buen micrófono, un buen equipo... Podría grabar un disco entero en casa. Pero durante el primer mes y medio no hice nada. Me dedicaba a ver las noticias, estaba aturdida. Luego fue como que desperté, me reencontré con la creatividad y pude avanzar mucho en el disco nuevo.
¿Leer las noticias le suele alimentar, darle ideas para escribir música?
Busco más cosas en los libros porque intento escribir sobre temas universales y más sencillos: el hedonismo, el amor... Pero también creo que la melancolía que está en mis canciones viene de esta sensación de apocalipsis del mundo contemporáneo.
Es verdad sus canciones parecen festivas pero luego esconden algo melancólico.
Yo soy así. También es una cosa bien chilena: valoras la vida pero sabes que la vida incluye grandes tragedias. Lo aceptas y vives bailando entre una cosa y la otra.
¿Cómo vivió los disturbios de Santiago?
Me hizo investigar en cómo es mi país. Todos teníamos la necesidad de remover cosas.
¿Y a qué conclusión llegó?
Chile es un país muy particular por cómo se fundó, por cómo lo percibe el mundo como un país desarrollado... Yo creo que si esto pasó en Santiago y no en Buenos Aires, por ejemplo, fue como una rebeldía contra esa idea de que Chile es un país próspero. Esa propaganda oficial del país rico hacía que la gente sintiera un enojo muy fuerte. Con la pandemia pasó igual. Nos vendieron que en Chile estábamos mejor preparados que nadie...
¿Cómo se imagina en unos años?
Como Laurie Anderson.
LA ÚLTIMA PREGUNTA: ¿Y lo de vivir en Madrid?
Es una idea que me apeteció desde la primera vez que vine. Luego, se fueron dando las cosas: resultó que mi pareja vive en Madrid y que mi música era bien recibida aquí. Me gusta que puedo andar sola por la calle de noche. Eso para una mujer latinoamericana es muy importante. 

TITULO:  ESPAÑOLES POR EL MUNDO - Capadocia y Pamukkale,.


 


Españoles en el mundo - Capadocia y Pamukkale,.



Españoles en el mundo - Capadocia y Pamukkale - RTVE.es

foto / ‘Españoles en el mundo’ viaja a la península de Anatolia para descubrir los increíbles paisajes naturales y el legado ancestral de Capadocia y Pamukkale, en Turquía. María Jesús, María, Estefanía, Raquel y Marta serán los guías de este periplo de la mano del reportero Gorka Vallejo.
Comenzará el viaje en la capital, Ankara, donde María Jesús, una ama de casa zamorana que lleva solo un año en Turquía, descubrirá a los espectadores la fascinante belleza geológica de Capadocia en globo. Y después, Estefanía, una profesora de español gaditana, y María, veterinaria de Terrassa, invitarán a disfrutar del llamado caribe turco en Antalya, a recorrer sus calles, la Puerta de Adriano, los restos del teatro romano de Hierápolis y las piscinas naturales de Pamukkale.
Sin abandonar las aguas del mar Egeo, Marta, una ama de casa barcelonesa que vive desde hace más de dos décadas en Turquía, mostrará las playas de Akyarlar y la Puerta de Myndos en Bodrum; y Raquel, una joven veterinaria madrileña mostrará la gastronomía, playas y aguas turquesas de Marmaris, en la provincia Muğla,.




TITULO: Escala humana - La Salvaora  ,.  , -22- Julio , Miercoles ,.
 
El miercoles -22- Julio  a las 21:00 por La 2, foto,.

La Salvaora | Cocina española en Valencia La Salvaora,.


Imagino que Angela Merkel no ve todas las series que ve Pablo Iglesias. Desde luego, no lo cuenta. Tampoco necesita verlas para darse cuenta de las cosas que pueden pasar o ya están pasando. Sánchez ha revelado a sus minion-ministros, haciendo de Manolo Caracol, que la canciller alemana fue la salvaora del acuerdo europeo. En 'El colapso', serie resultona (pero ya) con la que tanta tabarra dan algunos, el desastre se produce por la caída de los países del sur. Sin nombrarlos. Sin especificar cuáles son. Ahí estábamos en Bruselas estos días los Gargantúa y Pantagruel que somos España e Italia frente a los frugales, y Merkel defendiéndonos (en 2011 nos daba para el pelo) ahora que está de vuelta y le queda poco en el convento. También habrá criterio político más allá del oportunista. Sánchez e Iglesias elogian a Merkel como Felipe González hacía con Margaret Thatcher. Yo todos los domingos me voy a ver una película de Rosamunde Pilcher.



TÍTULO: LA MAQUINA DE ESCRIBIR - Esta noche, 'En primera línea  - El país de las gestorías,.


LA MAQUINA DE ESCRIBIR - Esta noche, 'En primera línea - El país de las gestorías , fotos,.


 Este miércoles - 22 - de julio, a las 22.45, Antena 3,.


El país de las gestorías,.


Trabajando en una gestoría de Badajoz en esta nueva normalidad. / HOY
Trabajando en una gestoría de Badajoz en esta nueva normalidad.

Los otros héroes. Los gestores y los abogados de los sindicatos sacan las castañas del fuego


Resultat d'imatges de la maquina escribirVoy a soltar una ocurrencia, así que no me hagan caso. Ahí va: la solución de Extremadura es eliminar las consejerías y sustituirlas por gestorías. Bueno, ya puestos, hagámoslo a lo grande: la solución de España es sustituir los ministerios por gestorías.
Recuerdo haber leído un libro escrito por diversos corresponsales extranjeros en España. Unos alucinaban con nuestras tradiciones brutales con animales, otros no entendían el ruido que arma en España el camión de la basura a una hora en la que todo el mundo está durmiendo. Pero lo que los unía a todos en un mismo diagnóstico eran las gestorías.
Concluían unánimemente que España es el país de las gestorías, un Estado donde o llevas los papeles al gestor o se eterniza su gestión. Y eso era antes del coronavirus, que aún ibas a las dependencias oficiales y te atendían. Ahora, desde que te teleatienden, o vas a la gestoría o te conviertes en un vegetal.
En Cáceres, cuando pretendías un papeleo complejo, te solían recomendar en las oficinas que fueras a una gestoría, algo impensable en otros países europeos, donde la burocracia es sencilla y los ciudadanos pueden tramitar sus documentos ellos solitos, sin chocar contra la administración ni ser víctimas del vuelva usted mañana.
Ahora ya es que ni te dicen lo de la gestoría, es que no te teledicen nada así que te vas directamente a ellas, que allí parece ser que no les afecta el coronavirus y están presentes, inasequibles al miedo, atendiendo en directo y gestionando al instante.
Por eso digo yo que si quitáramos las consejerías y las sustituyéramos por gestorías, todo iría mejor. No sería un cambio drástico, sino poco a poco, con prejubilaciones y eso. Es una solución de derechas claro, pero es la que tenemos ahora para muchas cuestiones, aunque disimulando: gestión pública nominalmente de izquierdas, pero a la hora de la verdad, gestorías privadas.
Voy con otra observación que también puede parecer una ocurrencia. Les hablo de los sindicatos. Antes de seguir, ya veo los colmillos brillando para asestarles dentelladas y acabar con ellos, pero no, los sindicatos no hay que sustituirlos por oficinas gestoras porque en gran manera ya se han convertido ellos solitos en gestorías.
Si se dieran una vuelta estos días por los sindicatos, se percatarían del trabajo que tienen sus abogados. Las colas ante los despachos son tremendas, los letrados no paran de atender a afiliados con problemas y como los trabajadores no encuentran a quienes les tienen que tramitar papeles y solicitudes, acuden a los abogados sindicales, tan denostados ellos, pero tan útiles en estos tiempos de ERTE, ERE, despidos y subsidios.
Mientras unos 'teleponenaparir' a los abogados sindicales, ellos sacan las castañas del fuego a quienes no las 'telesacan', que coinciden demasiadas veces con quienes los 'teleponenaparir'. Y los abogados, como los gestores, están en el despacho, frente a frente con el trabajador agobiado y angustiado, pero deben de tener algún anticuerpo especial que impide que se contagien. ¡Qué país de gestorías y de abogados de sindicatos solucionando problemas, atendiendo a los desesperados y dando la cara frente al virus y sus estragos!
Estos héroes cotidianos, que no han dejado de trabajar desde Semana Santa y están facilitando las gestiones y orientando a los trabajadores a destajo, no son alabados ni condecorados porque sería una manera de reconocer que son imprescindibles. Puede cerrar España, que mientras abran las gestorías y los despachos de los abogados de los sindicatos, todo seguirá funcionando.


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