TITULO: Cartas en el tiempo - La dama pálida, ante los ojos de Mario Peloche ,.
Cartas en el tiempo ,.
Miércoles -19- Abril a las 20:00 en La 2 / foto.
La dama pálida, ante los ojos de Mario Peloche,.
Conozco que te mueve el dolor y la sangre, pero hasta ahora has sido niña amedrentada que se contentaba con impartir castigos. Yo te convertiré en mujer, en sacerdotisa, en diosa. Haré que viertas sangre en virtud de la sangre, y que des muerte en virtud de la muerte».
La dama pálida, cuarta novela del autor gaditano, aunque extremeño de corazón, Mario Peloche, constituye «el relato de una vida salvaje, auténtica, apasionada, sensible y cruel hasta el paroxismo». Una obra gótica, ambientada en el siglo XVI, que recrea la existencia de la aristócrata húngara Erzsébet Báthory de Ecsed, la poderosa dama, a quien la Historia denominó «la condesa sangrienta», por haber cometido centenares de asesinatos de mujeres, y a la que la justicia condenó a ser emparedada en el interior de sus aposentos, hasta el día de su muerte. Dominada por tendencias vampíricas, la novela rememora así, con extrema frialdad y belleza, la necesidad de plenitud e inmortalidad de esta melancólica prisionera, que otorgaba propiedades mágicas al rojo fluido de sus doncellas.
Desde el encierro en el que se halla, todo en la novela resulta oscuro y sádico, incluso los aspectos más inquietantes de su culta personalidad, que emergen ya en sus primeros años de vida: «A mis primos les fascinaba ver cómo el animal se debatía, cómo la mano experta del matachín empuñaba un enorme cuchillo y lo movía tan rápido que la vista no podía seguirlo; yo, sin embargo, me detenía en... ver morir. No puedo definirlo de una manera mejor. Me deleitaba en cómo el silencio y la quietud se adueñaban del animal, en cómo la vida escapaba de él en forma de chorros granates que se iban atenuando hasta quedar reducidos a hilos».
A través del retrato poético de Mario Peloche, nos acercamos a los recuerdos de un personaje voluble, atrapado en un animal monstruoso, cuya transgresión se verá acrecentada en su juventud, tras su matrimonio con el conde Ferenc Nádasdy: «Él me contaba cómo habían quemado a fuego lento a un visir del ejército del sultán Amurat III, o cómo habían tenido que empalar a toda una guarnición rebelde que se había negado a rendirse». Con la muerte de su esposo, el Caballero Negro, en 1604, sus actos de crueldad se multiplicaron, llegando a tener como víctimas, en su castillo de Cachtice, a jóvenes de la nobleza, hecho que motivó su arresto, en 1610, por orden del monarca Matías II.
El juicio fue rápido y contundente. Varios de sus sirvientes fueron interrogados bajo tortura, sentenciados por brujería, decapitados o quemados vivos. Unos meses más tarde, la condesa fue encerrada en su alcoba, que quedó sellada con solo pequeñas aberturas para que entrara el aire y pudiera recibir alimentos. Murió tres años después, el 21 de agosto de 1614. Sus restos fueron trasladaron a Ecsed, su lugar de nacimiento, donde la muerte dio descanso a la mujer que buscó la belleza eterna.
- Mario, ¿escribir sobre la condesa sangrienta ha sido una forma de liberarla de su encierro? ¿Qué ha supuesto para ti acercarte a esta dama?
Ha sido una forma de humanizarla, como me comentaron en una reseña, de acercar su faceta más personal al lector −como madre, como amante, como mujer o como cautiva− y de conocer las motivaciones que la impulsaron a cometer los actos tan atroces que llevó a cabo. Siempre con el afán de comprenderla, que no de justificarla, por supuesto.
Como autor, adentrarme en este personaje ha supuesto para mí un enorme desafío: por ser mujer, por ubicarla de manera coherente en la época en la que se movió y por encontrarle una voz propia, personal, que no solo no desentonara, sino que fuera el hilo conductor de la narración. Por otro lado, es imposible para un escritor involucrarse con un personaje y no verse arrastrado por él o no dejar un pedazo de su alma en el camino. Profundizar en la psique de Erzsébet es asomarse al abismo de Nietzsche; es fácil internarse en la galería de ecos y espejos de su mente, como defino en la novela su mente fragmentada, pero muy difícil desasirse, porque en el abismo siempre hay algo tan terrorífico como fascinante.
- Valentine Penrose, Alejandra Pizarnik, Julio Cortázar… son solo alguno de los autores que se han sentido fascinados por la condesa sangrienta. ¿Qué has aprendido de todos ellos y en qué has querido diferenciarte?
Valentin Penrose y Alejandra Pizarnik se centraron en sus respectivas obras, La condesa sangrienta, en la belleza visceral y convulsa del personaje, y utilizaron la poesía −más concretamente, la prosa poética, en el primer caso−, para acercarse a ella. Sin embargo, por lo que respecta a Cortázar, nuestro personaje aparece en obras como en 62. Modelo para armar, donde mostró su admiración por la novela gótica y, especialmente, por los relatos fantásticos, centrados en el tema del vampirismo, de los que fue un gran aficionado en su juventud.
Es difícil, por tanto, ser original cuando grandes autores ya lo han hecho. Personalmente, al igual que Penrose y Pizarnik, utilizo la prosa poética para iluminar los lugares más sombríos de su mente y los episodios más luctuosos de su vida, porque, como reitero en mis presentaciones, utilizando las palabras de otro poeta: «hay lugares en los que solo se puede entrar con la poesía por delante». Además, al igual que Cortázar, homenajeo la novela gótica clásica, esa que es una prolongación del movimiento romántico y que busca poner el énfasis en los sentimientos que nos llevan más allá de nosotros mismos, trascendiendo a las propias circunstancias y a sus autores más afamados, referentes en mis lecturas, como Mary Shelley, Stoker, Poe o Le Fanu, por citar solo algunos.
No obstante, en un aspecto creo que sí he sido original. He tratado de dar voz a Erzsébet, de que fuera ella, al contrario que en el resto de las obras indicadas, que se basan en su vida, la que rememorara su existencia, de tal forma que así el lector se viera sumergido, desde el primer momento, en esa psique especular para desentrañar, como Ariadna, ese hilo de voz que le permitiera recorrer el dédalo de su memoria.
- La crueldad y la locura, lo legendario y lo histórico se entremezclan en la figura de Erzsébet Báthory. ¿Todavía hoy resulta difícil explicar dónde acaba el mito y dónde empieza el personaje real?
Resulta difícil porque, aunque existe abundante documentación histórica acerca de su linaje, apenas existen cartas de su puño y letra y, desde luego, se conservan pocos documentos directamente relacionados con su vida, ya que muchos se han perdido con el transcurrir de los siglos, como el famoso diario donde se dice que anotó el nombre y las características principales de más de un centenar de damas desaparecidas. Todo esto hace que, junto a las leyendas enhebradas con el tiempo, primero literarias y luego cinematográficas, su figura se haya asociado al vampirismo. De hecho, esa escena que todos tenemos en la cabeza de la condesa, sumergiéndose en una bañera llena de sangre, es un añadido, realizado un siglo posterior a su muerte, que no aparece en las actas procesales que menciono en el prólogo. O que su apellido, Báthory, que viene de bátor, con el significado de «valiente», fuese un regalo otorgado a un antecesor de Erzsébet, que habría derrotado a un dragón que asolaba la región, obteniendo así no solo el apellido para su estirpe, sino también los terrenos adyacentes y tres colmillos, que acompañarían, desde entonces, al escudo familiar… Como se puede ver, circulan leyendas de todo tipo.
Personalmente, me he querido alejar de estas divagaciones y centrarme en los hechos demostrados: la historia y la situación política de Europa, la del pueblo húngaro, con su cultura de raíces orientales, la historia personal y familiar de Erzsébet, su matrimonio, sus actos probados de sadismo… y dejar, como recurso novelístico, esa voz suya, con la que trato de columbrar cuáles podían ser sus pensamientos y qué pudo ella encontrar dentro de sí misma mediante la contemplación permanente de su espejo.
- Clive Leatherdale, una de las máximas autoridades de la obra de Stoker, en su libro Historia de Drácula, publicado en España, en 2019, por la editorial Aroa, afirma que Erzsébet «fue la practicante del vampirismo en vida más célebre y autentificada de la que hay constancia». ¿Drácula fue mujer?
Sí. Creo firmemente que Drácula fue ella. Realmente, Erzsébet Báthory utilizó la sangre, pero no al modo vampírico de folletín, sino siguiendo prácticas muy antiguas, que ya habían llevado a cabo los antecesores de los magiares, en la antigua Anatolia, en cultos relacionados con la diosa madre, y que se transmitieron a Grecia, a sus ritos dionisíacos e incluso al cristianismo, con la transubstanciación. Estas prácticas, de «magia roja», utilizaban la sangre de un modo alquímico, en pociones o ungüentos, como elemento asociado a la purificación y la regeneración para el mantenimiento de la vida. Cuando dichos comportamientos se tergiversaron y exageraron, Erzsébet pasó a ser un personaje-vampiro rodeado de leyenda, permaneciendo, en el imaginario colectivo, como fuente de inspiración literaria.
Su fama alcanzó su punto más álgido durante los siglos XVIII y XIX, precisamente cuando el género gótico se desgajó del romántico. Veinticinco años antes de que Bram Stoker editara su libro Drácula, Sheridan Le Fanu, en 1871, publicó Carmilla, una novela protagonizada por una dama ávida de sangre, perteneciente a la nobleza, muy pálida y con ciertas querencias lésbicas. Sin duda, una copia palmaria de Erzsébet, que evidenciaría el hecho de que Stoker conoció bien la novela. Autores como Javier García Sánchez, en su magnífica y recomendable obra Ella, Drácula, ya postula que Erzsébet fue un icono, a partir del cual se desarrolló el vampirismo más clásico y se convirtió en un modelo para futuros arquetipos.
- También el acto de lectura tiene algo de posesión vampírica. ¿Podríamos decir que el gran vampiro es el lenguaje, en la medida en la que una no sale indemne cuando se interna en estos caminos de la perversión? ¿Experimenta algo similar el autor?
Pienso que sí. En una respuesta anterior hablé del vértigo, de la fascinación y del inevitable miedo, que supone enfrentarse al abismo. En este caso, el abismo es ella y, más concretamente, su psique torturada y fragmentada. La condesa es un personaje tan alejado de todo y de todos, que imaginar cómo podía pensar una mujer así, cómo y de qué forma podían sus recuerdos aparecer en su mente, en los más de cuatro años, que pasó emparedada en su habitación, implica aceptar que vas a tener que modificar tus propias pautas de pensamiento, que vas a tener que pensar en cosas terribles e innombrables, que tus palabras van a dejar de pertenecerte durante el tiempo que le dediques a la novela y que, incluso cuando esté terminada, nadie puede asegurarte que vas a recuperar tu propia voz. Porque el lector puede cerrar un libro, olvidar un personaje y pasar a otra cosa, pero esto no funciona así para el autor. El escritor es deudor, a la vez que esclavo del personaje, sobre todo si este es tan intenso, tan fascinante y tan diferente como lo es —como lo fue— Erzsébet.
- La condesa sufrió el eterno conflicto entre el tiempo y la infinitud, un problema que engendra una tristeza sin consuelo, una caracterización de la melancolía, que más allá de un diagnóstico psicopatológico, ¿crees que nos invita a reflexionar acerca de las condiciones sociales que provocaron o fomentaron su abatimiento?
Nos invita, por lo menos, a contemplar, de una manera diferente, ciertos males asumidos en la sociedad. Ella nunca fue diagnosticada como enferma mental −lejos quedan todavía los tiempos del Psicoanálisis−, pero no es arriesgado pensar que pudiera sufrir algún tipo de sociopatía. O, con respecto a la melancolía que comentáis, esta era considerada en la época de Erzsébet como una enfermedad, una bilis negra que invadía tu cuerpo, te hacía debilitar y languidecer. Algo parecido sucedía con la epilepsia, denominada morbus sacer o enfermedad sagrada. De ambas padeció Erzsébet. Creo que en la primera tuvo que ver, aparte de esa incipiente sociopatía, la indolencia y el exceso de ocio que un noble tenía en aquellos momentos, dado los pocos quehaceres, que su vida acomodada demandaba o, al menos, como comento en la novela, hasta que el fallecimiento de su esposo la obligó a tomar consciencia de todas las obligaciones que su cargo requería.
- ¿«¡Todo es espejo!», como nos dice Octavio Paz?
No sé si todo es espejo o si todos somos espejo, pero tengo la certeza de que ella sí que era espejo. Las crónicas de la época afirman que Erzsébet mandó construir un espejo −según se dice, siguiendo las directrices que había recibido en un sueño−, un espejo de pie, con unos asideros de madera, donde poder descansar los brazos. Allí pasaba las horas, contemplando, contemplándose. Entiendo que, hora tras hora, día tras día, iría perdiendo la noción de la realidad, dado que estos objetos siempre se han relacionado con la disolución del yo, con la pérdida de identidad, hasta que (y aquí novelo) se produciría ese escindirse, que ella afirmaba sentir en ocasiones, aquellas en las que, en sus sótanos, dejaba de ser ella, y se volvía «la otra que hay en mí».
- Muchos historiadores sostienen que, además de su culpabilidad, existieron diferentes motivaciones políticas, detrás del juicio de Erzsébet Báthory. Concretamente, en la década de 1990, especialistas de diversos campos dibujaron la idea de que la condesa, víctima de una conspiración, fue una poderosa viuda en un mundo de hombres y que su influencia amenazó el poder de la corona húngara. Eso sin olvidar que tanto la condesa, como su familia, eran protestantes, frente a un país donde los Habsburgo, férreos católicos, trataban de consolidar su hegemonía. ¿Qué opinas de esta «conjura machista», a la que han aludido autores como Irma Szadecsky-Kardoss, Tony Thorne o Kimberly L. Craft, en los últimos años?
Opino y pergeño, a grandes rasgos en la novela, que hubo un complot político, alrededor de Erzsébet. En primer lugar, por esa dicotomía religiosa, que comentáis entre los reyes de la casa Habsburgo, católicos y considerados extranjeros en Hungría, y las familias nobles húngaras, protestantes, (el protestantismo además fue introducido en el país por un tío materno de Erzsébtet), que provocó siempre roces. Pero también porque el rey Matías de Habsburgo, cansado del poder, que esas rancias casas nobles húngaras tenían en el país, vislumbró, tras la muerte del esposo de Erzsébet, Ferenc Nádasdy, la posibilidad de quedarse con todo su patrimonio y el de su familia, para lo cual necesitaba que las acusaciones que se vertieron sobre la condesa fueran ciertas, para que sus hijos no pudieran reclamar su legado. Es decir, siendo conscientes de que Erzsébet cometió hechos atroces, quizás se generó una leyenda negra a su alrededor, que benefició a los intereses de la propia corona.
- Al final, Eros y Tánatos quedan dramáticamente unidos en esta mujer, para la que matar al otro, en el fondo, significa morir. ¿Se convierte también ella en la viva imagen de la Muerte?
Sostengo que Erzsébet se sentía un ser discontinuo, aislado, y que para ella la muerte tenía un sentido de continuidad. Creo que Erzsébet encontró en la muerte la disolución del yo y en la conexión con otros individuos −una conexión enfermiza y sociopática, claro, de alguien que no era capaz de sentir empatía−, en ese instante en el que los despojaba de vida, se encontraba a sí misma, se sentía ser. Pero, por descontado, este era un sentimiento efímero, que ella trató de retener y perpetuar en la concatenación de muertes, convirtiéndose así, como afirmo en la novela, «en la sacerdotisa y diosa de su propio culto sanguíneo».
- ¿Consideras, como ha señalado Alejandra Pizarnik, en La condesa sangrienta, que «Ella es una prueba más de que la libertad absoluta de la criatura humana es horrible»?
Sí. Utilizo esa cita de Pizarnik porque coincido con ella. La propia Pizarnik, tan atormentada como el propio personaje, creía en esta máxima. Alejandra acabó suicidándose poco después de escribir esto, quizá porque reconoció en sí misma una idéntica soledad, una melancolía similar y un abandono semejante, en la misma cárcel, la propia, la íntima, la personal, de la que no hay escapatoria posible, salvo la última. Y, porque en el caso del personaje de la novela, cuando ella pudo «ser» enteramente −momento que coincide con la muerte de su esposo, en el que tiene que hacerse fuerte, «revestirse de espinas», como digo en la novela, y defender sus posesiones y su legado ante las presiones externas, tanto políticas, por parte del rey Matías II como las de su propia suegra, Orsolya−, rompió su crisálida y emergió por fin la criatura salvaje que, en su interior, siempre había sido.
TITULO: Las rutas de Ambrosio - Canarias marítimo ,.
El sabado -15- Abril a las 19:10 por La 2, foto,.
Canarias marítimo,.
El chef Gonzalo D'Ambrosio comienza una ruta por las islas Canarias para descubrir cómo sus habitantes aprovechan la riqueza de sus aguas para desarrollar una gastronomía saludable y deliciosa. Comenzará pescando peto en La Gomera y atún en Tenerife antes de su última parada en las salinas de Tenefé.
TITULO: LAS RUTAS DE VERONICA - Ruta en autocaravana por los pueblos blancos de andalucía ,.
El sabado-15- Abril , a las 18:10 por La 2, foto,.
Ruta en autocaravana por los pueblos blancos de andalucía,.
Destinos para disfrutar de un puente de ensueño, entre casitas blancas con flores de colores, naturaleza y laberintos de callejuelas
El último mes de cada año llega siempre con muchos rituales. Es el momento de resumir mentalmente y valorar todos los sucesos del año, proponer nuevos retos y aprovechar las últimas semanas para cumplir los objetivos ideados meses atrás.
Una de las propuesta para los días de puente y festivos que tenemos por delante es la de recorrer en autocaravana los 5 pueblos blancos más bonitos de Andalucía.
La famosa Ruta de los Pueblos Blancos recorre diferentes rincones de Málaga y Cádiz, cada cual más especial. Según explican desde Yescapa, estos destinos son una buena alternativa para estas fechas gracias a su tradición de dulces navideños, como los famosos alfajores o el pan de Cádiz gaditanos o los típicos pestiños malagueños. Y, cómo no, en muchos de ellos podrás encontrar mercadillos navideños en los que es posible encontrar detalles y regalos que harán estos días más especiales.
Empezando la ruta por Cádiz, Olvera es la primera parada obligatoria. Su casco urbano ha sido declarado Conjunto Histórico-Artístico y es sin duda uno de los pueblos más bonitos y típicos de Andalucía. Con casas encaladas en una ladera y unas vistas naturales dignas de cuento, este destino no te dejará indiferente. Más allá del encanto de sus calles, no puedes dejar de visitar la Iglesia Nuestra Señora de la Encarnación, el Castillo Árabe y el Barrio de la Villa.
Setenil de las Bodegas es uno de los destinos rurales por excelencia del país que no podía faltar en esta ruta. Sus casas destacan no solo por el color que las hace formar parte de esta lista, sino por su localización: están construidas bajo un saliente de roca. Pasear por la Calle Cuevas del Sol y la Calle Cuevas de la Sombra hará de tu ruta en autocaravana algo único. Además, este pueblo es bonito hasta desde la carretera. Haz una parada en el camino, observa desde lejos y disfruta de la vista.
Arcos de la Frontera no solo es famoso por sus palacios medievales, su barrio judío o su Callejón de las Monjas, con preciosas iglesias; sino también por su gastronomía. Este pueblecito de Cádiz triunfa por su buñuelada navideña, ya que, cuando se acercan estas fechas, algunas cafeterías sirven buñuelos de forma gratuita.
La cuarta parada de esta ruta cruza a la provincia de Málaga. Ronda, también conocida como la ciudad soñada de Andalucía, se encuentra en Málaga y es la tercera ciudad más visitada de la comunidad. Aquí, podrás disfrutar de los tres barrios en los que se divide el pueblo: El Mercadillo, La Ciudad y San Francisco. Y no puedes acabar el día sin visitar algunos de sus rincones más emblemáticos, como el Puente Nuevo -de 98 metros de altura-, el Palacio de Mondragón, la Puerta de Almocábar o los Baños Árabes.
Para acabar la ruta, el quinto día del puente puedes pasarlo en Casares, un pueblo digno de postal. Con las casitas blancas típicas de este itinerario, el destino destaca por su increíble escenario de valles y colinas. Una excursión obligatoria de esta zona malagueña llena de historia es su castillo de origen árabe, situado en la parte más alta del pueblo.
TITULO: ¡ Qué grande es el cine ! - ME RESBALA - AQUEMARROPA - ¡ QUE TIEMPO TAN FELIZ ! - EL HORMIGUERO VIERNES - 21 - Abril - Jesús Cintora ,.
¡Qué grande es el cine! fue un programa de cine dirigido por José Luis Garci y emitido por Televisión Española por su cadena La 2.
El
programa comenzaba con una presentacLa actriz Juana Acostaión de la
película que se emitía esa noche, posteriormente esta película se emitía
y acababa con una tertulia entre Garci y los invitados del día sobre
ella.1 El programa comenzó a llevarse a cabo en enero de 1995 y comenzó sus emisiones el 13 de febrero del mismo año., etc.
¡ Qué grande es el cine ! - ME RESBALA - AQUEMARROPA - ¡ QUE TIEMPO TAN FELIZ ! - EL HORMIGUERO VIERNES - 21- Abril - Jesús Cintora . , fotos .
Jesús Cintora,.
El periodista Jesús Cintora en la presentación del libro en la capital leonesa.
Jesús Cintora hablará de «poder y periodismo» y presentará su libro 'No quieren que lo sepas' en Villablino,.
El periodista Jesús Cintora presentará en el Casino de Laciana su libro 'No quieren que lo sepas' este sábado, 8 de abril, a las 18:00 horas.
El periodista Jesús Cintora presentará en Villablino su libro «No quieren que lo sepas» el 8 de abril, sábado, a las 18:00 horas. Cintora impartirá una conferencia sobre «Poder y Periodismo» abierta a preguntas del público en el Casino de Laciana.
El autor está haciendo una gira por España con actos que dan pie al debate con la ciudadanía. Los asistentes muestran curiosidad, sobre todo, por lo que ocurre por detrás en el mundo de la televisión, del periodismo en general, de la política o de la economía. El libro alcanza la sexta edición y figura entre los más vendidos en la categoría de no ficción desde que salió a la venta.
25 años de experiencia
Jesús Cintora acumula más de 25 años de experiencia presentando programas en el gremio, tanto en la televisión como en la radio. Es uno de los referentes del periodismo político y social en España.
Ha presentado espacios como «Las cosas claras», en TVE; «Las mañanas de Cuatro», en Mediaset; «Carretera y manta», en La Sexta; diversos programas en la Cadena SER, donde trabajó con Iñaki Gabilondo…
Verdadero reparto de poder
En «No quieren que lo sepas», Cintora investiga, opina y muestra un mapa «del verdadero reparto de poder en España, de los tapones que frenan los avances y hace una apuesta por la regeneración».
El autor parte de una bella narración de su infancia a finales de los 70 y comienzos de los 80. Hijo de una ama de casa y de un ganadero de pueblo, Jesús Cintora se adentra así en sus inicios en el periodismo y las trabas que se ha ido encontrando para desempeñar la profesión con no pocos palos en las ruedas.
TITULO: ¿Dónde estabas entonces? - Dior, Dalí y Gala, una estrecha relación entre el arte y la moda , Martes - 18- Abril,.
Este martes - 18 - Abril ,. , a las 22.30, La Sexta emite una nueva entrega de la tercera temporada de '¿Dónde estabas entonces?', presentada por Ana Pastor , foto,.
Dior, Dalí y Gala, una estrecha relación entre el arte y la moda,.
La relación que mantuvo el diseñador Christian Dior con el pintor Salvador Dalí y su esposa Gala ha inspirado una muestra que se inaugurará este sábado en el Castillo de Púbol, uno de los museos que integran el triángulo daliniano, y que profundiza en los ámbitos del arte y la moda,.
La directora de los museos dalinianos, Montse Aguer, ha presentado la muestra, titulada 'Gala/Dalí/Dior. De arte y moda', y ha explicado los momentos destacados de la relación entre diseñador y pintor, que comienzan en los años 30 en la capital francesa.
La exposición destaca de sus dos principales protagonistas que ambos fueron referentes y expresión del siglo XX, caracterizados por su rigor técnico, obsesión creativa, voluntad de trascender y sentido de puesta en escena.
Las comisarias Bea Crespo y Clara Silvestre, integrantes del Centro de Estudios Dalinianos, han seleccionado obras del genio surrealista y diseños del francés con materiales procedentes del fondo de la Fundación Dalí y de la compañía Christian Dior Couture, que han iniciado una intensa colaboración.
Las estrellas de la muestra son tres modelos de la Casa Dior, que pertenecieron a Gala, dos de los cuales nunca se habían expuesto en Púbol.
El reino de la moda
'Gala/Dalí/Dior. De arte y moda' se divide en tres apartados, el primero denominado 'La pasión por el arte', que relata esos primeros contactos en París en la década de los treinta, cuando el pintor trata de labrarse un nombre en la capital francesa.
Salvador Dalí expuso sus creaciones en una pequeña galería que contaba con Christian Dior como socio y, en Púbol, se exhiben pinturas, dibujos y objetos de aquella época, entre los que destaca el óleo 'Comienzo automático de un retrato de Gala'.
'El reino de la moda' es el título del segundo ámbito y pone el foco en el segundo momento destacado de la relación entre Dalí y Dior, que tuvo lugar en Estados Unidos en 1947.
Montse Aguer ha puntualizado que el artista ampurdanés había presentado aquel año la publicación 'Dalí News' y que se encontraba en plena época «místico-núclear», mientras que el diseñador francés había puesto en marcha su primera colección, bautizada como New Look.
«Los dos se encuentran desde la tradición, pero para transgredirla», ha subrayado Aguer, quien ha recordado que Gala se interesó inmediatamente por las creaciones de Christian Dior, que lució en varios actos e inauguraciones junto a Salvador Dalí.
El tercer apartado, «El baile del siglo«, lleva al visitante a la noche del prestigioso baile de Beistegui en Venecia de 1951, cuando Dalí y Dior volvieron a coincidir.
El extravagante multimillonario Carlos de Beistegui y de Yturbe reunió a ambos junto a numerosas personalidades en el Palazzo Labia y todos lucieron disfraces entre los que sobresalían unos gigantes concebidos por el pintor y el diseñador con la mediación de Gala y la intervención de Pierre Cardin.
Un audiovisual ilustra la exposición, que tiene lugar por primera vez en la antigua azotea del Castillo de Púbol, ya que hasta ahora se utilizaba la cocina para este tipo de propuestas.
Montse Aguer ha detallado que, aunque estos tres momentos son los más importantes en la relación entre Salvador Dalí y Christian Dior, ambos siguieron años en contacto y que, a modo de ejemplo, el restaurante Los Caracoles de Barcelona cuenta con una foto de 1956 en la que se ve a ambos compartiendo mesa.
'Gala/Dalí/Dior. De arte y moda' se inaugura este sábado y permanecerá abierta al público hasta el 6 de enero de 2021.
TITULO: Informe Robinson - El XXV 24 Fútbol Sala de La Virgen se celebrará los días 13 y 14 de mayo ,.
El XXV 24 Fútbol Sala de La Virgen se celebrará los días 13 y 14 de mayo ,.
El objetivo que se marcó este torneo desde sus inicios es el de fomentar el deporte popular,.
foto / La Concejalía de Juventud y Deportes de Valverde de la Virgen presenta el XXV 24 horas de Fútbol Sala que se jugará los días 13 y 14 de mayo en el Pabellón Municipal de La Virgen del Camino.
El objetivo que se marcó este torneo desde sus inicios es el de fomentar el deporte popular, convirtiéndose pronto en referencia dentro de todo el fútbol sala de la provincia de León.
Inscripciones abiertas hasta el 11 de mayo
Las reservas se podrán hacer efectivas vía teléfono en el número 987 30 22 13 o a través del correo electrónico lavirgendelcamino@gmail.com. Una vez confirmada la plaza será necesario enviar el listado de participantes con nombre, apellidos y número de DNI, así como el justificante de ingreso bancario.
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