TITULO:España Directo - El oso pardo gana terreno,.
El oso pardo gana terreno,.
Ejemplares de entre 3 y 5 años buscan ampliar su territorio allí donde el hombre ha emigrado y empieza la España vaciada. Avanzan hacia Portugal y han cruzado ya la barrera que dibuja la autovía que se adentra en la Meseta desde Santander. En veinte años han protagonizado nueve ataques,.
Ocurrió hace una semana, poco antes de que la noche se echara sobre los montes de Cangas de Narcea, salpicados de prados con sebes, matorrales y avellanos; donde buscan refugio alcaudones, abubillas y camachuelos. Ni siquiera los más viejos del lugar recordaban cuándo había sido la última vez. Carmen Suárez -75 años, vecina de la remota aldea de Sonande- daba su habitual paseo después de cenar cuando, alzándose sobre sus cuartos traseros, una presencia descomunal le salió al paso en el camino de Sorrodiles; el mismo peligro contra el que de pequeña ya le advertían sus padres cada vez que le enviaban a guardar las ovejas.
Nadie sabe lo que le pasó por la cabeza al oso, que al parecer llegó hasta allí siguiendo el rastro de una hembra en celo; pero es fácil imaginar el susto de Carmen, sin más defensa que una frágil vara contra ese zarpazo que temía y que no tardó en llegar. La mujer acabó en el suelo, hecha un gurruño de dolor y sangre: la cadera rota, igual que la nariz, la dentadura... «Tiene los ojos como mapas», detallaba su yerno, horas después de que las ambulancia rasgara con su sirena la quietud del valle y de que la mujer fuera evacuada al hospital. Aterrorizada, pero viva.
El oso pardo gana terreno en el norte de España. Lo hace en buena medida al estar protegido por las leyes, sí, pero también al no hallar la competencia directa de los humanos, cada vez menos interesados en el aprovechamiento del medio rural. Es la España vaciada, esa que nunca queda vacía del todo. La fauna y la flora la retoman, siguiendo las imperturbables coordenadas del ciclo de la vida.
«No hay osos donde no los haya habido antes -sostiene el presidente de la Fundación Oso Pardo, Guillermo Palomero-. En las zonas donde se expande este plantígrado hay tradición de levantar cortines y alvarizas (construcciones circulares de piedra para proteger las colmenas de los ataques) antiguos, y eso evidencia que el animal ya estaba allí hace siglos, obligando al hombre a agudizar el ingenio en ese duelo constante por proteger sus alimentos».
Palomero y su equipo de colaboradores han constatado tanto la recuperación sostenida de las poblaciones asturianas de oso pardo como la expansión de la especie hacia el sur, «por O Courel, al este de Lugo y Ourense, siguiendo la sierra de La Cabrera entre León y Zamora. Incluso hemos visto que algún ejemplar ha entrado ya en los montes de Portugal cercanos a Zamora».
Por el otro lado, al este de Asturias, las poblaciones oseras también se van adentrando hacia sus antiguos dominios. Hay especímenes que han superado la A-67, la autovía que une Santander con la Meseta. «Comienzan a verse por el monte Hijedo (zona oriental de la montaña cántabra y norte de Burgos), e incluso hay indicios de que pueden haber llegado al País Vasco, aunque eso lo tenemos menos estudiado». De momento, lo que preocupa a la fundación es averiguar cómo y por dónde han superado la barrera que supone la A-67. «Creemos que por los pasos inferiores, pero hay que comprobar que no invadan la caja de la autopista, porque eso generaría situaciones de alto riesgo», dicen.
Los 'embajadores'
El paso del oso al este de la A-67 se produce sin que por el momento se hayan asentado poblaciones de esta especie en la zona que delimita la A-66, la otra gran barrera norte-sur. «Todavía hay mucho espacio en Asturias para que el oso crezca en número. Todo el corredor central, por ejemplo, carece de poblaciones consolidadas», explica Palomero. Eso no significa que no se produzcan avistamientos, y son muchos los vecinos de Lena, Aller y Caso que consideran que en breve habrá allí osas «residentes».
Los que más se mueven son los machos, y en especial los jóvenes. Los ejemplares de entre 3 y 5 años son lo que los científicos califican 'osos embajadores', «que se adentran en terrenos nuevos porque los adultos les echan de los suyos de origen». Son estos los que avanzan, los que van recuperando territorios de monte y valles altos, mientras que las hembras reproductoras tienden a quedarse en el valle en el que nacieron o a lo sumo moverse al colindante.
Son ellas, precisamente, la causa de que en época de celo haya grandes concentraciones de machos. Lo ratifica Vincenzo Penteriani, investigador del CSIC y de la Unidad Mixta de Investigación en Biodiversidad de la Universidad de Oviedo. «En primavera, dos o cuatro hembras en celo en un valle pueden atraer a diez o quince machos que luego se irán a sus zonas habituales, a cincuenta o hasta a cien kilómetros de distancia».
Es entonces cuando los osos pierden parte de su desconfianza habitual y se aventuran más de lo que tienen por costumbre. Lo demuestra el hecho de que cinco de los nueve ataques registrados en España desde 1999 tuvieron lugar en primavera: cuatro de ellos a causa de un encuentro súbito con un macho, y otro al cruzarse con una hembra que no estaba en celo, pero protegía a sus esbardos -crías-, motivo que está detrás del 47% de las acometidas contra humanos en todo el mundo.
Una de las claves de que en España los ataques a personas sean tan poco frecuentes es que las zonas de asentamiento permanente de la población osera son las cotas con vegetación más altas de la cordillera y los bosques, donde se ha abandonado la actividad agroganadera. De hecho, el ataque a la vecina de Sonande es el primero que ha sufrido una persona en décadas en el Principado, y eso a pesar de que es allí, en los valles altos del suroeste asturiano, donde está radicada la máxima concentración de osos de toda la Península, unos 280.
Desde miel a carroña
Los expertos avalan el carácter excepcional de este ataque. Aunque la población de osos que más se ha recuperado está en el Suroccidente, donde más episodios violentos se han registrado es al este de esa región, donde se contabilizan medio centenar de ejemplares. Cinco de ellos están en Palencia, uno en León y otro en Cantabria. El resto deambula por los Pirineos, procedentes de reintroducciones de individuos traídos de zonas europeas donde su presencia es mayor.
El oso pardo es omnívoro -el único supercarnívoro es el polar-, y los daños que causa tienen que ver por lo general con sus hábitos alimenticios. Colmenas destruidas para acceder a las larvas (ahora) o a la miel (más avanzado el año), cultivos de huerta y frutales y, más excepcionalmente, algún ataque al ganado. Si el oso dispone de carroña, no caza. Y ninguno de los nueve ataques de las últimas dos décadas fue predatorio. Siete fueron reacciones instintivas de un animal nervioso ante un encuentro súbito. Otro, un macho que creía defender la carroña de la que se estaba alimentando. Y otro más, en Lérida, cuando el animal atacó a un cazador que le gritó.
Los osos suman en Asturias aproximadamente los mismos ejemplares que el lobo, asegura el director general de Medio Natural y Planificación Rural, David Villar. Al igual que sucede con los osos o los linces, los cánidos han experimentado un aumento sostenido, lo que ha llevado a la Administración autonómica a gestionar este crecimiento para evitar conflictos con la población. Un discurso conciliador, a caballo entre la necesidad de preservar la biodiversidad y la de fomentar la actividad económica en el campo. No es ninguna tontería. El lobo genera todos los años daños por valor de 800.000 euros en Asturias, a los que hay que sumar otros 1,2 millones provocados en los cultivos por jabalíes, corzos o venados.
«El oso es un atractivo turístico, pero no se debe olvidar que es salvaje y hay que respetarle»
La escena se repite cada vez más en Somiedo y también en los valles de la zona alta del río Narcea, Degaña e Ibias. Grupos de visitantes se afanan en ver, siempre a distancia y asistidos por profesionales, a las osas con crías recién salidas de la hibernación -muchos ejemplares ya no lo hacen debido a la subida de las temperaturas y la consiguiente provisión de alimento, más variado y en mayor cantidad- al principio de la primavera, o la interrelación entre hembras y machos durante el celo, más avanzada la estación.
Cada vez son menos los visitantes que se marchan sin haber podido presenciarlo en directo. También tienen la oportunidad de aprender sobre los modos y costumbres que ha tenido el ser humano de esta región y las colindantes «para lidiar con 'el' oso a lo largo de los siglos», puntualiza Pepe Caunedo, natural de Somiedo, especialista en la localización, seguimiento de este plantígrado y siempre atento para evitar las imprudencias de los humanos.
Colmenas y trampas
«Es un atractivo turístico, pero sin olvidar que es un animal salvaje y hay que respetarle», advierte Palomero. Penteriani recuerda, en este sentido, el peligro de habituar a los animales más jóvenes a la presencia humana. «Se acaban confiando y terminan adentrándose en pueblos y otras zonas habitadas en busca de comida, con el consiguiente riesgo que eso supone».
Hoy por hoy, el respeto al oso es mayoritario: por sí mismo y como síntoma de riqueza de la biodiversidad de la región. Hay quien trabaja a diario por recuperar las tradiciones vinculadas a esta especie, como es la construcción de 'cortines' (circulares) y 'talameiros' (torretas) para proteger las colmenas. Así es cómo la riqueza etnográfica se ha convertido en un nuevo activo económico, tanto por la altísima calidad de la miel (los cortines suelen estar ubicados en zonas con una flora muy rica), como por las visitas turísticas, atraídas por estas obras maestras de la ingeniería rural de origen inmemorial (solo en Ibias hay unos 400 cortines).
Las visitas se completan con un detallado repaso a las trampas y los métodos para ahuyentar a una especie con fama de astuta, «que sabe cómo provocar un cortocircuito en un pastor eléctrico, excavar un paso por debajo de los cables, o descolgarse por las ramas de un roble al interior de un cortín, si no andamos vivos con las podas». En Asturias, el oso se las sabe todas.
Viernes -18- Junio a las 22.00, en Telecinco, foto,.
Eva Isanta: "Yo sí que he tenido que hacer cobras",.
Es una de las actrices más populares por su papel de La Cuqui en La que se avecina. Ahora representa en el teatro Trigo Sucio, donde da vida a Sondra, la secretaria de un productor de cine que acosa a actrices. ¿Les suena?
- La obra 'Trigo Sucio' sube a escena el escándalo de Harvey Weinstein.
- En realidad, esto es algo que deducimos. Pero el autor, David Mamet, dice que no. Él lo que quiere es elevar un personaje así a la categoría de universal. Pero las similitudes son innegables.
- Tu personaje es una secretaria cómplice.
- Sí, Sondra es la cómplice absoluta, la mano derecha y la que ejecuta todas las acciones que salen de la cabeza perversa de Barney Fein, el productor.
- ¿Hay muchas mujeres cómplices?
- Sí. Las mujeres estamos más concienciadas con lo que tiene que ver con el abuso de poder y el sexual. Mientras que históricamente y educacionalmente se ha consentido mucho la figura del hombre que abusa de su testosterona. Pero dentro de las capacidades de la mujer también está elegir. Ponerte del lado del poder y de la ambición profesional, también es una opción. Por supuesto, que hay mujeres así.
- ¿Perdiste oportunidades laborales por decir no a los Weinsteins de turno?
- No, nunca me he visto en una situación tan comprometida. Lo que sí he vivido han sido abusos de poder donde se me ha amenazado con "Nunca llegarás a... si no haces esto" o "si no sigues este juego, no conseguirás ser nadie". Nunca me he visto en una situación tan extrema como estar la de estar encerrada en un despacho con un acoso sexual directo.
- La actriz Natalia Millán confesó que tenía normalizado cómo torear a este tipo de hombres para no se enfadaran.
- Sí, eso sí. No sólo lo he vivido en esta profesión, sino también en otros ámbitos. Yo sí he tenido que hacer cobras, en el sentido de bandear. Seducir nos gusta a todos y es un juego muy lícito. Que alguien comprometa lo personal, mezclándolo con lo profesional, es un abuso y es cruzar una frontera que nadie se merece. Cuando es algo mutuo, eso se nota. Es una situación de poder que utilizan algunos hombres, pero es una especie en peligro de extinción. Las nuevas generaciones tienen otra mentalidad. Hay un avance social, aunque también un retroceso. Ya llevamos siete mujeres asesinadas por la violencia machista. Yo soy madre de niño y está educado de otra manera. Ha mamado que sus compañeras son iguales.
- También hay voces que denuncian que el '#Metoo' se ha cargado la presunción de inocencia.
- No lo creo. El Metoo pone un altavoz a un suceso que estaba condicionando muchos comportamientos y vivencias femeninas con respecto a determinados hombres que abusaban de su posición de poder, comprometiendo su ilusión y su ascenso profesional e incluso su pan. ¿Cuántas mujeres, que no son actrices de Hollywood, sufren en esta situación por un jefe y tienen que callarse para no quedarse sin trabajo y poder dar de comer a sus hijos?
- ¿Hasta dónde estás de 'La Cuqui', tu personaje en 'La que se avecina'?
- Estoy encantada con La Cuqui. Ya la echo de menos. Es un personaje que yo he creado con los guionistas y los directores de la serie y me lo sigo pasando muy bien. Cada temporada, hay una vuelta de tuerca y me suceden muchas cosas. Es un personaje que no tiene fin. ¿Qué más le puede pasar a esta mujer?
- ¿Qué tiene la serie para que sea tan adictiva?
- Lo fundamental es el guion y un buen casting que acompaña. La serie tiene un ritmo muy trepidante. Suceden muchas cosas con muchas tramas y personajes diferentes. Las secuencias son muy cortas porque estamos en un mundo en el que los jóvenes consumen redes donde todo tiene que ser corto y con mucho ritmo. Todos esos ingredientes hacen que la serie sea tan especial.
- 'La que se avecina' sigue teniendo un humor ácido, pese a estos tiempos de corrección política.
- Estamos en un momento en el que hemos retrocedido mucho en cuanto a la libertad de expresión. Todo se pone en tela de juicio y estamos muy susceptibles. El humor es salud y terapia. La serie se mantiene fiel a ese humor iconoclasta que rompe con todo y que da cera a todo el mundo. No se casa con nadie.
- ¿Soportarías a un Amador como marido en la vida real?
- No.
- Ni cinco minutos, ¿no?
- No. La figura de Amador es entrañable como personaje, pero acabaría con mi paciencia. Es como una rémora, una sanguijuela simpática. Te chupa la sangre.
- ¿Quién es más sexy en la cama: Ernesto Sevilla o Pablo Chiapella?
- Con Ernesto tuve un trato carnal muy limitado. No sabría a quién elegir. ¡Como hacen de hermanos! Si habla Maite, yo creo que Amador fue el hombre de su vida. Es la neverending story. Esto no se acaba nunca.
- ¿Qué es lo más delirante que has hecho en la serie?
- Tuvimos que hacer una escena de cama y había muchos rebotes. Pablo Chiapella es muy enérgico y muy pasional. Lo grabamos todo a muerte. La cama no paraba de moverse y cuatro técnicos tenían que sujetarla.
- ¿Y en la vida real?
- Me gusta mucho el buceo y lo hago con mi hijo. La experiencia más heavy que he tenido últimamente ha sido tirarme en paracaídas.
- ¿Ah sí?
- No sabes lo que mola. Fue maravilloso. Casi me muero de miedo, pero lo volvería a hacer.
- ¿España es un gran patio de vecinos?
- Por supuesto. España es una gran corrala.
- Jodorowsky afirma que el odio es el mejor de los maestros.
- Me interesa mucho todo su teatro mágico. Puede que tenga razón, pero me atrevería a decir que el amor es el mejor de los maestros. Hay mucha gente que del odio no sale, no se recupera. Con el amor es más fácil aprender.
- Vivimos tiempos en los que se vapulea a una voluntaria de Cruz Roja por abrazar a un inmigrante.
- Inconcebible. Tenemos que estar muy alerta. No nos podemos permitir más deshumanización. Yo soy de Ceuta y he vivido la realidad con mi familia y mis amigos día a día. Son dos seres humanos. Una mujer que profesionalmente muestra lo mejor que tiene y una persona que llega desesperada. ¿Cómo se puede criminalizar eso? No me cabe en la cabeza. Muchas veces creemos que el fin justifica los medios. Por conseguir una manipulación ideológica somos capaces de arrancarnos el corazón y tirarlo a la basura.
- ¿Dónde están los héroes de la actualidad?
- Están más en la intrahistoria, que en la historia, como decía Unamuno. En la cotidianidad, en el día a día. Como esta chica o los voluntarios que ayudan a los más desfavorecidos o los que intentan ser consecuentes a diario.
- ¿A qué eres adicta?
- Al arte. Me explico porque queda muy grandilocuente. Soy muy terrenal, pero tengo una parte muy Geminis. Me gusta lo que me eleva por encima de la realidad: el teatro, la poesía, el arte, la danza, el cine...
- Está bien reivindicarlo en estos momentos en los que la cultura está tan arrinconada.
- Pero, qué curioso, que en la pandemia hemos consumido mucha cultura. Esa confusión que hay entre la cultura y el entretenimiento. Pensamos que la cultura es un rollo y el entretenimiento mola. La cultura también es entretenimiento. Soy adicta a nutrirme. A que otros me cuenten y me descubran la realidad de otra manera por encima de lo meramente tangible.
- ¿La fidelidad está sobrevalorada?
- Puede ser. Lo que nunca está sobrevalorado para mí es la honestidad y la lealtad. Una cosa es lo convencional de cómo se nos ha educado con respecto a unos valores religiosos y morales y otra cosa es el acto que tú tengas con tu pareja. Es muy personal. Cada uno lo puede jugar como quiera.
- Dice Javier Sardá que los padres te enseñan a mirar la vida. ¿Qué te enseñaron los tuyos?
- Mis padres me enseñaron a valorar mucho las pequeñas cosas y a ser honesta. Son muy buenas personas. Vivo de mi profesión y me encanta cada día más. Yo no tenía ni apellido ni familia ni contactos y ahora vengo todos los días a trabajar al Teatro Reina Victoria. Y me decía mi padre: "¡Hija y sin prostituirte!". Era su gran miedo y me decían que iba a tener que pasar por esto y aquello. Y yo le contestaba: "Bueno, papá, es que a ser honesta me has enseñado tú y mamá".
TITULO: Detrás del muro - PÁGINA DOS - Al escritor Javier Castillo , .
Página Dos' entrevista al escritor Javier Castillo,.
- Presenta su nuevo best seller ‘El juego del alma’ ambientado en Nueva York,.
Martes -15- Junio a las 20.00, en La 2, foto.
1 min.
'Página Dos' entrevista a Javier Castillo sobre su última obra ‘El juego del alma’ y también a la escritora Megan Maxwell. Además, el programa analizará los podcasts literarios y ofrecerá un recorrido por la Málaga de la Generación del 27.
Óscar López visita Málaga para hablar con Javier Castillo, uno de los escritores que más vende en nuestro país y uno de los reyes indiscutibles del thriller. Su nueva novela, 'El juego del alma', es un thriller en el que varios investigadores van tras la pista de un asesino en serie. Durante la entrevista, Javier Castillo, que ha visto cómo su libro ha sido recientemente publicitado en el mismísimo Times Square, confiesa su amor por Nueva York, por las historias policiacas y por las tramas adrenalínicas. Al tiempo, explica cómo ha conseguido alcanzar el éxito literario partiendo de la autoedición.
Otro fenómeno parecido es el de Megan Maxwell, aunque en el terreno de la literatura romántica y erótica, y con quien 'Página Dos' analizará su última novela.
A continuación, el programa se adentrará en los podcasts literarios, que están en auge. Descubrirá dos que funcionan desde hace tiempo y que regalarán una masterclass para no iniciados: 'Un día de libros' de Ana Ballabriga y 'La Milana bonita' de Víctor Gutiérrez Sanz, Ignacio Pillonetto y Eduardo Martín.
El programa sobre libros de La 2 finaliza su emisión con un paseo por la Málaga de la Generación del 27,.
La iglesia de Santa María de Baños de Montemayor será reclasificada como BIC,.
El templo está protegido desde 1982, pero ahora se completa su expediente, que califica su torre como «única en Extremadura»,.
La Junta de Extremadura ha incoado expediente para declarar BIC (Bien de Interés Cultural) la iglesia parroquial de Santa María de la Asunción de la localidad cacereña de Baños de Montemayor, en la categoría de monumento.
El templo ya fue reconocido de forma provisional para esta figura de protección del patrimonio en el año 1982,.
El Diario Oficial de Extremadura publica este lunes la resolución por la que incoa expediente de declaración de Bien de Interés Cultural (BIC) a favor de la Iglesia Parroquial de Nuestra Señora de la Asunción, en Baños de Montemayor, en la categoría de monumento.
La “Iglesia de Santa María de la Asunción” de Baños de Montemayor es un templo de tamaño mediano, cuyos principales valores patrimoniales residen en su fachada principal, realizada entre la segunda mitad del siglo XVI y los primeros años del XVII; el retablo mayor, obra barroca ejecutada a comienzos del siglo XVII por Antonio González Ramiro y Diego de Salcedo; el retablo renacentista de Santa Catalina, y su campanario, cuya elaborada ejecución y remate lo convierten en único en Extremadura.
El campanario tiene tres cuerpos y remate, siendo su traza de mucho mérito constructivo por su forma. En el primer cuerpo se sitúa el acceso exterior a la torre (con forma de arco conopial, al igual que otras ventanas de la torre y protegido por un pretil con decoración denticulada); está elevado y cuenta con escaleras exteriores. Desde esta entrada se accede a las escaleras interiores que conducen a lo alto del campanario.
El templo se construyó entre finales del siglo XV y el siglo XVII; se hicieron importantes reformas en el siglo XX.
La iglesia está construida mediante sillería de piedra bien escuadrada en las zonas más próximas a los pies del edificio, y de mampostería, con refuerzos de sillería, en las más cercanas al presbiterio. La cubrición está hecha de teja árabe.
TITULO:
Jordi Évole y Lo de Évole - José Manuel Zapata,.
- Usted es un tenor que no le hace ascos a Rosalía ni a Radiohead.
- No, ¿cómo vas a hacerle ascos al foie? Hay que estar abierto a todo lo bueno.
- Cantó Highway to hell, de AC/DC, con la orquesta de Valencia en un concierto al aire libre.
- Sí, es el bis que hacemos siempre. Hay que eliminar prejuicios. A la música clásica y a la de otros géneros nos une la energía y la calidad. Y esa canción es un temazo.
- Con tres años, su vecina en Granada le dijo: "Niño, eres muy bonico, pero parece que te has tragado un viejo", como cuenta en su libro.
- Cantaba tangos de Gardel y, claro, las vecinas me decían que parecía un viejo. Pero como ellas me aplaudían, pues seguía.
- De pequeño, cantaba, pero empezó algo mayor a dedicarse a la música de forma más profesional.
- Sí, porque la descubrí tarde. La música clásica llegó cuando tenía 18 años. Aprendí solfeo con niños de 6, 7 u 8 años. Era el abuelo de la clase. Parecía un tartamudo del solfeo y ellos se reían de mí.
- En el prólogo de su libro, Roberto Leal expresa lo que mucha gente piensa: que las óperas y las sinfonías de los grandes músicos son unos "tostones inaguantables".
- Sí, a eso nos tenemos que enfrentar cada día, ¡pero no es verdad! Es la imagen de marca que nos hemos creado desde hace mucho tiempo. A veces, me hablan de alguna música que suena en películas y resulta que es Maria Callas o Bach. Es maravilloso, pero el contexto no nos ayuda.
- Se percibe también como una música culta, de élites, inaccesible...
- Claro, hasta que consigamos hacer lo que logró el Circo del Sol: quitarle caspa al género. Tengo fe en que se puede hacer.
- El sistema de enseñanza musical es...
- El conservatorio es una fosa común de vocaciones musicales. Si hasta la palabra lo dice: conservatorio, donde meten a los muertos para que no se estropeen. Si seguimos con el mismo sistema del siglo XIX seguiremos con el púbico del siglo XIX. Hicieron un estudio y la media de edad del público del Teatro de la Zarzuela era 63-64 años. ¡Houston tenemos un problema!
- En el colegio y el instituto, la cosa no mejora. ¿Una hora a la semana de Música sirve de algo?
- Eso si hay una hora. En un instituto en el que di una charla, los profesores me decían que la música y las humanidades no importan. Es una pena enorme.
- Claro, se traslada el mensaje de que, si quieres ganar dinero, debes estudiar una Ingeniería o hacer Ciencias.
- Pero, ¡cuidado! que tu niño puede debutar en el Metropolitan Opera de Nueva York. Ojo, que yo me gano la vida bien. Lo importante es encontrar tu sitio, que puede ser en las ciencias o las artes porque ¿cuántos ingenieros, abogados y de todo están en paro? En mi época, se decía 'esta carrera no tiene salidas', pero es que hay que buscarlas.
- Usted pesaba unos 150 kilos, ¿sufrió la gordofobia?
- La gordofobia la sufren todos los gordos. Cuando subía a un avión, me miraba la azafata de una manera... Si eres gordo, eres diferente. Pero yo me he reído y me he llamado a mí mismo gordo. Lo he llevado bien.
- Los niños pueden ser muy crueles.
- Sí, unos cabrones. Cuando doy alguna charla en institutos o colegios les digo que se agarren a la música si se sienten diferentes. Cuando estaba en el colegio, mis compañeros se sentaban a mi alrededor cada vez que cantaba. Así no me quitaban el bocadillo. La música fue mi refugio en muchos momentos malos.
- Conferenciante, tenor, escritor, jurado de un programa... ¿reinventarse o morir?
- Sí. Lo llamo transformación. Estar siempre en la misma posición es un coñazo. Si no me muevo me marchito.
- ¿Lo peor que le puede pasar a un tenor?
- Lo peor es cuando sales a un escenario y no te sientes querido. Entregarte y que el público te reciba de manera fría. Nosotros escuchamos el silencio perfectamente y, cuando empieza una función de ópera, sé si el público está conectado o no.
- ¿Quién es responsable de que la música clásica sea de minorías: la sociedad, los artistas o los políticos?
- Los políticos son extraterrestres, ¡todos, eh! Los artistas de la música clásica tenemos mucha culpa de que sea así. Tendemos a echarle la culpa a los demás, pero hay que mirar por qué no viene la gente y cambiar. Tocamos a Bach, que es la leche, y podemos estar en una atalaya, pero si no bajamos, nos quedaremos sin gente que nos escuche.
- ¿Le queda algo de la 'mala follá' granadina?
- Me queda toda, hija. ¡La 'vin' 'compae'! Claro, hombre, eso va en el gen de todos los que nacemos en Granada. Y no la voy a perder nunca. Hay veces que notas que te posee por dentro y te sale hacia fuera. Y, ¿qué es la 'mala follá'? Pues es la antipatía-simpatía granadina.
José Manuel Zapata: "El conservatorio es una fosa común de vocaciones musicales",.
José Manuel Zapata. Granada, 1973. El tenor estará el 26 de junio en el Festival de Mérida, donde ofrecerá el concierto 'From Bach to Radiohead'. Fue jurado en el programa Prodigios de TVE y publicó recientemente el libro 'Música para la vida' (Planeta). En constante transformación.
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