TITULO: Museo de la Fábrica de Oskar Schindler en Cracovia.

Fábrica de Oskar Schindler - fotos.

Fábrica de Oskar Schindler
Fabryka Emalia Oskara Schindlera

Localización
País	Polonia
División	Voivodato de Pequeña Polonia
Subdivisión	Zabłocie
Ciudad	Cracovia
Dirección	ul. Lipowa, 4 (33-332)
Información general
Coleccion(es)	Holocausto

Inauguración	2010
Cambio(s) nombre	Deutsche Emailwarenfabrik

Administrador(a)	Museo Histórico de Cracovia
Información visitantes
Mapa(s) de localización
Fábrica de Oskar Schindler Fábrica de Oskar Schindler (Polonia)
Coordenadas	50°02′51″N 19°57′42″ECoordenadas: 50°02′51″N 19°57′42″E (mapa)

La Deutsche Emailwarenfabrik (DEF) (Fábrica Alemana de Esmaltados en español), también conocida como la Fábrica de Oskar Schindler (Fabryka Emalia Oskara Schindlera en polaco) fue una factoría de esmaltados ubicada en Cracovia, Pequeña Polonia, en la calle ul. Lipowa 4 en el distrito de Zabłocie. En el presente, dicha empresa pasó a ser un museo del holocausto.¹
Anteriormente a que Oskar Schindler comprara los terrenos, hubo la primera empresa de productos metálicos de Pequeña Polonia, inaugurada en 1937.

Historia

Fabryka Naczyń Emaliowanych i Wyrobów Blaszanych Rekord

La empresa fue fundada en 1937 por tres trabajadores autónomos de origen judío: Michal Gutman, Izrael Kahn y Wolf Luzer Glajtman (de Będzin, Cracovia y Olkusz respectivamente).² La función de la fábrica era la producción de cable, engranajes y acero. Posteriormente construirían una sala de prensado en la que se procesaban las láminas de metal y se realizaba la limpieza de los recipientes en soluciones de ácido sulfúrico para eliminar las impurezas; y un álmacen para los esmaltados, donde se aplicaban diferentes capas.
Hasta 1939 se produjeron varios cambios en la dirección y la situación económica empeoró. Con la llegada del nazismo a Polonia se produce la liquidación de la empresa de manera oficial por el Tribunal Regional de Cracovia.

Oskar Schindler

Escritorio de Oskar Schindler

El 1 de septiembre de 1939 el III Reich invade Polonia y estalla la II Guerra Mundial en Europa. Cinco días después los alemanes llegan a Cracovia. Casi al mismo tiempo, Oskar Schindler, un empresario alemán de las Sudetes miembro del NSDAP y agente del Abwehr llega a la mencionada localidad y aprovecha el poder de las fuerzas de ocupación germanas adquiere el establecimiento de productos de cocina alemán de la calle ul. Krakowska, y en noviembre del mismo año adquirió la compañía Rekord donde aparte de esmaltados, se fabricaba munición, esencial para la guerra.
También consiguió construir un subcampo en Płaszów con la premisa de que "sus" judíos tenían contacto directo con los guardias del campo.

Lista de Schindler

Véase también: Schindlerjuden

Los empleados judíos, en aquella época no tenían derecho a nómina, razón por la cual, en la empresa solo habían ciudadanos de dicha etnia. En 1944 había aproximadamente 1100 judíos que aparte de trabajar, encontraron donde refugiarse de la persecución nazi. Debido a la situación bélica de entonces, Schindler, junto con su contable Itzhak Stern, redactó una lista donde aparecían sus empleados, los cuales fueron trasladados a Brünnlitz, Protectorado de Bohemia y Moravia (Chequia en el presente). Una vez allí, permanecieron en la fábrica hasta el 8 de mayo de 1945, fecha en la que fueron liberados por el Ejército Rojo.

Museo

Postguerra

Una vez terminada la guerra, desde 1948 hasta 2002 la fábrica pasó a manos de Krakowskie Zakłady Elektroniczne Unitra-Telpod, empresa de telecomunicaciones.¹

Parte del Museo Histórico de Cracovia

A partir de 2007, el edificio fue transferido al Museo Histórico de Cracovia y en 2010 fue inaugurado como museo relacionado con la ocupación de la ciudad.³
Las exposiciones allí presentes se dividen en varias secciones: la guerra a partir de 1939, historia de Cracovia como centro administrativo del Gobierno General, la población judía de entonces, la resistencia polaca y la vida de Oskar Schindler entre otros documentos históricos., etc.

TITULO:Barrio Judío de Cracovia,.

fotos

El día de hoy empieza de una manera un tanto diferente a como la teníamos programado, ya que inicialmente íbamos a visitar el Barrio Judío de Cracovia, algunos de los lugares que no visitamos ayer, además del gueto judío, pero como por tercera vez consecutiva ayer no podemos subir a la torre de la Basílica de Santa María, y creemos que es una de las cosas que ver en Cracovia que no nos podemos perder, hemos decidido que hoy iremos a primera hora de la mañana, ya que a las 9:15 de la mañana abren las taquillas y entendemos que a esa hora podremos conseguir por fin los tickets para entrar y así poder subir a primera hora de la mañana.
Y así suena el despertador a las 6 de la mañana, momento que como viene siendo habitual en este viaje a Cracovia, aprovechamos para trabajar un par de horas y después cuando son las ocho bajar al salón del desayunos del hotel Logos, donde después de cargar energías con un desayuno de lo más completo, hacemos el check out, dejando las maletas para recogerlas a mediodía, cuando volvamos al aeropuerto.
Con esta planificación, llegamos a la taquilla de la Basílica de Santa María cuando allí cuando son las 9 de la mañana, 15 minutos de que abran y nos encontramos que únicamente hay dos personas delante por lo que entendemos, o queremos creer, que hoy por fin tendremos suerte y podremos a subir a la torre, después de tres intentos estos días atrás.
A las 9:15 en punto abren la taquilla y tenemos la gran suerte de conseguir entradas para primera hora de la mañana, justo en 10 minutos, por 15PLN por persona.

Torre de la Basílica de Santa María en Cracovia

Si quieres subir a la torre, debes tener en cuenta algunos detalles o recomendaciones:
– Según nuestra experiencia, tal y como hemos ido contando estos días atrás del viaje a Cracovia en 5 días, las entradas para subir a la torre se agotan rápidamente. Si quieres subir, te recomendamos venir a primera hora de la mañana para así asegurarte la entrada y además, poder elegir el horario que más te convenga.
– Esto es debido a que únicamente dejan subir grupos reducidos cada 30 minutos.
– En contra del resto de lugares de Cracovia, en los que se puede pagar con tarjeta, aquí únicamente aceptan efectivo. Pese a esto, tienen un cajero dentro de la oficina y también puedes pagar en euros e incluso, recibir el cambio también en euros, algo que tenemos que decir, nos sorprendió mucho y para bien.
– La subida a la torre se hace por el lado contrario al lugar en el que se deben comprar los tickets, así que evita ponerte en la cola de la torre sin los tickets, ya que cuando llegue tu turno te harán ir a la oficina a adquirirlos.
Aproximadamente la primera ubicación es la de la entrada a la torre y la segunda el lugar en el que se compran los tickets, que está justo enfrente de la entrada de visitantes de la Basílica de Santa María.

– La torre tiene 81 metros de altura y no tiene ascensor, por lo que el ascenso se tiene que hacer a pie, a través de 271 escalones de madera, en forma de escalera de caracol. Si bien no es excesivamente cansado y se puede realizar sin tener una forma física excepcional, conviene tomárselo con calma, ya que las escaleras no son muy anchas y en días de calor, muy resultar algo agobiante.

Escaleras a la Torre de la Basílica de Santa María

– Una vez llegas arriba, entiendes el motivo por el que únicamente dejan subir grupos reducidos y es que el mirador es bastante pequeño, con varias ventanas desde las que puedes ver Cracovia a tus pies, con unas vistas increíbles de la Plaza del Mercado.

Plaza del Mercado de Cracovia

– Al ser prácticamente un mirador circular, además de las vistas a la Plaza del Mercado, tienes vistas a otras zonas de Cracovia como la Calle Florianska.

Calle Florianska

Vistas de Cracovia desde la torre de la Basílica de Santa María

Plaza del Mercado

– Antiguamente, esta torre funcionaba como lugar de aviso para el cierre y apertura de las puertas de la ciudad, además de para informar y alertar de ataques enemigos. A día de hoy, podemos encontrar al trompetista en la parte alta de la torre, entonando cada hora la simbólica melodía, que en un momento dado se interrumpe en recuerdo del trompetista que fue asesinado mientras alertaba a la población de un ataque.

Basílica de Santa María

Una vez ya con las entradas en la mano, nos acercamos a la entrada de la torre y en menos de 10 minutos estamos empezando a subir los 271 escalones y los más de 80 metros que nos separan de las que dicen, son algunas de las mejores vistas de Cracovia.
La visita no te llevará más de 30 minutos, ya que como comentábamos anteriormente la zona del mirador es bastante pequeña y únicamente hay 5 ventanas, por lo que puedes planificar esta visita en poco tiempo.

Más información práctica para preparar tu viaje a Cracovia
– 10 lugares que visitar en Cracovia imprescindibles
– 50 cosas que ver y hacer en Cracovia
– Los 5 mejores tours y excursiones en Cracovia

Después de disfrutar de estas vistas increíbles de la ciudad, volvemos a bajar y una vez en la Plaza del Mercado, no podemos evitar dar una vuelta por la zona, a modo de despedida, ya que hoy, con la visita al gueto y al Barrio Judío de Cracovia, ya sabemos que no podremos volver.

Cracovia

Ruta por el Barrio Judío de Cracovia

Una buena opción para planificar una ruta de Cracovia en un día, sería combinar una visita al Barrio Judío de Cracovia, para después ir al gueto judío, dos de los lugares que no puedes perderte en la ciudad.
En nuestro caso, al tener que visitar las Minas de Sal desde Cracovia ayer por la tarde, uno de los mejores tours y excursiones en Cracovia, decidimos hacer la visita al Barrio Judío de Cracovia por la mañana y así poder conocer algunos de sus lugares más importantes con más tranquilidad, ya que hoy tampoco disponíamos del día completo por irnos a media tarde.
El recorrido que hicimos ayer por el Barrio Judío de Cracovia o Kazimierz nos llevó a conocer lugares como la Sinagoga Vieja, la Sinagoga Remuh, la Sinagoga Tempel, la Sinagoga de Isaac, la Sinagoga Kupa, la Sinagoga Wysoka, la Plaza Nowy y la Basílica del Corpus Cristi, además de disfrutar de un agradable paseo por una de las zonas más imprescindibles de Cracovia.
Te recomendamos que si quieres hacer una combinación entre el Barrio Judío de Cracovia y el gueto, leas este artículo, en el que detallamos todas las visitas que realizamos en el barrio judío.

Calles del Barrio Judío de Cracovia

Ruta por el gueto judío de Cracovia

La ruta de hoy por el gueto judío o Podgorze nos llevará a conocer lugares como el Puente Bernatek, la Plaza Bohaterów, la Farmacia del Águila, los trozos de muro que aún se conservan en las calles Lwowska, 25 y en Limanowskiego, 62 y la Fábrica de Oskar Schindler.
La primera parada de esta ruta por el gueto judío, que como comentábamos se podría hacer perfectamente combinado en un día con el Barrio Judío de Cracovia, la hacemos en la Plaza Bohaterów, uno de los lugares más simbólicos de esta zona de la ciudad.
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Plaza Bohaterów

Este escalofriante lugar, en su momento, due la plaza principal de Podgorze, el gueto judío, y donde se seleccionaba a los judíos que más tarde serían llevados al Campo de Concentración de Auschwitz.

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Es en esta plaza donde también podemos ver el impresionante Monumento a las sillas, realizado por Roman Polanski como homenaje a los judíos que eran llevados a los campos de concentración, con todas sus pertenencias.

Monumento a las sillas

En la misma Plaza Bohaterów, en una de las esquinas, se encuentra la Farmacia del Águila, la única que permaneció en el gueto y en la que muchos judíos acabaron refugiándose y siendo ayudados. A día de hoy se puede visitar.

Farmacia del Águila

Desde aquí seguimos la ruta por el gueto, combinable con el Barrio Judío de Cracovia, a dos de los fragmentos del muro que aún se conservan, en las calles Lwowska, 25 y en Limanowskiego, 62.
Si bien estas dos visitas no son demasiado turísticas, creemos dada su ubicación, muy cerca de la Plaza Bohaterów, merece la pena no descartarlas, además de poder así, conocer de primera mano uno de los símbolos del gueto judío, del que después, podrás ver imágenes y explicaciones en la Fábrica de Oskar Schindler.
Una buena opción para conocer mejor la historia es reservar esta visita con guía en español por la fábrica de Schindler.

Fragmento del muro en Lwowska, 25.

Fragmento del muro en Limanowskiego, 62.

Después de estas breves paradas, continuamos la ruta, acercándonos hasta la Fábrica de Oskar Schindler, otra de las visitas imprescindibles en la ciudad y un complemento perfecto a la ruta por el barrio judío de Cracovia y al gueto, perdiéndonos por algunas calles adyacentes del gueto judío, de las que nos cuestan despedirnos.

Gueto Judío

Fábrica de Oskar Schindler

Conocida mundialmente por la famosa película, la Fábrica de Oskar Schindler, acabó salvando la vide de cientos de judíos, pese a que en sus inicios fue creada para aprovechar la mano de pbra barata.
A día de hoy, la fábrica es un museo en el que poder descubrir la historia y lo que vivieron los judíos en Cracovia.

Fábrica de Oskar Schindler

El precio de la entrada a la Fábrica de Oskar Schindler es de 21PLN por persona, y nos encontramos con que nosotros, aunque llegamos a primera hora de la mañana ya hay una cola bastante larga, además de encontrarnos con un cartel de información donde dice que quedan únicamente 721 entradas disponibles, por lo que entendemos que también en temporada alta igual que pasa en otros lugares de Cracovia, hay que venir pronto por la mañana o reservar entradas por Internet, siempre que sea posible, para poder asegurarte la visita.

Fábrica de Oskar Schindler

Detalles que se pueden ver en la Fábrica de Oskar Schindler

La visita a la Fábrica de Oskar Schindler dura aproximadamente algo más de una hora, yendo bastante rápido y aunque hay muchas explicaciones en inglés y en polaco en la mayoría de salas, después de nuestra experiencia, creemos que una visita guiada puede ser muy interesante. Algo que por supuesto anotamos y haremos la próxima vez que vengamos a Cracovia.

Detalles que se pueden ver en la Fábrica de Oskar Schindler

Son más de las 12 del mediodía cuando damos por finalizada la visita a la Fábrica de Oskar Schindler dirigiéndonos ahora al Barrio Judío de Cracovia, no sin antes pasar por el famoso Puente Bernatek, otro de los símbolos de esta zona de la ciudad.

Puente Bernatek

Estando ya en el Barrio Judío de Cracovia, no podemos dejar pasar la oportunidad de comer en el restaurante Starka, toda una institución en Cracovia, donde pedimos un solomillo y un pato, más agua, refrescos, postre y dos cafés por 141PLN.

Restaurante Starka en el Barrio Judio

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Y así, con esta comida en el Barrio Judío, damos por finalizado nuestro viaje a Cracovia, empezando el regreso a casa.
Lo que no contamos ayer fue que después de la excursión a las Minas de Sal, nos dimos cuenta que nuestro vuelo no salía a las 9 de la noche tal y como nosotros pensábamos, sino que sale prácticamente a las 6 de la tarde, por lo que ayer por la noche hicimos un nuevo planteamiento de la ruta y decidimos que aunque habíamos pensado ir al aeropuerto desde Cracovia en transporte público, teniendo en cuenta la hora de salida del vuelo, hemos optado por volver a reservar el traslado de Cracovia al aeropuerto, tal y como hicimos el día que llegamos y fuimos del aeropuerto a Cracovia, pero al revés, y así por únicamente 22 euros, ganar muchísimo más tiempo del que hubiésemos tenido si hubiésemos optado por el transporte público.

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Es por eso que hemos comido con un poquito más de tranquilidad, ya que hemos quedado con el chofer que vendrá a buscarnos al hotel a las 3 de la tarde y así, sabiendo que aún nos quedan unos minutos, aprovechamos para volver a dar un paseo por las calles de Cracovia, para cuando son las 2:30 de la tarde, llegar al hotel Logos donde, sorprendentemente ya nos encontramos con el chofer en la puerta, que como nos dice que no hay prisas y que él ya es consciente que ha llegado mucho antes, aprovechamos unos minutos para descargar las últimas fotos en el portátil y así poder trabajar un rato en el aeropuerto, y cuando son las 14:45 salir camino al aeropuerto de Cracovia donde llegamos en aproximadamente 20 minutos.

Aeropuerto Cracovia

Pasamos los controles de seguridad y puntuales, cuando pasan algunos minutos para las 5 de la tarde, comenzamos a embarcar en el vuelo que nos llevará de nuevo a Girona y desde donde, 2 horasy media más tarde, volvemos a coger nuestro coche para en 30 minutos llegar a casa y empezar a planear el que será nuestro próximo viaje, en menos de una semana.

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