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martes, 28 de marzo de 2023

La Hora Musa - Perfume - El Teatro Real subsana una «laguna» al programar 'Arabella', de Strauss ,. Martes -11- Abril ,. / Cachitos de hierro y cromo - Wouldn't It Be Good ,. Martes - 11 - Abril ,./ Locos por las motos - Márquez brilla en el estreno de la controvertida carrera sprint ,.

 

     TITULO: La Hora Musa - Perfume  - El Teatro Real subsana una «laguna» al programar 'Arabella', de Strauss ,. Martes -11- Abril ,.

 'La Hora Musa', presentado por Maika Makovski ,a las 22:55 horas, en La 2 martes  -11- Abril  , foto,.

 Perfume  - El Teatro Real subsana una «laguna» al programar 'Arabella', de Strauss,.

 El Teatro Real subsana una «laguna» al programar 'Arabella', de Strauss

La última ópera del músico, fruto de su colaboración con el poeta Hugo von Hofmannsthal, se presenta por primera vez en Madrid, 90 años después de su estreno en Dresde,.


«Un acontecimiento mayúsculo». Así califica Joan Matabosch, director artístico del Teatro Real, la representación de la ópera Arabella, de Richard Strauss, que se verá en el teatro Real del 24 de enero al 12 de febrero. Y no es para menos. Arabella ha tardado nueve décadas en llegar a Madrid tras su estreno en Dresde (Alemania). Es la sexta y última obra que escribieron juntos el compositor Richard Strauss y el dramaturgo Hugo von Hofmannsthal, unión de la que surgieron títulos como 'Elektra', 'El caballero de la rosa' o 'Ariadna de Naxos'. Con esta representación se subsana una laguna inexplicable en el acervo del Teatro Real.

La producción cuenta con la dirección musical de David Afkham, el director de la Orquesta Nacional de España, gran conocedor de la música de Richard Strauss, que dirigirá su segunda ópera en el Teatro Real, después de 'Bomarzo' en 2017. La dirección escénica corre a cargo de Christof Loy, que ha firmado ya en el coliseo madrileño cuatro prestigiosos montajes, dos de ellos de óperas de Strauss: 'Ariadna de Naxos' y 'Capriccio'. Loy lleva profundizando en la obra casi dos décadas, pues la producción que se verá en Madrid fue inicialmente concebida para su representación en Gotemburgo en 2006, y ha ido evolucionando desde entonces hasta el montaje actual. La obra, calificada por Matabosch como «comedia triste», cuenta la historia de un noble empobrecido por el juego y el despilfarro, que para salvar a su familia de la ruina ofrece la mano de su hija mayor, Arabella. La protagonista acepta este papel degradante con valentía, ocultando su vergüenza a través del juego de seducción de un rico provinciano ajeno a la hipocresía de la sociedad vienesa, que terminará en un agridulce «final feliz».

y serias, que profundizan en lo que subyace bajo los cánones de la comedia.

Para la puesta en escena de la obra, Christof Loy juega con dos niveles, un realismo casi cinematográfico en cuanto a la escenografía, donde el director alemán despoja el espacio de adornos, decoración palaciega y trajes engalanados, y transforma un lujoso hotel en un lugar diáfano concebido por el escenógrafo y figurinista Herbert Murauer, y otro nivel más psicológico, «como primeros planos de los personajes en los que nos olvidamos del entorno». «No se puede separar -añade- a los individuos de la sociedad en la que viven. Y esta puesta en escena no lo hace».

Bloques musicales

En cuanto a la partitura, David Afkman asegura que «musicalmente, la obra se entiende desde el texto, a diferencia de títulos como 'Elektra' o 'Salomé', que son bloques musicales en sí mismos».

La música de Strauss es rica en requiebros y dobles sentidos, va dando voz a un reparto de personajes caricaturescos, perfilados con sutiles leitmotiv que articulan y entrelazan valses, polonesas, melodías eslavas, partes cantadas y habladas, con una orquestación genial, cristalina y minuciosa, que alcanza vuelos de grandísimo ímpetu emocional.

Incluso en el tratamiento vocal de los personajes quiso Strauss crear símbolos, dice Joan Matabosch. Hay un personaje, Zdenka, hermana de la protagonista, a la que su familia quiere hacer pasar por chico: «En la competitiva sociedad vienesa era muy complicado educar y poner en el mercado de jóvenes casaderas a dos hijas, con todo lo que implica en gastos de vestidos, joyas, perfumes y galas», apunta Matabosch. Pero, irónicamente, Strauss no utiliza una mezzo para el papel, sino que le asigna una tesitura de soprano incluso más aguda que la de su hermana «con notas que parecen protestar a cada momento contra esos pantalones que le hacen llevar».

 

La ópera ha experimentado una creciente revalorización en los últimos años, gracias a interpretaciones musicales y dramatúrgicas más hondas

 

 

La ópera ha tenido un proceso de ensayos más largo de lo habitual, ya que comenzaron el 4 de diciembre. Según Mataboch, hay óperas que se pueden planear desde el papel, pero 'Arabella' ha de construirse necesariamente durante los ensayos. «Es casi más importante -añade Matabosch- la relación entre los personajes que las individualidades».

Los cantantes, actores y bailarines, ataviados en blanco y negro, se mueven como en una gran coreografía emocional, despojados de sus máscaras, en una lectura de gran hondura psicológica y meticuloso trabajo actoral, en el que destacan la soprano Sara Jakubiak y el barítono Josef Wagner como Arabella y Mandryka respectivamente. Los acompañan Sarah Defrise, Martin Winkler, Anne Sofie von Otter, Matthew Newlin, Dean Power, Roger Smeets, Tiler Zimmerman, Elena Sancho Pereg, Barbara Zechmeister, José Manuel Montero, Benjamin Werth, Niall Fallon y Hanno Jusek.

En paralelo a la representación de Arabella, el Teatro Real, en colaboración con el Museo Nacional de Artes Decorativas, el Museo del Romanticismo, el de Arte Contemporáneo y el Museo de Historia de Madrid, ha organizado actividades relacionadas con la obra y su época. Asimismo, Arabella se emitirá en directo en MEZZO el 9 de febrero a las 19 horas.

 

TITULO:  Cachitos de hierro y cromo -   Wouldn't It Be Good ,. . Martes -  11 - Abril   ,.

   El martes -    11- Abril a las 22:30 horas por La 2, foto,.

  Wouldn't It Be Good,.

 El segundo Mad Cool sobrevive al diluvio con unos Foo Fighters mesiánicos

El segundo Mad Cool sobrevive al diluvio con unos Foo Fighters mesiánicos,.

Las lluvias de la primera jornada del festival no disuadió a los 45.000 asistentes de disfrutar de los grandes cabezas de cartel de la edición,.


No pintaba tan gris el panorama cuando meses atrás se agotó el aforo del II Mad Cool Festival, pero julio ha querido retorcer previsiones con un diluvio en la primera jornada que, con todo, no ha disuadido a los 45.000 asistentes de disfrutar de los grandes cabezas de cartel de la edición, Foo Fighters.


"¡Es una noche jodidamente bonita!", ha gritado su líder, Dave Grohl, ya sin nubes a la vista, incapaz de ocultar su buena estrella después de casi 20 horas de agua sobre Madrid, aunque la organización haya comunicado desde bien temprano que la suspensión no era una opción y que las camisas hawaianas debían dar paso al menos hoy a los chubasqueros.

Negro como pedernal se desplomaba el cielo en la apertura de puertas de La Caja Mágica al principio de la tarde, cuando se daba acceso rápido a unos pocos valientes para que alcanzaran las zonas cubiertas ante una lluvia que ocultaba incluso la simbólica noria del festival.

No ha sido hasta las 19,30 horas aproximadamente cuando las nubes han dado tregua, coincidiendo con la llegada masiva de asistentes para disfrutar bajo techo del directo de los españoles Neuman o del del cuarteto femenino de rock Warpaint, este al raso.

The Lumineers solo 25 minutos

Llegado ese momento no se habían registrado tampoco incidencias grandes más allá del apagón de las pantallas, inservibles en toda la jornada para seguir los conciertos multitudinarios, o la media hora larga de retraso en el show de The Lumineers (algunas fuentes han indicado a Efe que la banda no quería salir por los truenos).

Su salto a escena ha coincidido con casi los primeros rayos de sol del día y su folk jovial, coloreado con acordeón y contrabajo, ha puesto una necesaria sonrisa al festival, sobre todo con "Ho hey", que han soltado rápidamente en una actuación de apenas 25 minutos para cumplir con los tiempos.

Así han dejado vía libre al directo de Foals en el segundo escenario grande, mientras Quique González, el hombre que cantaba "Te vi bailar bajo la lluvia", registraba en DVD su directo en un formato más íntimo.

El concierto de los británicos ha servido de termo para ir calentando los pies húmedos gracias a sus sofisticadas guitarras y a la voz de Yannis Philippakis, bien templada desde la roquera "Mountain at my gates" y en piezas bailables como "My number".

Quizás se les han atragantado después las cuerdas hipnóticas de "Spanish Sahara" frente a un público tibio, sin apenas música o cerveza encima, que no ha sabido apreciar un repertorio trufado de lo más granado de su último disco, "What went down", pero también de "Antidotes" o el celebrado "Holy Fire".

Foo Fighters en escena

Nada que ver con la salvaje irrupción de Foo Fighters poco después, con la práctica totalidad de los asistentes pendientes de ellos el día en el que se cumplían 6 años de su último concierto en Madrid, calificado entonces por la prensa y por ellos mismos como una cita para la historia.

"Va a ser una noche larga", ha pronosticado Grohl, gran maestro de ceremonias de un show de casi dos horas y media que ha dado para dejar el cuerpo dolorido entre espasmos, celebrar momentos de emponderamiento personal y exaltación de la amistad y hasta para arrullos románticos en formato semiacústico.

Con la única salvedad de "Cold day in the sun", como siempre con el batería Taylor Hawkins como protagonista, Grohl ha estado omnipresente, desmarañada la melena y presto a dejarse el alma a cada momento, voraz como Cronos o milagroso como Moisés al frente de un sexteto que, con ocho manos a las cuerdas, ha construido un muro impenetrable.

Decididos a dejar huella en Madrid, hasta han subvertido el orden y composición de shows previos, arrancando a lo grande con "Everlong", habitualmente su fin de fiesta.

Clásicos y nuevos temas

Entre las más de dos docenas de canciones interpretadas han cabido canciones como "Monkey wrench" y "Learn to fly", pasando por las ineludibles "The pretender", "Walk", "Times like these" o "My hero", aquí con el público coreando el estribillo a pleno pulmón.

"Vamos a hacer un concurso, a ver quién pierde primero la voz, yo puedo cantar toda la noche", prevenía ya al inicio, y no eran pocos los que se sorprendían de que no se dejara la garganta entre notas musicales y berridos sostenidos.

Incluso ha habido tiempo para su nuevo álbum, "Concrete & Gold", que se publicará en septiembre con la ya conocida "Run" o una pieza romántica a la guitarra que ha dado en llamar "Big me" y que también ha sonado esta noche.

El gran damnificado ha sido el pop alternativo y colorista de Belle & Sebastian, que merecía mejor espacio que uno de los escenarios medianos a la misma hora que Foo Fighters, quienes han rematado con "Best of you" un concierto de altura, a la espera de lo que puedan hacer mañana Green Day y Ryan Adams en la segunda jornada. 

 

TITULO:  Locos por las motos - Márquez brilla en el estreno de la controvertida carrera sprint ,. 

Márquez brilla en el estreno de la controvertida carrera sprint ,. 


A pesar de no lograr la victoria, el piloto español fue el principal animador de un sábado donde logró la pole por la mañana y se subió al podio en la primera prueba corta de la historia de MotoGP,.

 Marc Márquez y Pecco Bagnaia se saludan en Portimao.

foto / Marc Márquez y Pecco Bagnaia se saludan en Portimao,.

La historia del Mundial recordará que el campeón 'Pecco' Bagnaia fue el primer ganador de una carrera sprint de MotoGP, pero el nombre propio del sábado en el circuito de Portimao fue Marc Márquez, que volvió a ponerse la capa de superhéroe para lograr cosas que parecían imposibles hace no tanto. Después de una pretemporada decepcionante, con una Honda que estaba a un mundo de sus rivales, en el momento de la verdad el piloto de Cervera volvió a hacer magia sobre dos ruedas.

El nuevo formato del fin de semana y la incursión de la carrera sprint a la tarde, colocaba el primer punto de interés del fin de semana a la mañana del sábado: la clasificación de MotoGP. Después de pasar por la repesca de la Q1, Márquez cuadró la vuelta perfecta a rueda de Enea Bastianini para lograr una pole estratosférica, destrozando el récord del circuito, y volver a situarse al frente en una parrilla. Y en 2023 las poles tienen doble premio, ya que tanto en la carrera sprint como en la larga del domingo, y a diferencia de la Fórmula 1, el que hace la pole en la Q2 sale el primero.

Casi sin tiempo para digerir el subidón de la mañana, tocaba prepararse para afrontar la primera carrera sprint. Doce vueltas por delante, todas las motos con neumático blando y los pilotos con el cuchillo entre los dientes. Desde la salida fue una lucha sin cuartel, desigual para Márquez, que veía cómo las Ducati le abrasaban en la recta, pero en la que podía desenvolverse gracias a su particular estilo explosivo encima de una moto. Los 20 minutos que duró la carrera fueron una lucha constante en grupo, donde apenas hubo tiempo para especular. El duelo final entre Bagnaia y Jorge Martín lo ganó el italiano, que se aprovechó de un error del español en la última vuelta para pasarle e inscribir su nombre en el palmarés de la primera carrera sprint de la historia.

Pero de nuevo el protagonista del día estaba por detrás. Márquez se imponía a las Aprilia de Maverick Viñales, Aleix Espargaró y Miguel Oliveira y a la KTM de Jack Miller para subir a un podio, mucho más simbólico que la recompensa en puntos que tiene. Y es que la carrera sprint también reparte la mitad de puntos que una carrera normal (12, 9, 7, 6 y así sucesivamente, hasta 1 punto al noveno). Una pole y un podio era un botín inesperado para Márquez, que luego valoraba de manera muy diferente: «Para mí los dos hitos son bonitos, pero diferentes. Con la pole creo que creamos una gran expectación, como hizo la pole de Fernando Alonso en la F1. En la carrera después fue distinto. No esperaba estar en el podio, pero cuando me pongo en una parrilla, siento esa presión adicional que me gusta y me hace dar más».

«Espero que no se convierta en boxeo»

La carrera sprint fue un éxito a nivel visual. Así al menos fue el sentir de los aficionados que la vivieron desde el circuito y a través de las televisiones, pero el modelo no terminó de convencer a todo el mundo. Se contaba con que una carrera corta aumentase la intensidad, generase más adelantamientos… pero también un mayor riesgo. Además, el nuevo programa del fin de semana donde todos los entrenamientos cuentan supone ir al límite más tiempo. Ya el viernes Pol Esparagaró acabó en el hospital por culpa de una caída en los últimos minutos del segundo entrenamiento, buscando el tiempo para estar en la Q2 directo. Y en el sprint de este sábado, uno de los favoritos al título, el italiano Bastianini, fue embestido por su compatriota Luca Marini y en la caída se rompió el omóplato derecho y se perderá la carrera de este domingo y la del próximo fin de semana en Argentina.

Con este panorama fueron varios los pilotos que alzaron la voz y el que más ruido hizo fue Aleix Espargaró, un piloto autorizado en la parrilla -de hecho, es el más veterano-, que decía lo siguiente sobre la carrera sprint. «Yo solo espero que este deporte no se convierta en boxeo, porque no lo es. Hay que darle tiempo a este formato, entenderlo, ver si baja un poco la intensidad y la tensión de los pilotos. Si a la gente le ha gustado, perfecto, pero lo que a mí no me gusta es que haya tantas caídas y tantos choques como ha habido».

En lo que coinciden todos los pilotos es en que se debería dar una vuelta al formato y a los horarios, que apenas dejan tiempo libre a los pilotos. Y el campeonato está dispuesto a debatirlo. El próximo viernes en Argentina, en la Comisión de Seguridad de MotoGP, se tratará el tema de manera abierta, aunque la continuidad de la carrera sprint no está en entredicho y seguiremos teniendo sábados tan espectaculares e inesperados como el vivido en el circuito de Portimao.

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