A Manuel Barceló, propietario de
esta firma de Elche con 450 puntos
de venta en el mundo, le quitan los
pares de zapatos de las manos. En
exclusiva, nos cuenta el fenómeno. foto,
Es la firma española de zapatos
menos conocida en nuestro país
y, sin embargo, la que tiene un
mayor éxito internacional. De hecho,
esta es la primera entrevista
que Manuel Barceló, su fundador,
concede a un medio nacional. Con
más de 450 puntos de venta por
el mundo y 15 años de vida, la historia
de Paloma Barceló tiene, además, un recorrido
vital y emocional único.
Manuel
Barceló la creó hace poco más de tres
lustros como homenaje a su hija menor,
Paloma, que tiene 17 años. El empresario
ilicitano estaba ya curtido en el oficio
por tradición familiar y en su fábrica de
Elche, fundada por su padre en 1960 y
especializada en esparteñas, también
fabrica calzado para otros. “Trabajamos
para unas 30 firmas… Chanel, Marc Jacobs,
Stella McCartney, Fendi, Celine, Chloé,
Missoni o Karl Lagerfeld son clientes
nuestros”, confirma Manuel.Pero hace tres lustros decidió dar un paso más y crear su propia etiqueta, una marca que, desde hace tres años, causa sensación en mercados internacionales tan dispares como Japón y México, Corea y Estados Unidos, y que en España se vende en tiendas multimarca. “Tenemos que aprovechar este momento de pasión que despertamos”, dice el empresario con una naturalidad que no refleja la magnitud de su negocio: este otoño inaugurará nueve corners en los almacenes franceses Printemps, negocia en México la apertura de varias tiendas y en 2015 abrirá espacios en los grandes almacenes italianos La Rinascente, que se sumarán a los 300 puntos de venta que ya tiene en un país de exigencia y espíritu fashionista. “Nuestra posición en el mercado italiano es buenísima en el segmento de gama alta. El precio medio de los zapatos que vendemos es de 300 €”.
Mujerhoy: ¿En qué piensa cuando recibe tal avalancha de solicitudes?
Manuel Barceló: En el producto, en mejorar, porque la moda atraviesa un momento muy complejo: si no arriesgas, no cautivas, no despiertas el interés de nadie porque la gente está aburrida de ver siempre lo mismo, un producto estandarizado en cualquier país. Pero, a la vez, si arriesgas, si haces solo producto fashion, la consumidora se asusta, porque la economía hace que se retraiga en sus gustos.
MH: ¿Hay que ser equilibrista?
MB: Hay que balancearse entre el producto de imagen y el estándar comercial. Por eso el comercio tradicional lo está pasando tan mal, no encuentra un equilibrio para salvarse de tres competidores feroces: los grandes grupos de moda asequible, que están por todas partes y ofrecen novedades constantes; los grupos dedicados al lujo, que no paran de expandirse; y los comercios orientales y las cadenas de 19,90 €, que desploman los precios.
MH: El negocio exige andar con pies de plomo.
MB: Sí, y hay que actualizarse constantemente, pero siempre con cabeza... Incluso cuando todo marcha sobre ruedas, hay que anticiparse sin exageración. Ahora, la moda no está muy de moda. Me explico, está de moda el classic chic, ese toque cool que dicen los anglosajones, pero no está de moda el extremo, el ir rabiosamente extravagante.
MH: ¿Cuál es su fórmula?
MB: Hacer diseños únicos y actuales, que cubran las necesidades de sectores muy avanzados en gustos, pero no podemos hacer solo un zapato aspiracional, porque el consumidor medio lo ve como de museo. Así que tenemos que cumplir también sus expectativas.
MH: ¿Cómo cambian los gustos según el país?
MB: Italianos, americanos, ingleses o franceses piden un producto muy de moda. En otros mercados, quizá no tanto. Y luego están los precios, por eso tenemos una segunda línea, Palomitas, más asequible.
MH: ¿Cuáles son sus objetivos a medio plazo?
MB: Consolidarnos y ampliar puntos de venta, para ser una marca de referencia. Y crecer en España, porque ahora el 85% de nuestras ventas son internacionales.
MH: Dirige a 130 personas, diseña, vende, ¿cómo?
MB: Con pasión y sacrificio. Yo estudiaba Derecho, pero empecé a colaborar con mi padre y el sector me cautivó. Así sigo.
TÍTULO: EL SEXO SENTIDO, NOCHE AMOR, PEDAGOGIA BLANCA,. En contra de lo que se
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