BLOC CULTURAL,

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jueves, 8 de diciembre de 2022

Atención obras - Cine - Niño Josele , . Jueves -8 , 15- Diciembre ,./ Detrás del instante - Cómic 'El fuego', el apocalipsis según David Rubín ,. / TARDE DE CINE CON - Toni Sánchez, más conocido como 'Panxo' ,./ Historia de nuestro cine -Cine - El hijo de la novia ,.Viernes-9, 16 -Diciembre,.

          TITULO: Atención obras - Cine -  Niño Josele ,. Jueves  -8 , 15- Diciembre .

Jueves - 8, 15 - Diciembre  a las 20:00 horas en La 2, foto,.

  Niño Josele,.

 Atención obras - Niño Josele

Cayetana Guillén Cuervo entrevista este jueves en ‘Atención Obras’ al guitarrista flamenco Niño Josele, que ha desarrollado su carrera entre grandes maestros como Paco de Lucía, con quien compartió 10 años de gira, o Enrique Morente, con el que realizó grabaciones y giras.

Este 25 de noviembre se publicaba su nuevo álbum, titulado ‘Galaxias’, tras ocho años de silencio discográfico. Un trabajo en el que Juan José Heredia, Niño Josele, ha contado con la colaboración especial de Rubén Blades, Jorge Pardo, Rosario la Tremendita o el desaparecido Chick Corea. 

Un disco alegre, en palabras del guitarrista, que cuenta con tres bulerías, tres rumbas, unas verdiales y un tema más sentimental, ‘Te recuerdo’, que dedica a su padre. Niño Josele actuará el 2 y 3 de diciembre en Recoletos Jazz, el 16 de diciembre presenta el disco en su tierra, Almería, y en febrero volverá a Madrid, al Teatro Lara.

Ballet Nacional de España y el Niño de Elche

El programa también se acercará a los ensayos del Ballet Nacional de España de su próximo estreno, ‘El loco’. Un espectáculo dirigido por Rubén Olmo, basado en la vida y obra del bailaor Félix “El loco” Fernández, que se representara a partir del 9 de diciembre en el Teatro de la Zarzuela de Madrid.

En este mismo espacio conversará con Paco Contreras, Niño de Elche, el día de la presentación en Madrid de su último disco ‘Flamenco. Mausoleo de celebración, amor y muerte’. Un disco íntimo y austero producido por Raúl Refree.

 

TITULO:  Detrás del instante - Cómic 'El fuego', el apocalipsis según David Rubín  ,.

 Miércoles -14 , 21 - Diciembre a las 20:00 horas en La 2 / fotos,.

 Cómic 'El fuego', el apocalipsis según David Rubín  ,.


Hace apenas un mes David Rubín (Orense, 1977), nos presentaba su nueva obra para el mercado norteamericano, Cosmic detective (Astiberri), un espectacular homenaje a Jack Kirby perpetrado junto a Jeff Lemire y Matt Kindt. Y ahora el dibujante nos sorprende con su cómic más personal, El fuego (Astiberri), una de las grandes obras de este 2022, que le sale de las entrañas, en la que nos muestra el apocalipsis de la humanidad y en la que ese fuego del título lo devora todo a su paso.

Una obra en la que Rubín analiza los problemas de la sociedad actual y en la que no falta la autocrítica. “Es un cómic para el que me he abierto en canal –asegura-, he ardido con El fuego. Es un tebeo duro en el que no me dejo nada en el tintero y lo he hecho del modo más honesto posible, sin pensar en cómo se me juzgará por ello. He hecho la obra que necesitaba hacer y como creía que debía hacerla”.

“Creo –añade David Rubín-, que no hay que tener miedo a exponerse, a ser sinceroEl fuego es mi tebeo más íntimo y personal, pero también es en el que más hablo de nosotros como sociedad. Sobre a dónde vamos y los errores que creo que estamos cometiendo”.

“En tebeos míos anteriores, como Cuaderno de tormentas o El héroe, hablaba de mí, de mis dilemas, mis preocupaciones… Aquí hago eso mismo para hablar de lo que me preocupa de verdad, que es el futuro que nos espera a todos”.

Página de 'El fuego'

Un “creador” enfrentado al apocalipsis

En el fondo, David Rubín es un creador que se enfrenta al apocalipsis, igual que le pasa al protagonista del cómic, Alexander Korba. Un afamado arquitecto al que, cuando un enorme asteroide se dirige a la tierra, levantar con urgencia una colonia lunar para que la humanidad sobreviva. Pero, cuando está en la fase final del proyecto, le diagnostican un tumor cerebral en fase terminal, lo que hará que Alexander se replantee su vida y renuncie a ese proyecto para intentar pasar sus últimos momentos con su familia, a la que había abandonado por su éxito profesional. Una decisión que lo llevará a vagar por un auténtico infierno, interior y exterior, en medio de un paisaje apocalíptico en el que el fuego lo consume todo.

Preguntamos a David Rubín si tenemos que enfrentarnos al Apocalipsis para darnos cuenta de nuestros errores: “Por desgracia parece que a los seres humanos hay que darnos una buena hostia para darnos cuenta de las cosas. Como artista, considero que soy capaz de superarme, de una obra a otra, justamente porque en cada una de ellas aprendo cuáles son mis límites, mis debilidades… y voy buscando las herramientas que son necesarias para mejorar y seguir intentando ofrecer experiencias nuevas a los lectores”.

Página de 'El fuego'

“Por eso, la autocrítica que hay en El fuego me ayuda a seguir creciendo como autor asegura Rubín-. Y creo que eso también sucede a nivel personal. A veces alucino con la gente que va a piñón fijo por la vida, porque yo sufro continuamente con las realidades que nos bombardean cada día. Siempre encuentro motivos para pensar, para mirarme a mí mismo y a los demás y tomarme un tiempo para reflexionar e intentar cambiar lo que creo que no está bien”.

“Y hay mucho de eso en El fuego –añade-. Alexander es un tipo que ha construido toda su vida y sus éxitos en base a castillo de naipes de mentiras tan grande, que hasta ha llegado a creérselo él mismo. Es una persona totalmente alejada de ese adalid de la moral que se ha auto convencido que es. Hace lo que le sale de los cojones y tiene la conciencia muy tranquila. Hasta que la realidad le estalla en la cara y lo pierde todo. Y eso es lo que le hace emprender una odisea en mitad del fin del mundo”.

“Una odisea que le servirá para aprender a aceptarse a sí mismo. A reconocer sus propios errores y aprender a convivir con ellos” –concluye David-.

Página de 'El fuego'

Un largo y ansiado proyecto

El fuego es uno de esos proyectos que se cocinan a fuego lento, durante años, como nos confiesa David: “El fuego nació hace once años, cuando terminé El Héroe. No se llamaba así y tenía otras intenciones muy diferentes. En esa época quería hacer el Antihéroe, en contraposición a ese héroe que acababa de publicar. Pero se me cruzaron Beowulf y Santiago García y comencé mi carrera en Estados Unidos. Pero creo que esos 10 años me han venido muy bien, porque en aquel entonces no tenía el bagaje suficiente para para emprender una obra de estas características”.

“Entonces –añade-, hubiera sido una obra muy, muy diferente, porque yo también era una persona muy distinta. Era la época del 15-M, de la eclosión de nuevos partidos políticos. Y tanto yo como mi obra, albergaban una cierta esperanza de que se podían cambiar y mejorar las cosas. Pero diez años después, el mundo está aún peor y yo soy más pesimista. Y la persona que soy ahora se refleja en El fuego”.

“Además de todas esas temáticas sociales, políticas y culturales, que están presentes en El fuego –continúa Rubín-, también he sido padre, lo que ha cambiado mi visión de la vida. Y hemos sufrido una pandemia mundial que también se ha filtrado en el cómic, que al final ha mutado hasta convertirse en una amalgama de experiencias personales”.

Página de 'El fuego'

Un apocalipsis personal que Rubín emplea para “Hablar del mundo que nos rodea. Uso lo personal para hablar de lo colectivo, lo íntimo para hablar de lo político, lo pequeño para hablar de cosas mucho mayores que nos afectan a todos”.

Por eso, otra de las grandes reflexiones de El fuego es sobre aprender a convivir con los demás: “El protagonista lleva toda su vida erigiéndose sobre hombros de otros, destrozando todo lo que pasa por sus manos, todo lo que ama, dejando tras de sí tierra quemada… aunque en su cabeza cree que es un héroe y que todo lo que hace es maravilloso y por el bien de los demás. Hasta que todo estalla en el peor momento, con el Apocalipsis a la vuelta de la esquina. Y ya no hay donde huir ni dónde esconderse. No hay lugar para la esperanza ni la redenciónEl fuego es una metáfora para hablar de nuestro presente y de la necesidad de aprender a convivir con los demás”.

Por eso, David asegura que El fuego: “Ha sido el mayor reto de mi carrera. Pero también con el que más he aprendido. He aprendido a tener humildad y a no tener miedo a afrontar casi nada”.

Página de 'El fuego'

¿Es el amor la única esperanza de la humanidad?

Preguntamos a Rubín si el amor es la única esperanza de la humanidad. “No sé si es la única esperanza, pero desde luego ayuda mucho. No es lo mismo vivir cosas como la pandemia si hay amor en tu vida, que si no lo hay. Creo que los que pudimos compartir ese encierro con la gente que amamos lo llevamos mejor”.

“En El fuego -añade-, Alexander se da cuenta, de sopetón, que no ha sabido valorar a la gente que lo amaba. Y por eso tendrá que afrontar solo el peor momento de su vida y de la humanidad. Por eso no sé si el amor es la solución a todo, pero desde luego es algo que ayuda muchísimo a sobrellevar las cosas con un poco más de felicidad. Y por eso me siento muy afortunado de haber podido pasar el confinamiento con mi familia y de ser de los pocos que, a día de hoy, todavía no he pasado el covid”.

Después de reflexionar tanto tiempo sobre el fin del mundo, preguntamos a David Rubín cómo se lo imagina: “He reflexionado muchísimo sobre el tema y la verdad es que no tengo ni puta idea de cómo ni yo ni nadie puede reaccionar ante algo tan extremo como es el fin del mundo. Yo era de esos ilusos que pensaban que íbamos salir mejores del coronavirus, que vamos a aprender la lección, y al final, el que era un hijo de puta antes del covid, ahora lo es el doble. Y es increíble que haya gente que critique a los sanitarios, a los mismos que hace dos años aplaudíamos a las 20:00 de la tarde. Ahora se crean fake news contra ellos desde instituciones, y las mismas personas que los aplaudían les culpan de situaciones de las que ellos no tienen la culpa, sino que son las primeras víctimas”.

Creo que no hemos aprendido nada de la pandemia -concluye-. Si mañana estallara otra tampoco estaríamos listos para afrontarla. Lo que me queda claro es que el ser humano está condenado a la extinción. Por eso, en el cómic, vemos que antes de que caiga el meteorito la Tierra, tal y como la conocemos, ya ha dejado de existir. Nos la hemos cargado nosotros mismos dejándonos llevar por el miedo”.

Página de 'El fuego'

“Las consecuencias del cambio climático son terribles”

Otro de los temas muy presentes en el cómic es el cambio climático. “Llevamos más de 15 años hablando del cambio climático y no hemos hecho absolutamente nada –asegura Rubín-. Por eso la historia de El fuego, transcurre en un mundo en donde ese cambio climático ya ha tenido lugar y las consecuencias han sido verdaderamente terribles”

“Desgraciadamente el cambio climático ya es inevitable y va a ser devastador –concluye David-. Ahora lo importante es ver cómo afrontamos este infierno que se nos viene encima en unos pocos años”.

Territorio 9 El Fuego de David Rubín
Territorio 9 - Territorio 9 - El Fuego de David Rubín - 03/12/22 - escuchar ahora
 

“Una obra visceral”

Para denunciar todas estas cosas David Rubín despliega todo su bagaje y su arte, en un tebeo más grande de lo normal, lleno de ilustraciones a toda página y con un color espectacular, lo que convierte la lectura de este cómic en una experiencia sensorial.
Es una obra visceral –confiesa Rubín-. El uso de la narrativa y el color es completamente diferente a mis otras obras. Es un cómic mucho más contemplativo, más pausado, que busca generar y transmitir al lector esas ideas y emociones, no solo a través de la lectura, sino por el mero hecho de sujetar el libro y enfrentarte a esas páginas. Busco que, cuando el lector pase una página, cada una de ellas sea un impacto, una sorpresa

“Por eso -asegura Rubín-, he querido sacar una edición digital, de más de 500 páginas, con el storyboard y con todo el tebeo. Su título es El fuego nunca se apaga. 'Making of' de El Fuego y es en blanco y negro, para que el lector conozca cómo ha sido todo el proceso. Creo que será muy útil para la gente que quiera saber cómo se gesta una obra de esta envergadura, las decisiones que he ido tomando, y todos los cambios que ha habido durante su gestación, como viñetas o diálogos que he eliminado.

Se puede adquirir, a un precio muy módico, a través de un código QR que aparece impreso en la última página del libro o directamente en la web de Astiberri” -añade Rubín-.

Página de 'El fuego'

Un cómic que busca crear industria

Después de más de 10 años de éxitos en el mercado estadounidense, donde incluso ha sido nominado a varios premios Eisner, preguntamos a David Rubín por qué ha querido crear El fuego para el mermado mercado español. “Porque es importante crear aquí industria –asegura-.Yo no me considero ningún salvador ni estandarte de nada. Pero soy consciente de la repercusión de mi trabajo en Estados Unidos y de que gracia a eso mis cómics se venden mejor aquí. Y quiero usar esa repercusión no solo para mi propio beneficio sino también para beneficio de otros artistas que no pueden publicar aquí sus cómics”.

Es fundamental apostar por el cómic español hecho en España –añade-. Que la gente vaya a las librerías de cómics y compren cómics hechos aquí. E intentar vender luego esas obras al extranjero. Justo lo contrario de lo que se hace ahora”.

“Sin apostar por la producción autóctona –añade-, nunca podremos tener una industria fuerte. Por eso yo he hecho este sacrificio, de estar más de un sin ingresos, de renunciar a encargos por los que otros matarían, para apostar por una obra hecha en España. Afortunadamente, tengo un colchón económico suficiente para podérmelo permitir”.

“En España tenemos algunos de los mejores dibujantes del mundo y prácticamente solo pueden dedicarse a esto los que trabajan para Francia o Estados Unidos. Por eso tengo la esperanza de que este experimento funcione y no solo me vaya bien a mí, sino también a otros autores. Y que los lectores descubran el enorme talento que hay en el cómic español” –concluye Rubín-.

Portada de 'El fuego',.

 

TITULO:TARDE DE CINE CON - Toni Sánchez, más conocido como 'Panxo' ,.

 

  Toni Sánchez, más conocido como 'Panxo' ,.

El fútbol es un negocio asqueroso, pero también un deporte bonito",.

Toni Sánchez Panxo, cantante y letrista de la banda Zoo
foto / Toni Sánchez Panxo, cantante y letrista de la banda Zoo ,.

Toni Sánchez, más conocido como 'Panxo', es cantante y letrista de Zoo, una de las bandas referencia por sus mensajes cargados de contenido social y político

"Un ascenso es una sensación de la ostia, de las cosas más bonitas del fútbol, no es comparable a ganar una Champions", confiensa el levantinista

Toni Sánchez, más conocido como 'Panxo', es el líder de la banda musical Zoo, originaria de Gandía. Sus letras cargadas de contenido social y político les ha catapultado como uno de los grupos de referencia. Nació siendo del Real Madrid, pero renunció a ello cuando fue a la universidad para dejar aflorar su sentimiento levantinista. Tras 'Tempestes vénen del sud' y 'Raval', hace justo un año lanzaron su tércer álbum: 'Llepolies', con el que inician un camino hacia la autogestión, siendo este su primer disco publicado bajo su propio sello discográfico y editorial. En diciembre cerrarán su gira de presentación en el Palau Sant Jordi ante casi 20.000 personas, en lo que 'Panxo' lo considera como el día de su particular boda.

Hoy a las 21:00h, Levante-Barça, lo podrás ver desde tu asiento de la grada de los ‘pobres’, como la llamas?

No lo veré desde la grada. Estoy en Gandía, a una hora de Valencia. Tengo mi abono compartido con un amigo e irá él. No es de lo partidos que más me gusta ver, los del Barça o Madrid, y menos tal y como está el Levante ahora.

Para el Barça nunca ha sido un paseo ir al Ciutat de València...

Creo que un empate sería bastante bueno y una victoria nos ayudaría a empezar a soñar con la salvación. Una derrota sería lo más normal, así que apuesto por un 1-1.

¿Crees que esta será la temporada de despertar del ‘sueño’ y bajar al infierno de Segunda?

Despertar del sueño suena un poco mal, ya llevamos varios años en Primera... Pero pinta mal. Si bajamos, lo importante será subir rápido, porque si caes en el pozo se vuelve más complicado.

Habéis vivido dos décadas de una realidad en la que, históricamente, el equipo no estaba acostumbrado.

Salvo un descenso, estos últimos 12 años los hemos pasado en Primera. El Levante tiene una buena estructura para consolidarse arriba, pero en los últimos años se han hecho cosas muy mal y ahora lo estamos pagando.

Te he escuchado decir alguna vez que has agradecido llegar al éxito más bien tarde, algo que contrasta en el Barça con Gavi, que es menor de edad, o Pedri y Ansu, que lo eran hasta hace muy poco.

Supongo que es diferente. A lo que yo me dedique está rodeado de mucha mala vida y nocturnidad. De los futbolistas también, pero tienen más exigencia y control externo. En los jugadores pasa más al revés, el examen lo tienen cuando acaban sus carreras, cuando les toca administrar el dinero y la fama.

Naciste siendo seguidor del Real Madrid, ¿qué recuerdo guardas de aquella época?

Bueno, en un diario como el vuestro tampoco me hagas decirlos (risas). Fui madridista hasta que renuncié y me hice del Levante.

¿En qué momento y de qué manera haces ese ‘clic’?

Diría que fue cuando fui a la universidad, yo ya tenía un sentimiento hacia el Levante, pero no tiene una masa social fuera de Valencia. Miraba sus partidos en el teletexto, cómo iba en la clasificación... También me llega a través de mi antivalencianismo, que este se deriva de mi antimadridismo.

Cuesta dar un cambio así con estas edades...

Para mí no lo fue. Con 17 años fui a Benimaclet, un barrio valenciano que está al lado del estadio del Levante y conecto con la historia del club y su masa social. Es entonces cuando empiezo a vivir el Levante desde dentro. Desde los 18 años que tenía hasta ahora que haré 40, son más de 20 años de levantinismo. Las afiliaciones futbolísticas son difíciles de explicar. Ya lo dicen, ‘no trates de entenderlo’. Pasa un poco eso. Es irracional, pero no me partiría la cara por el Levante.

¿Cómo de difícil es ser del Levante?

Lo es, y mucho. Y más este año. Somos un equipo de sufridores. Tendemos a complicarnos la vida, incluso en los mejores años durante las segundas vueltas. Pero eso me engancha y me gusta, porque las victorias tienen un sabor más especial. He vivido cuatro ascensos y esa sensación es la ostia. De las cosas más bonitas que puede haber en el fútbol, no es comparable a la de una Champions. Sobre todo el ascenso de un club humilde, no como cuando lo hizo el Atlético de Madrid. Estar en Segunda y lograr subir 40 años después es muy bonito.

¿Es compatible ser futbolero y odiar todo lo que envuelve al fútbol?

Es contradictorio, como casi todo en este mundo. Más teniendo unas ideas como las que puedo tener yo o la gente de mi entorno. El fútbol es un negocio asqueroso, pero es un deporte muy bonito. Me gusta mucho ir al campo, con los amigos, hacer la previa... Eso es la ostia.

El fútbol logra aflorar unos sentimientos que pocas otras cosas pueden hacer, ¿no?

Ha habido algún momento de mi vida en que he vivido de forma más amarga estas contradicciones. Ahora lo relativizo e intento disfrutarlo. Soy del Levante, lo vivo con mucha pasión, pero no soy un fanático ni entraría en una discusión por fútbol. Con 14 años quizá sí, ahora no.

Ahora hace un año que salió vuestro tercer álbum ‘Llepolies'. 22 cabrons encenen la grada, la penya malhumorada perquè no entra el balonet aparece en la canción ‘La del futbol’. ¿Cómo surge?

Esta es una canción que tiene dos ánimos. Refleja cómo hice las canciones en este disco, quizá de una manera más anárquica y sin ceñirme a un concepto único. Tiene la parte futbolística y de la corrupción de los Borbones. Surge por ese elemento alienante que tiene el fútbol, de la manera en como se vive y se consume ahora, que nos distrae de las cosas relevantes. Es más un consumo, que no una pasión.

¿El fútbol es lo más importante de entre las cosas menos importantes?

Es una frase que me gusta, pero ahora mismo no me representa. Es muy bonita y acertada. Todos los que hemos conectado con el fútbol, nos ha representado en algún momento. Por ejemplo, cuando vives un ascenso con el Levante. Joder, es una sensación muy bonita y poco comparable a otras cosas.

Anteriormente, en ‘El cap per avall’, también había otra referencia al movimiento de ultraderecha en el fútbol (Alça la ma dreta l’afició a la corba nord). ¿Tenías ganas de hacer una crítica más sosegada?

El aspecto crítico en 'Llepolies' está tratado de una manera más irónica o burlesca. Aquella expresión fue muy atrevida, sobre todo en el País Valencià, señalando una verdad como es que en la grada del Valencia está llena de nazis y de gente muy vinculada a la extrema derecha. Siempre han sido amos y señores, desde que tengo uso de razón. Tienen mucha impunidad, lo han hecho siempre.  

Fútbol y política siempre han ido de la mano, ¿por qué cuesta tanto aceptarlo y reconocerlo?

Es una pregunta que tiene un debate muy largo y complejo. El fútbol es un negocio muy grande que mueve muchos intereses. Una masa social inequívocamente de izquierdas solo encontramos en el Rayo Vallecano. Quizá Osasuna, pero no, porque Pamplona es la ciudad del Opus Dei, así que no (risas). Siempre hablo mucho del Ciudad de Murcia como club que tiene una filosofía de izquierdas en la práctica y asume las consecuencias de ser un club así hasta el final. El Rayo, por contra, tiene una presidencia y una directiva que no lo son.

A pesar de que el fútbol siempre ha sido un enorme altavoz mediático, ¿echas de menos que algún futbolista de primera línea se posicione de esta manera?

Creo que los clubes presionan para que no se posicionen políticamente de cierta manera, siempre hacia la misma dirección. A Roberto Soldado o Salva Ballesta nunca les censurarán, pero si hay un futbolista que está a favor de causas justas, progresistas, o de izquierdas –llámalo como quieras–, se le dirá desde la directiva o desde donde sea que no se meta ahí. Creo, ¿eh? Es la intuición que tengo.

Siempre quedará la música para apuntar hacia arriba, ¿no?

En la música y cualquier disciplina artística, siempre hay una corriente que es transformadora, es intrínseco del arte. El fútbol es un deporte y esto no se admite, a pesar de los casos contados que hacen del antirracismo su bandera y una condición ‘sine qua non’.

¿Te has mordido la lengua alguna vez por miedo a las consecuencias que podrían comportar tus letras?

Por mí no tengo miedo, pero sí por mi madre o mi padre, que ellos sufren de que alguien me pueda hacer algo. Mi posicionamiento es público. Con los casos de Hasél o Valtònyc, quizá sí he tenido algo más de miedo, pero nosotros no somos los más explícitos. No creo que seamos los primeros en la cola. Ahora que los de Vox se están haciendo fuertes, comentamos con los amigos que si llegan al País Valencià –que esperamos que no–, acabarían cortando con el circuito de la música en valenciano y nosotros seríamos de los primeros.

¿Tienes constancia de si alguna de tus letras ha sonado en algún vestuario de fútbol?

Hace poco vi un vídeo en un vestuario femenino, pero ahora no recuerdo cuál era, donde sonaba la canción de ‘Tobogan’, así motivándolas. Me parece que ha sido la única vez. Me emocionó, claro.

 

TITULO:  Historia de nuestro cine -Cine - El hijo de la novia ., Viernes-9, 16 -Diciembre,.

 

 El Viernes   -9 , 16-Diciembre a las 22:15 por La 2, foto,.

 

 El hijo de la novia

Reparto
 
Rafael dedica 24 horas al día a su restaurante, está divorciado, ve muy poco a su hija, no tiene amigos y elude comprometerse con su novia. Además, desde hace mucho tiempo no visita a su madre, internada en un geriátrico porque sufre el mal de Alzheimer. Una serie de acontecimientos inesperados le obligan a replantearse su vida. Entre ellos, la intención que tiene su padre de cumplir el viejo sueño de su madre: casarse por la Iglesia.

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